Miha y el Doctor caminaban por una zona nueva del mercado, ya que el rastro de la energía que Handy iba dejando les llevó hasta allí. Todo estaba recién estrenado, aún olía a pintura fresca y madera recién cortada. Muchos puestos no habían abierto todavía, pero se notaba que pronto habría algo en ellos.
Una mujer gritaba muy alto una lista de pescados que vendía mientras un joven muchacho recitaba algo más tímido una lista de frutas y los precios. El Doctor volvió a hacer un barrido con el destornillador sónico para asegurarse que iban por el buen camino.
Miha paró un momento y el doctor frenó en seco para que ella no se quedara atrás.
—Necesito un respiro, Doctor—Dijo ella sentándose en unas cajas.
—Cierto, paremos un poco.
El se sentó a su lado y ella se miró las manos:
—¿Y sí Handy no quiere volver a casa?
—Pero bueno, hace un momento me dijistes que confiabas ciegamente en tu hermana ¿Y ahora te entran dudas?
—Lo sé, lo sé… Tienes razón Doctor, pero esa mirada… No consigo quitármela de la cabeza.
Él miró a la chica en silencio, vio sus ojos tristes, con lágrimas a punto de brotar.
—Te he prometido que todo se va a arreglar, voy a hacer todo lo que esté en mis manos para que recuperes a tu hermana, confía en mí.
—Gracias Doctor.
Miha miró hacia un callejón por qué le pareció ver algo, su cara cambió radicalmente, se iluminó su mirada y sonrió de una manera exagerada:
—¡Mira Doctor! Va por allí, es ella.
—¡Vamos, Corre! Esta vez no la perderemos.
Ambos se acercaron a la joven chica lo más rápido que pudieron, Miha se quedó delante de Handy la cual pareció sorprenderse un poco al verla aparecer de golpe.
—¿Pero qué haces aquí Miha? Te he advertido antes de que no me sigas.
—¡Handy, por favor, para de una vez con esto!
Miha miró de reojo al doctor, el cual le hizo un gesto para que siguiera distrayendo mientra el se acercaba cautelosamente con el sónico hacía la muchacha.
—¿Entonces ya no te importan papá y mamá?
—No.
—¿Y yo?—preguntó con un hilo de desesperación en la voz.
—Tampoco…
Handy pareció dudar durante un instante y se quedaron ambas en silencio.
—¡Es el colgante!—Gritó el Doctor de golpe—. ¡Quítaselo!
Miha miró el colgante de su hermana, el cual comenzó a brillar con una luz amarilla, la chica intentó cogerlo, pero Handy la esquivó, tras eso empujó a su hermana y comenzó a correr muy rápido. El doctor se acercó a la chica que estaba en el suelo y la ayudó a levantarse.
—¿Estás bien?
—Sí, vamos Doctor, no podemos perderla de vista de nuevo.
El Doctor afirmó con la cabeza y volvieron a correr tras la chica.
Alcanzar a la muchacha fue bastante complicado ya que corría demasiado rápido, al final Handy tropezó con unos escombros, lo que hizo que Miha la pudiera coger del brazo:
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The love of the doctor
FanfictionLa vida del doctor ha sido muy larga y complicada, pero también lo fue su primer amor. Su relación con el master siempre ha sido tormentosa y difícil, es confuso como el límite entre el amor y el odio se rompió para ambos cientos de veces. El doctor...