••La Vida de una Sumisa••

11

Llegamos a una casa y Theo paro el auto. Phoebe bajo desesperada y yo iba a salir cuando Theo agarro mi mano.

-Que pasa Theodore ?-dije sonriendo

-No quiero que aceptes cosas de Mark, si?-dijo preocupado

-Por qué?-dije levantando una ceja

-Solo no aceptes, si?

-Esta bien- dije antes de darle un corto beso para despues salir del auto. Espere a que Theo se bajara del auto y cuando este entrelazó nuestras manos, caminamos juntos hasta la puerta de la casa en la que se encontraba Phoebe esperando. En eso un hombre alto de pelo rubio rizado con ojos celestes nos abrió la puerta.
-TIO ELLIOT!!!- grito Phoebe tirándose a abrazarlo.
-Hola Phoebe bonita- dijo antes de mirarme. Phoebe lo noto y se separó de el
-CIERTO. Ella es Demetria... la que ESO-dijo haciendo gestos a lo que me puse roja- con Teddy
- Hola. Como esta?- dije aún con rubor en mis cachetes a Elliot
- Estoy bien, pero no me trates de usted, somos familia -dijo estrechandome en sus brazos.
Le correspondi el abrazo algo extrañada y después nos invito a pasar.
La casa era parecida a la de Teddy pero con colores más calidos
- Sentite como en tu casa- dijo antes de que una señora rubia apareciera.
- Hola mis sobrinito hermosos - dijo abrazando a Phoebe y cuando se giró a abrazar a Teddy dijo - AY MI SOBRINITO QUE GRANDESITO QUE ESTA- Mientras le tironeaba los cachetes. Teddy sufría. Mucho. (YO SE QUE SE SIENTE *Mai*) Se giró a mirarme cuando terminó con una sonrisa
- Y quien es esta señorita?- dijo como si viviera en una burbuja
-Tía, esta es Demetria, mi sumisa- Dijo Teddy atrayendome hacia el poniendo su mano en mi cintura
- Un placer- dijo extendiendo su mano
- El placer es mio-dije estrechandole la mano
-MARK Y BILLIE VENGAN AHORA!! - grito antes de que 2 chicos bajarán las escaleras. Uno tenía el pelo rubio ceniza y los ojos celestes, y el otro tenia el pelo marrón y los ojos celestes.
-Demetria, ellos son Billie-dijo señalando al de ojos celestes- Y este es Mark- dijo señalando al otro con ojos celestes tambien.
- Hola- dije estrechandoles mi mano a cada uno. Cuando saludé a Mark, este me abrazó causando que mi mano quedará en su entrepierna. La retire algo sonrojada y volví al lado de Teddy. Sentí su mano en mi espalda y como esta bajaba lentamente hasta mi culo. Me giré hacia Teddy con los ojos abiertos y este sonrió. En eso una voz se escucho desde atrás
- Mami, Que esta haciendo el primo Teddy?
En eso se giraron todos a mirarnos.
-Que? Yo no estoy haciendo nada, Ava
- Si! Yo te vi! Le estabas tocando las pompis
- Mentira! -murmuró todo colorado.
- Theodore Grey! En donde están tus modales? -lo reprimio su tía.
- Pero..
- Ya déjalo, seguro estaba dándole un abrazo y se le bajo la mano- dijo Elliot en su defensa
-Si fue eso- dijo antes de abrazarme
- Okey... - dijo Ava antes de que nos separamos- DEMETRIA JUGAS A LAS BARBIES CONMIGO?
- Bueno, esta bien- dije antes de que me agarrara la mano y me arrastrara hasta su pieza. Mientras me arrastraba, mire a TEDDY que estaba conteniendo la risa.
- VOS TAMBIEN VENIS- dijo Ava agarrandole la mano a Theo y arrastrandonos a los dos hasta su habitación.
Entramos en ella y todo pero TODO era rosa, la cama, los muebles, las sábanas, las cortinas, el velador y hasta el marco de la ventana era rosa. Había millones de peluches en su cama, la mayoría ponys; un tocador rosado también, en el que tenía varios maquillajes desparramados. Además había un gran armario, que gracias a Dios era blanco.
- Sientense- dijo soltando nuestras manos y sentándose con las piernas cruzadas en el piso. Se estiró hasta el tocador mientras nos sentabanos en el piso. Vimos como abrió un cajón y saco una caja gigante de el.
- Quien quiere empezar? -dijo con una sonrisa demoníaca. Instivamente nos señalamos entre los dos. Ava volvió a sonreír y se nos fue acercando- Teddy... osito Teddy -murmuró en voz baja.
- NO PUEDO SOPORTAR ESTA PRESION -grito interrumpiendola para salir corriendo a la puerta, intentó abrirla pero le fue inútil ya que estaba trabada.
- La cerré con llave para que no puedan escapar *okey, estoy empezando a asustarme*
Teddy la miro, le hizo fuck you y retrocedió unos pasos *Ay no, que vas a hacer bebe*. Se lanzó contra la puerta con ideas de derribarla, pero en menos de un segundo estaba tirado en el piso sobandose la cabeza.
- Demetria, no dejes que se escapé! -chillo la niña.
Le hice caso y me le acerqué. Rápidamente me senté sobre él, rodee mis brazos en su cuello mientras sonreía con malicia.
- Señorita Patrick, que hace? -murmuró algo sorprendido.
- Nada, Señorito. Acaso le molesta esto? -moví mis caderas lentamente- O esto? -susurre en su cuello al mismo tiempo que besaba su cuello.
- De-demetria... Ava nos está mirando.. No-no quiero que me mate mi tia..
- No sabe lo que estamos haciendo, no pasa nada -dije agarrando sus manos detrás de su espalda.
- Ava, tapate los ojos -dijo mirándola. Le guiñe un ojo a la pequeña y lo hizo.
- Mmm Teddy, mi dulce Teddy -bese su cuello otra vez- Ya puedes abrir los ojos, Ava
- Que?
- Que ya puede abrirlos -los abrió.
- Que mierda es esto?! Por que me ataste las manos!
- Porque si -dije inocentemente- Aprendí del mejor
- Estas actuando en complot con este pequeño demonio? -murmuró señalando a la niña.
- Claro que si
- Te voy a...
- Shhh hay una niña presente -le saque la lengua y soltó un bufido.
- Demetria es la mejor del mundo!!
- Gracias, princesita. Chocame esos -chocamos los cinco.
- Ahora, es hora de la transformacion -sonrió enseñando sus pequeñas perlas blanquicinas.
- NOOOOOOOO, PIEDAD! TIO ELLIOT, AYUDA!! BILLIE! MARK! ALGUIEN!!
- Shhh, ya no hay escapatoria Grey
- La puta madre, no me llames así -gritó.
- El vocabulario, primito! -le dijo Ava entre risitas.
- Bueno, Teddy, quédate quieto y no te resistas o no hay sexo por un mes -le susurre lo último porque no quería traumar a Ava, era muy tierna e inocente.
Rodó los ojos y lo "cargue", en realidad lo arrastre por el piso hasta una silla de princesas. Lo bueno fue que ni se movió y no me hizo tan imposible la tarea, Theo sabía que era capaz de dejarlo sin coger.
- Demetria, queres ser mi ayudante maquilladora? -dijo con su voz tan adorable.
- Esta bien
Abrí la caja de maquillajes y me asombre al ver más de medio millón de estas cosas raras que le gustan a las sumisas, digo putas.
- Base
- Base -murmure extendiendosela. Ella se la aplicó en toda la cara a Theo, solté unas cuántas risitas
- No se ría, me las va a pagar -dijo agarrandome de la pierna. Le pegue en la mano así me soltaba ya que casi me caigo por su culpa.
- Sombra rosa -murmuró la pequeña.
- Sombra rosa -repetí con una sonrisa al dársela.
- Delineador
- Deli... Espera, estas segura? No queres que yo lo haga?
- No no, yo puedo
- Pero sos algo chiquita -le dije.
- No, yo puedo -insistió.
- Esta bien, pero con cuidado, lo necesito con vida
- Aleja esa cosa de mi! -chillo Teddy al ver que Ava se acercaba con un objeto que podría sacarle un ojo.
- Tranquilo, osito Teddy. Todo va a salir bien. Sólo tenes que mirar para abajo
- No!
- Queres que grite? Y que venga mi mamá y te rete? Ella puede llamar a la tuya y castigarte -Me tragué la risa, literalmente.
- Augh, esta bien -bajo la vista y Ava lo delineo con cuidado-... AHH!
- Oops, perdón
- Casi me quedo sin ojo, eso dolió Ava -murmuro serio.
- Ay pero que exagerado -dije entre risas
Ava continuo con su trabajo, a pesar de que Theo se quejaba. Ya le faltaba poco, sólo el labial y su obra maestra quería terminada. Apuesto a que va a elegir uno rosa.
- Que opinas Demetria? Rojo o rosa?
- El rojo
- Esta bien -dijo con una sonrisa de ángel.
- ALEJA ESA COSA ROJA DE MI
- Pero te estoy haciendo un favor, ahora te ves más lindo
- Soy perfecto, no necesito maquillajes -dijo la diva.
- Si claro -murmuró abalanzandose y pintandolo desprolijamente.
- Listo! Quedaste hermoso
Desate a Teddy de la silla y este camino hasta el espejo que se encontraba en el tocador. Soltó un grito y varias maldiciones:
- Ay por Dios! Mi cara! Mi perfecta cara!!! Mis ojitos celestes hermosos!... Que me hicieron, monstruos?! Las voy a... -el sonido de la puerta abriéndose lo interrumpió.
- Ey, Teddy, queres acompañarme a comprar el postre?? Es el cumpleaños de Mark y tu tía insiste en comprar helado -Teddy se dio vuelta y lo miro- Ay... Pero que te hiciste en la cara?.. Ava, ya le tomaste fotos? -dijo soltando una carcajada.
- Claro, papi
- Esa es mi chiquita.. Vendrás de todos modos, Theodore
Teddy y Elliot se fueron dejándonos a Ava y a mi solas.
- Puedo pintarte? -asenti aterrada pensando que podía terminar como mi novio, no se si decirle así, en teoría es mi amo, pero da igual.
La niña se me acerco y comenzó a maquillarme, lo hacía suavemente, con una delicadeza total, como si fuera una muñeca de porcelana y llegará a romperme. Estuvo un rato, pero para mi fue media eternidad. Mientras me pintaba pensé en la víspera de mi cumpleaños, Vee y yo en casa, ella maquillandome y armandome de valor. Sin duda era uno de mis recuerdos más inolvidables, nuestra última noche juntas; yo sabía que nos separariamos y que todo ya no sería como antes.
Casi lloro de la felicidad, o tal vez tristeza, quizá nostalgia era lo que sentía. Anhelaba con volver el tiempo atrás y verla de nuevo.
- Demetria.. Demetria
- Que? -murmure abriendo mis ojos lentamente. Camine hasta el tocador y me observé por un buen rato.
- Te gusta? -Sin duda esto no era como lo de Teddy, yo estaba hermosa y el... daba lastima.
- Me encanta, es hermoso
- Te queda muy lindo, vos sos muy linda. Espero ser algún día como vos
- Awww, vos también sos muy hermosa y tenes un gran don para estas cosas
En eso, alguien abre la puerta dejando ver a Kate y a Mark.
- Ava, queres acompañarme al supermercado a comprar chocolate?
-SII! - Dijo antes de salir corriendo con Kate detrás de ella. Quede sola con Mark y había un silencio incómodo que el mismo rompió
-Queres comer algo?- dijo señalando a la cocina
-Es comida, obvio que quiero - dije antes de salir de la pieza de Ava para encaminarne a la cocina. Cuando llegamos, Mark fue a la heladera y sacó unos brownies
- Queres uno?-dijo señalando la bandeja
-Okey, es comida- Dije antes de agarrar uno para metermelo entero en la boca ya que no era un pedazo grande. Después de un rato, se me nublo la vista un poco pero no le preste atención
- Me estoy mareando, creo que voy a sentarme- dije yendo hacia el sillón. Me senté en este y empecé a sentir que todo a mi alrededor se movía. Dirigí mi mirada hacia una pecera