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Llegué a la sala y papá me vió

Muzan: ¿A dónde vas?

T/n: a buscar mi hijo

Muzan: no, puede ser peligroso, deja que mis hombres hagan el trabajo

T/n: ¿Y quedarme acá y no hacer nada?

Muzan: te puede pasar algo

T/n: y le puede pasar algo a Megumi, yo voy por el, si a ti te da miedo quédate escondido acá como la rata que eres

Caminé decidida, maki venía detrás de mí y tomamos un vehículo de papá, había un radio, la encendí y escuchamos

Radio: creo que encontramos en dónde está el nieto del jefe, vengan todos a los muelles, en un edificio que parece abandonado, se ven varios hombres, necesitamos que vengan todos.

Nos miramos y partí a toda velocidad, estaba aterrada, pero necesitaba ir por Megumi, lo que más amo en esta vida estaba en peligro, y no dejaría que otros se encargarán de lo que es mi asunto, aunque no le gustaba era una kibutsuji, es hora de comportarme como tal

Maki: debes estar tranquila, ¿De hace cuánto que no ocupas un arma?

T/n: muchos años

Maki: ¿Crees que podrás hacer esto?

T/n: ¿Por mi hijo? Soy capaz de matar a cualquier imbécil, sobre todo a los que les pusieron las manos encima

Maki: ok, estaré para ti

T/n: necesito que me prometas algo

Maki: ¿Que?

T/n: tu prioridad es Megumi, es una orden, pase lo que pase tu prioridad es el, lo tienes que tomar y llevártelo dónde Sanemi, y ver qué genya esté bien, cuídalo el tiempo que sea necesario, tienes las claves de todas mis cuentas, saca todo el dinero y traspasalo a diferentes cuentas para no levantar sospechas, y ocupalo para que mi familia esté bien

Maki: no digas esas cosas, todo saldrá bien

Me detuve en el camino

T/n: sabes cómo son estás cosas, tú más que nadie… por favor, prométeme que harás lo que te digo

Maki: pero…

T/n: amiga -le tomé la mano- hoy todo se va a ir a la mierda y lo sabes, por favor, preocúpate que mi familia esté sana y a salvo

Maki: ok -suspira- lo haré

T/n: gracias -volví a retomar el rumbo- tengo otra cosa que decirte y otros favores que pedirte

Maki: lo que quieras…

Después de varios minutos llegamos dónde habían dicho, apagué las luces del vehículo, y avancé despacio, ví a muchos de los hombres de papá acercarse a un edificio grande, pero me detuve

Maki: ¿Que pasa?

T/n: no es ahí

Maki: ¿Cómo sabes?

T/n: solo lo sé

Maki: ¿Entonces? ¿Que hacemos?

Miré hacia otros lados, mi corazón jamás había estado más silencioso pero a la vez sentía que quería escapar por mi boca, el estómago se me revolvió, sentí que la comida que había ingerido hace ya varias horas iba a aparecer -ahora no por favor pequeño- respiré profundo para calmar mi estómago y mi pulso y Vi que en la derecha había una pequeña casa y tuve un presentimiento

T/n: voy a ir a echar un vistazo ahí -le apunté-

Maki: vamos

T/n: no, quédate aquí, busca a algunos hombres y espera, si no vuelvo en 15 minutos es por qué algo pasó

Maki: pero tú…

T/n: te dije que yo me preocupaba de ese tema, estoy haciendo esto bajo mi responsabilidad, es mi hijo…

Maki: -suspira- ok…  10 minutos

T/n: 10 minutos

Nos bajamos, maki va dónde los demás y yo caminé hacia esta casa, tomé un arma, me aseguré de tener más balas y seguí sigilosamente, mi corazón latía en mi cabeza, todo estaba tan silencioso que sentía que mis pasos se escuchaban a kilómetros, que mi respiración me iba a delatar, me iba acercando cada vez más, miré a mi alrededor, parece que no había nadie, estaba muy cerca, había una luz tenue dentro de la casa, me acerqué a ver por la ventana y fue ahí que lo ví, mi hijo estaba encima de una cama vieja y sucia, llorando con ambas manos en el rostro, mi corazón se destrozó en mil pedazos, no pude pensar con claridad, lo único que quería era tenerlo entre mis brazos, no lo pensé, y grité: "¡MEGUMI!", él me mira

Megumi: ¡mami! -estira sus brazos en busca de los míos-

….



Mierda… empecé a abrir mis ojos de a poco, sentí un dolor muy fuerte en mi frente, tenía la visión un poco borrosa, trate de moverme pero me dí cuenta que estaba amarrada a una silla, sangre caía por mi cara, y cuando volví a estar más consciente ví a mi alrededor, ya no estaba mi hijo

X: así que la hija del jefe vino a solucionar los problemas -una voz venía detrás de mí- no pensé que tenías tanto valor

T/n: ¿Más que tú? Siempre…

X: sigues siendo la misma niña malcriada

T/n: y tú el mismo cobarde de siempre, Douma… sal de dónde estás y déjame ver tu p*ta cara


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desde aquella noche Donde viven las historias. Descúbrelo ahora