Capítulo 5

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2009

Alexandre se encontraba con la orden y el padre Amadeus, llevando una plegaria.
—Gran diosa de la primavera, la que nos llevará a un nuevo amanecer diosa del cabello rojo fuego, la mujer de la túnica solar.
El sol brillará y las tinieblas cederán. — repitieron todos. 

—Protégenos del invierno que augura el cambio climático con el calentamiento global.
Salvarnos del solsticio de invierno anunciado; del frío extremo.
Cubrenos con tu manto solar contra el Fimbulwinter. — Dijo Boris.

—Que junto con tus hermanas tengas piedad del mundo. Aceptamos los sacrificios que has dispuesto. — Añadió Gavain.

—Que tus melodiosos lamentos calmen nuestro luto, nos den conocimiento e inspiración y sálvanos de Morrigan. — añadió Jessebelle.

Erika se graduó.  Finalmente lo habia logrado, pues incluso había conseguido aprobar las prácticas de la universidad, las de un convenio. Esto le había tomado tiempo adicional.
Ahora la mujer de 19 años estaba dispuesta a aceptar los desafíos que su carrera le auguraba.

Ella había sido una estudiante aplicada y puntual.
Había trabajado en una tienda de antigüedades y había sido camarera, pero finalmente, decidió presentarse al museo, entonces decidió ser parte del sector privado.
Se unió al equipo de expedición. Al ser novata tuvo un accidente en el que quedó inconsciente, pero no pasó a mayores.

Erika supo que Anton se había unido a la policía, pues se encontró con él un día en un parque de diversiones.
Ambos se emocionaron de volver a verse. Él le contó que esperaba ser detective, pese a que había escuchado que el exámen era complicado.
Sin embargo su pareja en la jefatura lo había instruido bien.
Los operativos incluían redadas e incluso operaciones de rescate.
Erika se imaginaba las persecuciones cada que Anton le mencionaba los operativos, aunque se sentía molesto no poder conocer información privilegiada.

— Esa noche el sujeto que quedaba disparó desesperadamente.
Jessica me dijo que usaría el fuego de cobertura. Yo me acerque al agresor
Este tipo tenía una orden de captura por secuestro y algo confidencial.

— Dime— Le preguntó Erika, mientras se veía realmente interesada.

— Lo siento, pero no.
En fin. El caso fue que el agresor estaba oculto tras las cajas con los objetos que debíamos recuperar.
Giró bruscamente hacia mí, entonces yo rápidamente hice la maniobra.

— ¡Uy! — A Erika la impresionaba la habilidad de Anton Kursh para desarmar agresores.

— Le di un golpe y luego llegó Jessica a revisar la mercancía incautada.

Así bien Anton aprobaría el examen de detective y Erika se haría parte de una expedición que la llevaría a Egipto. Descubriendo así unos antiguos artefactos que parecían representar a los dioses.
Mientras que Anton sería transferido a los estados unidos a resolver casos abiertos, en la ciudad de Nueva York.

Consiguió resolver el caso de un asesino serial, junto a más casos que habían sido archivados.  Decidió convertirse en un detective privado.  ahora Anton buscaría unirse a la Interpol.

El camino de ambos se volvería a cruzar, pero no de la manera en que les habría gustado.

En cualquier caso, las exhibiciones arqueológicas se vieron mermadas y la corporación trató de sobreponerse.
El incidente en Egipto, había sido un duro golpe.
Anton se vio envuelto en esta investigación internacional y posteriormente tuvo que resolver el misterioso asesinato del jefe fundador
de esa corporación, pero las cosas llegaron al climax , cuando debió resolver el asesinato del tío de Erika.

Las cosas se habían puesto demasiado turbias.  Esto lo condujo a la muerte de varios miembros de una Orden Religiosa. La Orden de Santa Brígida.
Todos sus miembros habían muerto.
Erika estaba implicada, pues estos la relacionaban a una profecía.

Anton, quien había encontrado unos documentos que implicaban a Erika con extraños accidentes, decidió atar cabos.  Ya en la Interpol, decidió que el caso debía llegar a manos del secretario general.

Erika sabía que él era policía, pero puesto que Anton la había ayudado, la mujer ni se imaginaba que estaba levantando serias sospechas.
A pesar de todo, Anton, podría recurrir a ser un agente encubierto.

De este modo podría tener evidencias certeras de la culpabilidad, pero el tampoco imaginaba que las cosas serían mucho peores. 

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