Capítulo 10: Plan de Escape

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Celda de la prisión

- Oye, lo que dijiste en Bali, sobre mi padre y yo ¿Cómo es que lo sabes? - preguntó Kyuhyun rompiendo el silencio de aquella celda.

- Odio confesártelo, pero no eres un caso complejo. Lo único que no logro comprender es cómo el hijo de un policía suizo decide de la nada, vivir como criminal -

- ¿La versión corta? Mi padre era un verdadero desgraciado, un engendro malnacido e idiota - 

- ¿La versión larga? - preguntó Hyukjae realmente interesado en el relato de Kyuhyun.

- Cuando tenía 8 años, mi papá creyó que le robé su reloj, amaba ese pedazo de metal más que a nada, me preguntó si lo había robado y yo le dije que no, me dijo que sabía que yo lo tenía y que estaba mintiendo, me golpeó y después de eso, nunca más me volvió a hablar ni en navidad ni en mi cumpleaños y así fue todo el año, un obtuso silencio como si yo no existiera.. -

Hyukjae no sabía esa parte de la historia, pues por más que trató de escarbar para que no se le pasara ningún detalle del Evil Maknae, la información en torno a su familia, era casi inexistente.

- Luego una noche, regresó a casa y se sentó en el comedor.. y ahí estaba.. ahí estaba el reloj, el que se perdió justo ahí en su muñeca, después descubrí que lo había puesto en su escritorio en el trabajo, estaba entre los papeles o algo así.. pero jamás se disculpó, él sólo me miró a los ojos y me preguntó "¿Cómo te fue en la escuela?".. y siguió preguntando "¿Cómo te fue en la escuela?", "¿Cómo te fue en la escuela?" pero yo jamás le respondí sólo.. sólo lo veía, no comí, no bebí y después me inscribió en un internado a la semana siguiente -

Unos ronquidos se escucharon de pronto, ronquidos que provenían de Hyukjae.

- ¿Es enserio? - casi gritó Kyuhyun.

A lo que Hyukjae sólo se rió.

- Es broma - le dijo tratando de animar a Kyuhyun, pues aunque no lo dijera, notó la tristeza que el menor guarda en su interior, la decepción de haber sido acusado falsamente por su propio padre, y sobretodo el hecho de que éste último no tuviera la más mínima sangre en la cara para ofrecerle una disculpa a su propio hijo.

- Oye lamento lo que pasó - añadió el pelinegro.

- No no está bien, se aprenden valiosas lecciones ¿no?. Y no importa lo que hagas, sólo importa lo que creen que hiciste. Pero vamos, ahora te toca a ti, cuéntame de tu padre - Kyuhyun era consciente que por primera vez en mucho tiempo abría su corazón hacia alguien, nunca estuvo en sus planes contarle algo tan íntimo a un policía, pero Hyukjae era alguien que por muy raro que parezca, le generaba confianza.

- Mmm veamos, mi padre.. -

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Al día siguiente

Lavandería de la prisión

- Buenas noticias, anoche dormí como un bebé después de nuestra linda terapia nocturna - Hyukjae venía detrás de Kyuhyun mientras éste caminaba frente a él jugando con su jabón de glicerina de baño entre sus manos.

- Y mejor aún, tengo un plan de escape y es un proceso simple de 3 pasos - añadió el menor.

- Ok, haber ¿cuál es el primer paso? -

Se ubicaron frente a una de las máquinas de lavado, a lo que Kyuhyun tomó un contenedor de detergente, el cual colocó sobre la máquina de lavado frente a él.

- Crear una distracción - dijo mientras abría el contenedor.

- ¿Con jabón? - Hyukjae no entendía de qué iba el paso 1 del plan.

- ¿Sabes qué pasa cuando mezclas jabón que es pura glicerina con detergente que es en esencia ácido nítrico? - preguntó Kyuhyun mientras metía el jabón de glicerina dentro del contenedor y volvía a taparlo.

- Obtienes nitroglicerina - respondió Hyukjae luego de pensarlo un par de segundos.

- Exacto, obtienes nitroglicerina.. - Kyuhyun metió el contenedor dentro de la máquina - .. ahora hay que correr.. corre.. corre.. corre -

Ambos corrieron a cubrirse detrás de una columna cuando en cuestión de segundos una fuerte explosión se dió en la lavandería, situación que alarmó a los policías quienes entraron a la lavandería.

Hyukjae y Kyuhyun empezaron a pelear contra los policías que iban entrando al lugar aprovechando la conmoción, los otros reos al verlos pelear se unieron a la causa y también se enfrentaron a la policía.

En medio de toda la confusión, Hyukjae y Kyuhyun aprovecharon para salir corriendo de la lavandería, siguieron por unos pasadizos hasta que finalmente lograron encontrar la puerta de salida pero para su mala suerte, éstas puertas se abrían con una tarjeta especial.

- Necesitamos la tarjeta para abrir ésta cosa - expresó Hyuk.

- Paso 2.. - dijo Kyuhyun sacando una tarjeta de su bolsillo trasero del pantalón - .. piensa a futuro -

- ¿De dónde la sacaste? - preguntó el pelinegro.

- Bueno me las ingenié para que un guardia peleara con un reo durante el almuerzo y pues no fue difícil conseguirla - explicó sin más el menor.

Colocaron la tarjeta sobre la cerradura y la puerta se abrió, ambos salieron hacia el exterior y se las ingeniaron para filtrarse hasta la zona de trabajo forzado, lugar que era custodiado por un francotirador que se ubicaba en una de las torres de seguridad. 

Para su buena suerte, justo en ese momento, aquel francotirador recibió una llamada en la cual le informaban sobre la reciente explosión en la lavandería. Distracción que aprovecharon para correr hacia aquel hueco en el muro que ellos mismos habían sido forzados a cerrar con bloques pesados de piedra.

- ¿Qué haces? ¿Cuál es el paso 3? - preguntó Hyukjae.

Kyuhyun le hizo una seña para que esperara un momento, cuando finalmente localizó sus 2 pequeños objetivos, los jaló ambos con sus propias manos e hizo que tanto Hyukjae como él retrocedieran unos pasos hacia atrás. Pues aquel muro de piedras que ellos mismos habían creado, se vino abajo en cuestión de segundos.

- Paso 3.. Jenga de rocas - le dijo Kyuhyun mirando a Hyukjae quién ya estaba empezando a creer que el menor estaba realmente loco.

Ambos observaron mediante el hueco la profundidad del sitio y sinceramente no veían escape alguno.

- ¿Tú primero? - dijo Kyuhyun.

- Gracias - respondió irónico Hyukjae.

- De nada - dijo Kyuhyun con una sonrisa.

Por otro lado, los oficiales ya habían sido informados de 2 reos tratando de huir, pues desde el punto que se ubicaba el francotirador, era un punto ciego como para poder dispararles. Es por ello, que los oficiales se dirigieron con velocidad hacia la zona de trabajo forzado, pero para su sorpresa, en efecto el hueco había sido abierto de nuevo, pero no había rastro de ninguno de los 2 reos.

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