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Creo que Daki no contaba que yo sabía pelear, jamás lo hacía, trataba de evitarlo, y a veces simplemente no podía hacerlo, pero ahora fue diferente, gracias a mi padre sabía defenderme de varias formas, aunque me tomó por sorpresa, con las garras que tenía Daki me rasguñó el rostro, caí de espalda pero de inmediato me salí para que ella no cayera encima de mi, ella cae boca abajo, me senté en su espalda, le tomé las manos para dejarlas detrás y no se pudiera defender, con mi otra mano la tome de su larga cabellera y le levanté la cabeza para poder hablarle

T/n: sigue dándome motivos para dejarte en la calle

Daki: ¡Douma! Ayúdame

Douma me toma y me saca de encima de Daki con mucho esfuerzo

Douma: ¿Qué mierda estás haciendo?

Daki se levanta rápidamente y me pegó una bofetada en la cara aprovechando que Douma me tenía tomada

Douma: ¡Daki!

Aproveche el descuido de Douma y me solté de su brazo y le pegué un golpe de puño directo en la nariz a Daki y luego con mi pie le pego en el estómago, quería detenerme ahí pero ella me tomó del cabello, los chicos vinieron a separarme de ella, debo admitir que les costó mucho que ambas nos soltaramos, tuvieron que arrancarla de mis manos y más de uno recibió un golpe de nosotras, pero lo lograron, Gyutaro tenía a Daki tomada y Uzui me tenía a mi

Daki: esto no se va a quedar así

T/n: ¿Crees que te tengo miedo?... Dime dónde y cuándo

Daki: maldita niña malcriada…

T/n: te haré la vida imposible, no volverás a trabajar de maestra en tu vida, te metiste con la persona equivocada… y lo sabrás

Daki: ¿Por qué te interesa tanto el hermano de sanemi?... ¿Acaso crees que no me he dado cuenta como lo miras en la academia? Estando tu novio acá mismo estás interesada en otro

Me quedé en silencio… mierda, no sabía que ella diría eso, todos los maestros que estaban ahí empezaron a murmurar y sentí un calor subir por mis mejillas

Douma: ¿T/n?

Daki: ¿Por qué crees que ella quiere terminar contigo?

Sanemi: cállate Daki, eso no es verdad

Daki: dime si es mentira que ustedes dos se acostaron en tu salida al extranjero, se conocieron una noche y se acostaron cuando tú estabas de novia con Douma, tus amiguitos no son muy discretos en sus conversaciones… -su sonrisa era malvada, estaba disfrutando de cada palabra que salía de su boca, me di cuenta que lo estaba guardando para el momento indicado y la maldita lo logró-

T/n: eso no viene al caso en este momento, estamos hablando de otra cosa -traté que las palabras fueran firmes, pero cada una salió tropezando de mi boca-

Daki: si, del hermano de tu amante…

Douma: ¿eso es verdad? ¿T/n?

los ojos de Douma se oscurecieron mirándome de una forma que hacía que mi cuerpo temblará, a esta situación me refería cuando decía que, aún sabiendo defenderme habían veces que no podía, esas veces tenían nombre, Douma, sabía lo que se me venía encima, tenía muchas cosas pasando por mi cabeza en ese momento, mi cuerpo dejó de estar tenso y me sentía hasta un poco mareada, Uzui me soltó

T/n: toma tus cosas y vete, Douma, ven a mi oficina, vamos a hablar ahora…

Mi voz sonó un poco más ronca y sin esperar respuesta caminé hacia mi oficina, ví el rostro de muchos maestros puestos en mí, no sabía que hacer, lo único que sabía es que todo se iba a poner peor. Llegué a mi oficina, al parecer Douma no me siguió de inmediato por qué no llegó detrás de mí, me miré a un espejo que tenía ahí y tenía sangre en mi rostro, me limpié, mis manos estaban temblando y entran los chicos

Himejima: me quedaré contigo

T/n: no, necesito estar a solas con el

Himejima: no, sabes qué fue lo que pasó la última vez, si yo no llego el…

T/n: ¡Himejima! -le grité para que no siguiera hablando- por favor

Uzui: ¿Que pasó la última vez?

Sanemi: ¿Que te hizo ese idiota?

T/n: nada, ustedes deben volver a las clases, vayan

Kyojuro: pero…

T/n: ¡AHORA! -grité, pero más que un grito de mando fue un grito desesperado rogando para que alguno se quedará conmigo-

Himejima: me quedaré en mi oficina, al lado, escuchando atento

De mala gana los chicos salen de la oficina y no pasaron muchos minutos cuando entra Douma, tenía los ojos rojos

Douma: dime qué no es verdad…

T/n: pasa -El entra y cierra la puerta con seguro- N-no cierres la puerta con seguro, por favor -lo último sonó como un ruego desesperado, pero era así como tenía que sonar-

Douma: necesito que estemos tranquilos -su voz era suave y tranquila, eso me dió más miedo, Se acerca a mi, se queda de pie a pocos metros- ¿me engañaste con sanemi?

T/n: si -mi voz al fin sonó firme-

Douma: -suelta una risa nerviosa- ¿ni siquiera lo vas a negar?

T/n: no puedo negarlo, por qué es verdad

Douma: ¿Por qué?

T/n: por qué me sentía mal, me habías engañado, mantenías una relación paralela con otra mujer y yo estaba destrozada

Douma: ¿Entonces la culpa es mía?

T/n: no, no es tuya, yo tomé mis propias decisiones

Douma: ¿Vas a terminar conmigo para acostarte con ese idiota tranquila?

T/n: no, voy a terminar contigo por qué jamás tuvimos que volver a intentarlo… lo nuestro ya no daba para más y nos equivocamos al volver, lo de nosotros jamás funcionó

Douma: yo te amaba

T/n: no, lo que tú querías era un títere para satisfacer tus necesidades y yo ya no lo seré

Douma: no seas mentirosa, prefiero que me digas que quieres acostarte con él y con cuantos más, o acaso piensas que no se que te acuestas con todos esos idiotas

T/n: entre yo y Sanemi no ha vuelto a pasar nada más, y los demás son mis amigos

Douma: ¡MENTIROSA! -gritó muy fuerte- ahora seré la burla de toda la academia

T/n: por favor, tranquilízate… te dije que yo me iré en unas par de semanas, ya no me tendrás que ver aquí…

Douma: dejaste que sanemi me vigilara solo para burlarte de mí -se acerca sin dejar de mirarme a los ojos, él sabía perfectamente como intimidarme de la peor forma-

T/n: no…

Douma: eres una p*ta

T/n: no te hagas la víctima, los dos nos equivocamos en nuestra relación, nunca debí aceptar que fueras violento conmigo nunca…

Douma: yo te lo di todo, yo te di mi amor, te elegí a ti entre todas las mujeres que pude haber tenido y me pagas así… yo lo hice por qué tú no me dabas lo que quería, tu lo hiciste por ser una maldita p*ta

En ese mismo momento caí al suelo ya que Douma me había dado una bofetada muy fuerte, me toma del brazo y me mira con cara de odio

Douma: está me la vas a pagar…


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desde aquella noche Donde viven las historias. Descúbrelo ahora