Corazones Rotos (COMPLETA)

Ya es tarde

- ¿QUÉ TE HA PASADO?

Matthew acaba de llegar a casa de Frederick, tras su pelea con Hannibal hace un rato. Abre la puerta Will, que va ya con ropa cómoda puesta.

- Que pase – se oye desde dentro a Chilton.

Will y Frederick estaban en el salón tomando una copa, haciendo tiempo para preparar la cena. Chilton no es la sombra del gran cocinero que es Hannibal, pero claramente es mucho mejor de lo que lo es Will.

Matt sigue a Will hasta el salón y se sienta, derrotado, en uno de los sofás. Will se coloca a su lado y alarga la mano para tocarle la cara.

- Ah, escuece.

- Lo siento. Voy arriba a por algo para curarte – dice Will.

No necesita preguntarle a Frederick dónde está, conoce la casa como para saber la ubicación de todos los objetos. Cuando Will sale del salón dirigiéndose a uno de los baños, Frederick mira a Matt sonriendo.

- Ha sido Hannibal, ¿no?

- Sí.

- ¿Por qué has ido a buscarle, Matt?

También Frederick está preocupado, aunque no sabe si es por lo malherido que está Matt o porque teme la futura reacción de Hannibal. Chilton le conoce lo suficiente para saber que las cosas no quedarán ahí, Hannibal no es ese tipo de hombre.

- Quería....

Se calla al aparecer Will con un barreño de agua tibia, gasas, agua oxigenada y una preocupación real en sus ojos. Matt adora saberse querido por Will, es un sueño cumplido para él.

- Échate hacia atrás – le pide Will. Cierra los ojos, esto te va a doler un poco.

Con manos dulces Will limpia sus heridas, tiene el labio partido. Su cara está hinchada, deberá tomar algo para el dolor y la inflamación que le hará dormir toda la noche como un niño.

- Gracias, Will. Eres muy bueno conmigo.

Matt estira su mano y acaricia el brazo de Will, que le responde con un beso tierno en la comisura de los labios.

- Ah, nada de besos de los tuyos, Matt. Esos labios van a tener que descansar unos días o no se curarán bien. ¿Me vas a decir qué te ha pasado?

- Hannibal, Will. Eso me ha pasado.

- ¿Cómo? ¿Que Hannibal te ha hecho esto?

Frederick calla, analizando la reacción de Will. Está molesto, enfadado de verdad. ¿Con Matt o con Hannibal?, se pregunta.

- Quería...bueno, ya sabes Will. El día de la fiesta Hannibal lo jodió todo. Iba a pegarnos, lo sabes, Frederick lo sabe, todos lo vimos. Así que quise acabar lo que él empezó esa noche.

- Eres un completo idiota, Matt. ¿Qué querías, matarlo? ¿Asustarlo? ¿Qué no le conoces? ¿Qué te pasa? ¿Y si te hubiera matado él? Dime

- Tendrías que haberlo visto, Will. Lo dejé para que acudiese a un hospital.

Durante unos segundos Will siente el impulso de ir corriendo a casa de Hannibal. El antiguo Will lo haría sin pensarlo, una reacción automática. El nuevo Will no.

- Intenta no sonreír o se te abrirá más la herida.

- Tengo algo más que decirte....Hannibal sabe la verdad. Sabe...lo de tu enfermedad.

- ¿POR QUÉ SE LO DIJISTE? Era decisión MÍA, Matt. MÍA.

- Porque quería romper su corazón, quería matarlo en vida sin necesidad de hacerlo físicamente. Créeme, lo conseguí.