Capítulo 8

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Tan pronto como Changmin entró en la sala de conferencias a la mañana siguiente, se encontró con una confrontación. Al menos esta vez podía tener un poco de consuelo, ya que no se centraba en torno a él.

—Yo voy a hacerlo y nada de lo que digas o hagas me va a detener —Minwoo gritó, escupiéndoselo en la cara a Donghyun.

—Cómo el infierno que vas a ir. Te arrastraré de nuevo a nuestro dormitorio y te ataré a la cama si tengo que hacerlo —dijo Donghyun, la mirada oscura de tormenta cada vez mayor. La mayoría de los cambiaformas habrían dado un paso atrás, pero Minwoo dio uno adelante.

Changmin no podía dejar de estar impresionado por los cojones del niño. —Vaya ¿qué está pasando? —Changmin preguntó mientras se sentaba junto a Donghae.

—¿Quieres decir, además de los años de terapia que me costará la observación de Donghyun sobre las esposas? — Donghae levantó una ceja.

—Sí —dijo Changmin feliz de que Donghae y él estuvieran en buenos términos después de todos los eventos de la noche anterior.

—Bueno, tu buen amigo, Changjo, se ofreció a entrar con el pretexto de asistir a la pre subasta, y así poder reunir información para nuestro ataque.

Changmin se encogió de hombros. —Eso tiene sentido. No queremos atacar sin conocer primero el diseño del edificio.

Además, sería más fácil y más seguro para los cautivos si sabemos dónde están antes de empezar a destrozar el lugar.

—El problema es que Changjo no puede llevar una cámara oculta ni nada parecido, porque los lobos podrían olerlo en él —señaló Donghae con una expresión sombría cada vez mayor.

Changmin susurró en voz baja cuando finalmente se dio cuenta de qué era exactamente lo que Minwoo y Donghyun habían estado discutiendo. Aunque no podían enviar una cámara, tenían a alguien mejor. Alguien con una memoria fotográfica. —¿Qué dice Yunho sobre todo esto?

Yunho estaba al otro lado de la habitación, sumido en una profunda conversación con Changjo. Ni siquiera parecía darse cuenta de que Minwoo y Donghyun se gritaban el uno al otro.

—En realidad, créelo o no, pienso que Yunho puede ir a por ello. Minwoo se haría pasar por esclavo de Changjo, así que él estaría protegido y nosotros estaremos cerca de la carretera todo el tiempo —dijo Donghae.

Changmin continuó estudiando a Yunho. No habían hablado en absoluto desde la confrontación con Changjo. Changmin estaba preocupado y fastidiado, y se preguntaba si tal vez Yunho quisiera terminar las cosas con él, ahora que todo había salido por fin a la luz. Casi como si sintiera su angustia, Yunho miró a Changmin. La mirada del jaguar se suavizó, y Changmin no pudo contener la sonrisa vertiginosa que se extendió sobre sus labios.

—Oh Dios mío. —Donghae se quejó de forma espectacular—. Changjo estaba en lo cierto sobre vosotros dos, ¿no?

Changmin no retiraba la mirada de Yunho. —Sí, lo estaba.

—Ahora sabemos por qué Yunho insistía en interrogarte en privado. —Donghae negó con la cabeza, como si sólo estuviera aturdido por el comportamiento juvenil.

Changmin no se dejó engañar por un segundo. Dejó escapar una risa malvada. —¿Qué puedo decir? A mí me gusta la táctica de interrogatorio de Yunho.

—Yyyyyyy... ahora necesitaré más terapia —Donghae arrastró las palabras.

—¿Cuánto tiempo llevan así esos dos? —Changmin hizo un gesto hacia Minwoo y Donghyun.

—Unos quince minutos. No importa lo mucho que Donghyun grite. Minwoo acabará saliéndose con la suya.

—¿Cómo puedes estar tan seguro de eso?

Serie de los CP 04 - Intenciones CarnalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora