ii. Ryo Hiekami

232 30 62
                                    

act two. chapter two.
RYO HIEKAMI

Querida Maia:

Hermione me mandó una caja grande llena de cosas sin azúcar para picar (sus padres son dentistas) y la señora Weasley un enorme pastel de frutas y pastas variadas. Además fue mi cumpleaños la semana pasada y he recibido cuatro tartas estupendas.

Una videoconsola es como una especia de ordenador y no, no todos los muggles se comportan como Dudley. Es como con los magos, algunos son agradables y otros son Malfoy (sin ofender).

Me sentiría extraño llamándote Emma, siento que aún no te conozco lo suficiente. Mi segundo nombre es James (como mi padre).

Saludos

Harry


Querido Harry:

Lo siento mucho, no tenía idea de que era tu cumpleaños. Te envío estos chocolates porque no sé muy bien que es lo que te gusta. ¿Qué son "dentistas"? ¿Cómo celebraste tu cumpleaños?

Tampoco sé que es un "ordenador", pero no te preocupes.

Me gusta mucho el nombre James.

Saludos

Maia


Querida Maia:

¡Muchas gracias por los chocolates! No hacía falta que me enviaras nada, de verdad. Me han encantado.

Los dentistas son como los sanadores de San Mungo pero se ocupan exclusivamente de sanar la boca y los dientes. Es demasiado difícil explicar que es un ordenador, pero es como un televisor inteligente. (No creo que sepas que es un televisor, pero no importa.)

Nunca celebro mi cumpleaños, mis tíos nunca se acuerdan. ¿Tú cuándo cumples años?

A mi también me gusta el nombre James.

Saludos

Harry


Algo estaba mal con Draco. Maia se dio cuenta de ello en el momento en el que entró a su cuarto a recibirlo luego de su regreso de la casa de Ryo, luego de dos semanas sin verse.

Se tendría que haber dado cuenta antes, pero siendo honesta, Maia tenía la cabeza en otras cosas. Más precisamente en ciertas cartas que había estado intercambiando con cierto chico de gafas y ojos verdes en la última semana.

Había pasado todo el día pensando en que poner en la siguiente carta, aunque terminaran siendo más bien pobres, y el resto esperando ansiosa su respuesta. Ahora, la recién recibida carta reposaba sobre el escritorio de Maia. La acababa de leer, y había quedado en su rostro una sonrisa tonta.

Pero en el medio de la ensoñación por las cartas de Harry, había pasado completamente por alto que no había intercambiado ni una con su primo. Ella le había enviado una que nunca había tenido respuesta, y el contacto había terminado ahí.

Sin embargo, a sabiendas de que el chico había llegado esa mañana, se dirigió a su habitación. Golpeo suavemente.

"Adelante."

Draco estaba de espaldas a la puerta, sentado en su escritorio.

"Hola." saludó Maia con una sonrisa. Era probablemente la primera vez en su vida que pasaban tanto tiempo desconectados. Aunque había sido obra de Draco, ella tampoco había puesto el mayor de sus esfuerzos. En otro momento la desconexión esto la habría vuelto completamente loca, pero había estado tan distraída con su correspondencia con Harry que no le había dado tantas vueltas.

Moonlight / Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora