7. FINAL 🌱

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Kim NamJoon corrió con su forma lobuna por las calles atestadas, ganándose la mirada asombrada y extrañada de las personas a su alrededor, a medida que sentía su corazón latiendo frenético en su pecho y como poco a poco se quedaba sin aire, todo su cuerpo dolía, sentía que moriría ante el sufrimiento. Que toda su alma se estaba quebrando y que su Alfa se sentía miserable, quizás más que su lado humano.

El moreno tras largos minutos chillando en silencio, con su cuerpo tembloroso y su vida drenándose con el rechazo, finalmente logró detenerse en su edificio. Poco le importó lo que la gente pensara o dijera, solo necesitaba entrar en su casa, y encerrarse allí hasta olvidarlo todo. Adoptó su forma humana completamente desnudo, e ingresó prácticamente corriendo por el pasillo desolado, y subió las escaleras en vez de tomar el ascensor. En cuestión de unos minutos, se resguardo en esas cuatro paredes que le brindaron la paz que necesitaba.

Las lágrimas hicieron acto de presencia, derramándose por sus mejillas y sollozó con fuerza porque todo a su alrededor olía a YoonGi. Cada rincón era un recuerdo con él y solo pudo cubrir su rostro, berreando con más fuerza, y allí donde tenía una gran herida de las garras de JungKook dolió sobre manera con sus actos. Pero no tanto como su corazón roto.

El Alfa logró enjugarse las lágrimas por sus manos y sorbiendo sus mocos, se metió al baño a darse una larga ducha, intentando olvidarlo, y aceptar que jamás pasaría. Que YoonGi a la final siempre elegiría a JungKook sin importar cuánto hiciera por él. Entonces, bajo el agua helada, gritó de manera desgarradora, mientras su sangre hervía.

Él nunca sería un Alfa digno para YoonGi.

Él solo era aburrido, y sin nada especial.

Él tenía que rendirse, pero ni siquiera con Momo se había sentido tan desolado.

Salió de la estancia sin molestarse en tomar una toalla, y dejó un rastro de pasos y pequeñas gotas de agua en el suelo; de camino a su habitación. Dónde rebuscó en el armario algo para ponerse, pero allí dónde mirara solo podía sentir el olor a mandarina, y su cuerpo se estremeció. Con furia agarró lo primero que encontró y con su piel aún húmeda se vistió, para tenderse en el colchón, con su mirada perdida, las lágrimas empapando las sábanas, por mucho que intentara controlarse, era bastante inútil.

Se abrazó con fuerza, mientras sentía espasmos de dolor por todo su cuerpo. Y que deseaba vomitar, su cabeza daba vueltas y se sentía tan deprimido que sus ojos estaban borrosos a causa de las lágrimas que se aglomeraban.

Hasta que lentamente todo se volvió negro, dándole paso a tantos recuerdos, a la mirada de YoonGi sobre la suya cuando charlaban, a sus manos juntas acariciándose, a sus abrazos acogedores, a sus suaves dedos tocando cada hebra de su cabello, a sus cuerpos tan juntos, y su manera de besarse.

¿Por qué de tantas personas en el mundo? ¿Por qué tenía que sentirse así por un Omega que estaba con alguien más? ¿Por qué tenía que dar tanto de sí mismo por alguien que a duras penas lo tenía en cuenta? ¿Por qué YoonGi tenía que estar tan lejos de su alcance?

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El ruido de la puerta de su apartamento siendo azotada una y otra vez, fue lo que lo obligó a abrir los ojos con pereza, encontrándose con que ya era de día, y que probablemente había dormido más de 18 horas seguidas. Su cuerpo estaba muy entumecido, lo que realmente le costó un montón de esfuerzo de su parte ponerse en pie, porque hasta sus huesos pesaban. Poco a poco su aroma agrio y lleno de dolor fue remplazando el de YoonGi, hasta que ya no quedaba casi nada de él, más que los recuerdos que ensombrecían su semblante.

De mala gana abrió la puerta y aunque en el fondo estaba sorprendido, su expresión permaneció imperturbable al encontrarse delante de él, con un menudo omega con la capucha de su suéter cubriendo su cabeza, y gran parte de su rostro, el más bajo estaba encogido abrazándose a sí mismo, un muy decaído Min YoonGi lo esperaba.

⚠️  THINKING OF YOU ⚠️ - [NAMGI] +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora