"SOLO QUIERO SABER QUE ES MEJOR QUE SEPAS" - aurora kingsley se enamora de su antigua mejor amigo después de que ambos obtengan poderes y se conviertan en superhéroes.
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dos: el futuro?
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EL SONIDO DE LOS TACONES CHASQUEANDO EN EL SUELO DE MÁRMOL.
Una mujer morena, con el pelo recogido en un moño perfecto, caminaba por los pasillos de la policía de Nueva York. Llevaba carpetas, diez para ser exactos, y su anillo de casada en el dedo brillaba con las luces. La mujer hacía que la gente la mirara, algunos sonreían, otros temían... todos sabían quién era. La mujer llevaba una falda roja, un blazer rojo con un jersey negro de cuello alto debajo.
La mujer tenía una cicatriz a lo largo de la garganta, cubierta por el cuello de tortuga. Estaba imitando, eso estaba claro. Sus tacones eran el único sonido que se oía en aquella oficina, todo el mundo se detuvo y se quedó mirando. La mujer sonrió a los chicos que estaban sentados ahí, los chicos se sonrojaron y desviaron la mirada- las chicas se quedaron con la boca abierta.
—Buenos días, señor Jameson—,dijo la mujer, dejando las carpetas sobre su escritorio. Salió rápidamente y se fijó en el hombre que estaba sentado al teléfono. Los pasillos de la policía de Nueva York estaban vacíos, la gente estaba reunida o sentada esperando la siguiente llamada. La mujer se detuvo en el pasillo, oyó pasos detrás de ella...—Estaba esperando su llegada, Sra. Julin—.
Lindsey Julin se quedó de pie, con los ojos fijos en la mujer que tenía delante. Tenía un aspecto diferente, mechas en el pelo, cicatrices en los brazos y, por supuesto, el brazo falso. Lindsey tragó saliva incómoda y se movió sobre la pierna derecha, que cojeaba al dar un paso adelante.—No esperaba verte aquí—,se rió la Julin, con una suave sonrisa en el rostro.
La mujer de rojo se encogió de hombros:—Sólo quería dejar unas carpetas antes de irme—.Lindsey se apoyó en la pared de al lado, las dos ex amigas se miraron en un cómodo silencio. La mujer rebuscó en su bolso y sacó una carpeta:—Ésta es para ti—.
Lindsey agarró la carpeta; la abrió para ver el titular que nunca salió al aire. Sintió que se le llenaban los ojos de lágrimas.—Pensé que necesitaban un cierre—,dijo la mujer de rojo, con voz temblorosa. Lindsey rodeó a su vieja amiga con el brazo.—Publica eso, deja mi nombre fuera...—.
