| 7 |

90 15 3
                                    

Shigeo sentía que había pasado una eternidad desde ese día afuera de su lugar de trabajo. Las palabras de Tsubomi continuaban rebotando dentro de su cabeza, habiendo dejado sus propias huellas durante el tiempo transcurrido. Desde entonces no le había llamado, a pesar de tener el móvil encendido, sin embargo algo dentro suyo le decía que no perduraría demasiado fuera de escena.

Lo más doloroso del asunto es que no sabía cómo sentirse, o cómo tomar la aparente promesa que le había hecho. Es que acaso ella no se daba cuenta del peso que una infidelidad acarrea consigo? por qué actuó como si nada hubiera pasado? encima cómo regresaría con ella si había traicionado y vuelto en mil pedazos no sólo la confianza que le había entregado, sino prácticamente todo de él, todo lo que le conformaba hasta antes de ver esas jodidas fotografías.

A momentos pensaba que estaría mejor si nunca las hubiera visto. Si tan solo Mezato no llevara esa estúpida cámara a todos lados...

Ahogó un grito contra la almohada, sintiendo nuevamente cómo la piel de sus mejillas volvía a humedecerse junto con la pesadez propia de un llanto a medio contener, repercutiendo inevitablemente en sus párpados. Detestaba el hecho de estarle concediendo a Tsubomi una vez más aquellas lágrimas, como si en realidad las mereciera, y aún así... qué más podría hacer, aparte de llorar? gritarle unas cuántas verdades a la cara no cambiaría lo que le hizo, no haría que el tiempo rebobinara a cuando seguían siendo felices... o es que acaso sólo él estaba experimentando ese tipo de sentimiento?

Un nuevo nudo comenzó a apretar considerablemente su garganta, negándose a caer como un idiota en aquel abismo que creyó estar olvidando hace tan solo unos días atrás. Era ciertamente doloroso regresar al punto de inicio, pues lo que le esperaba en éste no era más que decepción y una profunda desolación que a momentos amenazaba con consumirle en su totalidad.

En qué punto de su vida le pareció una buenísima idea enamorarse de ella? por qué no pudo mantener esa amistad que tenían, sin tener que comprometer más de lo que en realidad debió entregarle? seguramente no habría sido la crueldad hecha persona de haberla continuado visto tan solo como una amiga.

«Esto es lo que consigues cuando dejas ganar al corazón»

Sin muchos ánimos se incorporó, quedando sentado sobre su cama y contemplando por un instante hacia la ventana. Afuera apenas atardecía, con el sonido de los vehículos resonando como un débil murmuro allí en el exterior, ofreciéndole una extraña sensación de confort; había tenido suerte de que aquel día su turno finalizara antes de lo pactado, habiéndose hartado a media jornada de fingir que no estaba en la mismísima mierda, debiendo hacer un esfuerzo casi sobrehumano por lucir alegre y normal delante de la clientela.

Tampoco le importó mentirle a Inugawa en cuanto le preguntó si es que se encontraba bien, ya que no estaba en sus planes serle sincero a nadie esa mañana, limitándose a actuar simplemente distante y reiterando a su manera que no tenía los ánimos suficientes para hablar, y menos con su jefe. Agradeció en parte que el bajón emocional le sobreviniera al estar ya en casa, encerrándose en su habitación y permitiendo que aquellas emociones amargas le hicieran acabar como ahora, nuevamente hecho un desastre.

Finalmente, y con la vista algo nublada, Shigeo se levantó y se encaminó al baño, cerrando luego la puerta y mojándose posteriormente el rostro, buscando eliminar todo rastro líquido proveniente de su corazón roto. Terminó con ambas manos apoyadas en el lavabo una vez cerró la llave, inspirando un par de veces y acordando para sí mismo olvidar las palabras carentes de sentido de Tsubomi, decidido a cerrarse en banda a regalarle una nueva oportunidad.

Nada lograría hacer que el daño ya hecho desapareciera, ni aunque intentara besarle otra vez, mucho menos que tratara de establecer hasta el más mínimo contacto físico con él. No podía permitirle adentrarse a sus anchas en su vida otra vez, porque algo en el fondo le advertía que le volvería a lastimar, habiendo perdido mucho más que su confianza con aquella traición.

Encrucijada De Un Corazón Roto | ReiMobDonde viven las historias. Descúbrelo ahora