The Nights [Volkacio]

XIII

Su celular sonó, gruñó en voz baja para poder abrir un ojo, tomarlo y colgar aquella llamada.

Se acomodó en la cama para volver a reconciliar el sueño, era recién las 5 de la mañana, su celular volvió a sonar, lo dejó estar hasta que colgaron, sonrió, aunque aquello duró poco ya que volvió a sonar, suspiro hastiado para poder alargar su mano, tomar el celular y contestar sin ver

—¿Qué?
—Volkov, te necesito rápido en el hospital para que atiendas el turno, Claudio se enfermó y no va a poder venir.
—directora, es mi día de descanso.
—Lo sé, después puedes tomar otro, anda levántate y ven a cubrir turno. ¡Ah y el de Julián también!

La llamada fue colgada, el peligris tomó su almohada para colocarla en su cara y gritar de la rabia. La quitó de su rostro y se levantó para poder ir a ducharse. Cuando salió buscó ropa para colocarse ya que todos sus uniformes estaban en el hospital para no causar contaminación. Tomó sus cosas y salió de la pieza, con cuidado caminó hasta la pieza de Horacio y la abrió, se acercó a él sin meter tanto ruido para no despertar a Helena.

—Horacio
—Mmmh...
—Horacio, despierta

Le acarició el cabello para que el despertar no fuese tan brusco, el moreno tomó aire y lo soltó lentamente para abrir un ojo

—¿Qué pasó, Vik?
—Tengo que ir al hospital
—¿Cómo?

Sacó su celular debajo de la almohada para fijarse que eran las 5:20 de la mañana.

—Viktor, son las 5:20
—Lo sé, pero Sloane me llamó para cubrirle el turno a Claudio y a Julián
—¿Harás doble turno?
—Al parecer sí.

El moreno rodeo los ojos, cansado por la situación.

—Vale, yo iré a dejar a Helena y después iré al buro, cualquier cosa que necesites me llamas ¿Sí?
—Sí, cuídate, si necesitas algo me llamas.

El moreno asintió para darle un rápido beso en los labios al soviético quién se sonrojó, salió rápidamente de aquella habitación.

Horacio llevó las manos a su rostro, debía terminar el problema con Sloan lo más antes posible.

La pelirroja tenía su boca abierta, Horacio se encontraba frente a ella parada y con él a su lado, Gustabo, Alanna, Greco, Collins y Kovacs.

—Pero...
—Señorita Sloane, el día de hoy el señor Horacio Pérez, director Federal Bureau of Investigation de la sede Los Santos, Baja California. Ha decidido por medio de su abogado quién le está representando legalmente, en este caso sería yo, demandarla a usted y al doctor Claudio por cuasidelito de homicidio en calidad de imprudencia. Además de eso, estando su jefe aquí que es el director del área de salud a nivel zonal, se ha interpuesto por medio de Los Santos Police Departament, FBI y Los Santos Sheriff Departament. Un sumario interno el cual deberá ser evaluado su persona profesional, el doctor Claudio cómo persona profesional y aunque no nos gusta esto, pero, se debe ser justo, al doctor Víktor Volkov en su persona profesional para poder declarar lo que ha sucedido hace 2 semanas atrás en las inmediaciones de la Vinewood Beach.

Sloane abrió la boca, Horacio miró de reojo a Viktor él cuál miraba por la ventana, sabía que estaba enojado por eso, pero no iba a dejar que se colocará en duda el profesionalismo de Volkov y muchísimo menos se le rebajará a incompetente cuando los incompetentes eran otros.

—¡¿Ves lo que causas?!

Dijo Sloane mirando a Viktor aún por la ventana.

—Tú y tú poco profesionalismo de acostarte con los pacientes.
—Elizabeth -Comentó Collins- no va por eso, ese día demostraste una incompetencia tremenda diciendo que Horacio iba a botar el agua solo y luego proponiendo que le pusieran electroshock aun estando mojado.

El ruso tomó aire profundamente y lo boto lentamente. Giró su cabeza para poder hablar cuando la radio sonó.

—Volkov, te necesito urgente en urgencias, parálisis del corazón por trauma, ataque cardiovascular.

—Copiado, voy.

Y sin decir ninguna palabra, el soviético salió del lugar para correr hacia urgencias, allí estaba su profesionalismo y no en estar dando explicaciones del porque se estaba acostando o no con Horacio.

—Y que quede claro, no nos estamos acostando -Murmuro Horacio con su voz grave que causó un escalofrío en todos los presentes para salir de aquella oficina. -

El moreno se afirmó en la pared esperando a Volkov para poder hablar con él, tomó aire y lo boto lentamente.

—¿Qué pasa, Horacio?
—¿Podemos hablar?
—Estoy de servicio
—Por favor.
—Horacio, no ahora, estoy agobiado y no quiero pensar en eso.

El moreno asintió para colocarse su máscara y caminar hacia la salida del hospital con todos sus agentes detrás, era un día lluvioso al igual que lo que pasaba en ese momento en la vida de Volkov y él.

El platinado estaba en silencio curando la herida que tenía Alanna en la pierna, había ocurrido un macrotiroteo en dónde los más afectados habían sido la policía la cual estaba la mayoría en la zona de urgencias. El médico ruso se encontraba bastante concentrado en su trabajo.

—Volkov ¿Se encuentra bien?

Preguntó la policía quién recién había despertado.

—¿Mmh? Ah sí, no se preocupe, señorita Monnier
—Vale, vale.

Los dos se quedaron en silencio mientras Volkov terminaba de poder limpiar la zona, cuando termino miró a la chica.

—Listo señorita Alanna, puede ir con cuidado, se toma esta pastilla en dos horas más, recuerde limpiar la zona cuando se quite la gasa.

Salió con ella hacia el pasillo dónde se encontraba ahora una pelea de gran dimensión, Gustabo se encontraba en la muralla tocándose la herida mientras Horacio y Sloan peleaban a gritos.

—¿PERO POR QUÉ SI SABES QUE GUSTABO ES ALÉRGICO A ESO, SLOAN?
—¡NO LE IBA A SER NADA!
—¿TÚ QUIERES OTRA DEMANDA?
—A ver, a ver, cálmense los dos, ¿Qué pasó?

Preguntó Isabella llegando a controlar la situación junto a Matthew.

—Que Sloan le iba a colocar una inyección a Gustabo sabiendo que es alérgica a ciertas reacciones
—Ni siquiera sabes que inyección era, joder.
—¿Cómo qué no?
—Horacio ¿Podrías dejarme hacer mi trabajo? No es mi culpa que Volkov no te hablé.

El lugar se quedó en silencio, Horacio tomó aire e iba hablar cuando escuchó la voz de Volkov

—Fuera todos los agentes policiales que fueron atendidos, no quiero problemas en mi área. Directora le pido que por favor se retire, la situación está controlada y en otros pisos también van a requerir de su ayuda, yo atenderé al agente G ya que Claudio no se encuentra.
—Viktor -Dijo Horacio-
—Fuera, dije.

Comentó el ruso para poder acercarse a Gustabo y pasar un brazo de este por su cuello y afirmarlo de la espalda llevándolo así hacia adentro.

—Le dije que no era buena idea colocar un sumario interno ¿No?

Comentó Sloan con sorna para subir al ascensor, Horacio no podía reaccionar, si no hubiese sido porque Alanna le tiró, hubiese seguido allí, mirando hacia la puerta en busca de algún indicio que le dijese que todo estaba bien entre él y Viktor y que no había una tormenta entre ellos.

"When thunder clouds start pouring down
Light a fire they can't put out
Carve your name into those shining stars."