desde aquella noche

#36

Mierda… sanemi se pone de pie, su mirada pasó de Haganezuka a la mía, sus ojos estaban sin el brillo que tenía recién.

Sanemi: ¿T/n?

T/n: ¿Si? -sonreí, fue más fácil de lo que creí-

Haganezuka: oh! Lo siento, no sabía que estaba Sanemi acá

T/n: no te preocupes… y no tienes que pedirme disculpas por nada, todo quedó claro, no hay problema con nada -mi voz era tranquila, no había hecho nada malo, aunque le hubiera correspondido el beso-

Haganezuka: igual necesito hablar contigo, por favor -insistió-

T/n: ahora no puedo ¿Puede ser mañana?

Haganezuka: ¿Tienes tiempo en la tarde?

T/n: -suspiré- ven a verme a la salida

Haganezuka: gracias, adiós sanemi-sale de la oficina-

Sanemi: ¿Por qué no me contaste? -la voz ronca y autoritaria de sanemi hizo que un escalofrío recorriera mi espalda-

T/n: ¿Que cosa?

Sanemi: que ese idiot… -pasa una mano por su rostro y respira profundo- que Haganezuka trato de besarte

T/n: por qué no fue nada

Sanemi: ¿Cómo que nada? Está claro que le gustas

T/n: ¿Y cuál es tu problema con eso? -levanté una ceja y sostuve su mirada- ¿Por qué tengo que darte explicaciones?

Sanemi: porque… porque si

T/n: ¿Por qué si?

Sanemi: cuando tenga alguna pretendiente te voy a contar, por nuestro hijo

T/n: -sonreí, ¿Una escena de celos? Quizás- no pasó nada, tranquilo, yo no estoy interesada en el

Sanemi: ¿No?

T/n: no, te dije, no estoy interesada en tener algo romántico con nadie

Sanemi: si, claro

Sanemi aprieta la mandíbula y me ayuda con los documentos, no habló nada más durante el rescate de mi identificación, luego fui a buscar el certificado y volví a la academia, los chicos estaban comiendo, Megumi estaba con Sanemi y me acerco

Sanemi: oh! Hola ¿Cómo te fue? -su expresión ya estaba normal, sus ojos con el brillo de siempre, su voz suave y calmada y su expresión relajada -al menos siempre fue así conmigo-

T/n: bien, mira

Le pase el certificado en dónde salía que ahora Megumi se llamaba "Megumi shinazugawa kibutsuji" y Sanemi se emocionó, lo leyó rápidamente-

Sanemi: por fin… -se seca las lágrimas que querían salir-

Megumi: ¿Papá? Por qué lloras

Sanemi: por qué te amo -le besa- por eso

Los abracé a ambos y me senté con ellos

Sanemi: ¿De verdad tienes que hablar con Haganezuka? -ahora su voz era un poco más baja-

T/n: él necesita hablar conmigo, y es lo mejor, asi le dejo las cosas claras ¿Por qué?

Sanemi: por nada -espera unos segundos antes de volver a mirarme- te esperamos

Fui a mi oficina y llegó la hora de que llegara Haganezuka y fue puntual, lo hice pasar

Haganezuka: ¿Estamos bien?

T/n: por supuesto -con una sonrisa-

Haganezuka: pero me refiero a -me mira directo a los ojos, no podía evitar que este hombre tenía un encanto especial-… si te vuelvo a pedir salir para ir más lento ¿Aceptarías?

T/n: Haganezuka, lo siento, pero solo te puedo ofrecer mi amistad

Haganezuka: a mí no me importa que tengas un hijo, de verdad

T/n: ¿Tu crees que podría salir con alguien del mismo trabajo del padre de mi hijo?

Haganezuka: ¿Entonces es por Sanemi?

T/n: si, es por el

Haganezuka: ¿Aún sientes algo por él?

T/n: es el padre de mi hijo, es obvio que siento algo por el

Haganezuka: pero me refiero en plan romántico

T/n: por ahora no… eres un hombre muy atractivo y gentil, un buen hombre para cualquier mujer, pero yo no te veo con los mismos ojos que me ves tú, lo siento

Haganezuka: ok, lo entiendo… no te seguiré insistiendo ¿Amigos?

T/n: amigos

Nos dimos un abrazo y él se fue.
Pasaron varios meses, ya estábamos en el segundo semestre de clases, hubieron veces que Megumi se quedó a dormir con sanemi, él era el papá perfecto y preocupado por su hijo, una de esas veces tuve que correr por qué sanemi me llamó porque no dejaba de llorar, y estando ahí entendí que quería su dinosaurio de peluche, se lo pasé y al momento se quedó tranquilo, sanemi se frustraba al no saber reaccionar pero yo le daba ánimos y lo apoyaba, estaba haciendo un buen trabajo. Él tenía llaves de mi casa y yo de la suya

Nosotros nos llevamos demasiado bien, aunque jamás sentí que él me mirara con otros ojos, en cambio yo empecé a sentir cosas por él nuevamente aunque me obligue a olvidarlo, no quería sufrir por el

Día viernes, no teníamos clases en la academia y estaba en casa jugando con Megumi, Sanemi me dijo que tenía cosas que hacer así que no vendría

T/n: ¿Qué quieres hacer mi vida?

Megumi: quiero, quiero, quiero… cocinar galletas

T/n: que buena idea ¿Vamos a la cocina?

Megumi: siiii

No alcance a levantarme cuando entran a la sala kyojuro, Uzui y Sanemi

T/n: ¿Chicos? -todos me saludan- ¿Tu no tenías que hacer? -megumi se abalanza a Sanemi y el lo toma-

Sanemi: vine para que salgamos -lo dijo mientras apretaba a nuestro hijo entre sus grandes brazos-

T/n: ¿Que?... -miré la hora- no es tan tarde, pero tendrías que volver antes de las 9, sabes que a esa hora duerme…

Sanemi: no, no me estás entendiendo

Los tres me miran y sonríen

T/n: entonces explícame

Sanemi: los chicos se vienen a quedar con Megumi para que nosotros dos podamos salir tranquilos y no acepto un no de respuesta

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