desde aquella noche

#42

La sangre me empezó a hervir, la rabia de tener que siempre esconderme por las cosas que hace mi padre empezó a crecer, pero ahora no me quedaría así…

Sanemi: ¿Que estás diciendo?

T/n: ayúdame -miré a Sanemi- ayúdame a colocar de pie a Genya

Sanemi: hay que llevarlo al hospital y llamar a la policía

T/n: no

Sanemi: ¿Que? Pero…

T/n: confía en mí, tenemos que ir a la casa de mi padre, ahora ayúdame a colocar a Genya en el vehículo

Sanemi me mira por algunos segundos y al final hace lo que le digo, creo que confía en mí más de lo que pensaba, yo tomé el volante y a toda velocidad fuimos a la casa de mi padre, al llegar había mucho movimiento, todos iban corriendo de allá para acá, igual que el día que me trataron de secuestrar.
Me bajé del vehículo y les hablé a dos hombres para que bajarán a Genya, fui caminando decidida y cuando llegué a la sala me encontré con mi padre y otros hombres, a todos los hice a un lado y cuando estaba al frente de él lo golpeó, le di una bofetada tan fuerte que todos quedaron en silencio

T/n: eres una mierda -no grité, pero mi voz sonaba más dura que cualquiera de los hombres de mi padre que me ganaban en fuerza y en tamaño-… se llevaron a mi hijo, por tu culpa, por arreglar las cosas contigo se llevaron a Megumi

Las lágrimas empezaron a caer de mis ojos. Mi padre me mira muy serio, se acomoda el cabello y dice con su voz calmada pero agresiva de siempre

Muzan: ya estamos haciendo todo para encontrarlo

T/n: ¿Y así es como solucionas todo?...

Muzan: ¿Y que más puedo hacer?

T/n: andate de aquí para que todo termine, para que me dejen en paz a mi y a mi familia… o muérete, cualquiera de las dos me da lo mismo

Todos me quedan mirando por mis palabras tan duras, pero era lo que sentía en ese momento, la voz de sanemi me interrumpe

Sanemi: amor…

Miré a Genya quien estaba en mal estado

T/n: maki -miré a todos lados, sabía que ella estaría acá-

Maki: aquí

T/n: revisa a Genya por favor -miré a los hombres que estaban con él- llevenlo a la habitación de Megumi

Todos subimos, lo acuestan en la cama de Megumi y maki con otro doctor revisan sus heridas

Sanemi: ¿Cómo está? -sabía que estaba haciendo de todo para guardar la calma y eso me enfureció aún más, no quería arrastrarlo a mi jodida vida, iba a ser todo para que el no sufriera-

Maki: tiene algunas costillas fracturadas, pero no es nada grave, aquí tenemos de todo para que se recupere

T/n: háganlo por favor

Caminé hacia mi habitación, ví que tenía las manos con la sangre de genya y me fui a lavar las manos, luego volví a mi armario y me cambié de ropa

Sanemi: amor, tenemos que llamar a la policía

No le tomé atención y me seguí vistiendo, maki entra

Maki: ¿Qué vas a hacer?

T/n: ¿Dónde están mis cosas?

Maki: dónde siempre

Fui a una pared y saque un cuadro, había una caja fuerte detrás y la abrí, fue ahí que saque varias armas y las revisé

Sanemi: ¿Qué es eso?...

T/n: son mías

Sanemi: ¿Sabes ocuparlas?

T/n: mi padre me obligó a aprender a ocuparlas, aunque nunca me vi obligada a hacerlo -saque tres-

Maki: te acompaño, puede que necesiten a un médico

T/n: está bien

Le lancé un arma y caminé, pero al pasar al lado de sanemi el me toma el brazo

Sanemi: ¿A dónde vas?

En sus ojos se notaban todos los sentimientos reprimidos, la culpa inundó mi pecho y lo presionó aún más, algo más tenía que decirle, las palabras estaban en la punta de mi lengua, pero me las tragué y las cambié por otras.

T/n: traeré a nuestro hijo de vuelta, aunque eso me cueste la vida -lo besé-

Seguí caminando y llegué dónde genya

T/n: tu no te muevas -le hablé al otro doctor- pase lo que pase te quedas con Genya, me importa una mierda si llega otra persona a punto de morir tu te quedas acá -él asintió con la cabeza-

Sanemi: no, no te puedes ir.

T/n: necesito ir por Megumi

Sanemi: entonces déjame ir contigo, te puede pasar algo

T/n: es por eso que te debes quedar, debe estar uno de los dos para él después de esta noche, te amo, más que a cualquier hombre de esta tierra… bueno, después de Megumi -me reí para que la lágrima que quería salir no lo hiciera, lo volví a besar y miré a los hombres que estaban ahí- no lo dejen salir, a ninguno de los dos, hasta que reciban alguna orden mía y solo mía.

Salí de la habitación junto con maki, los hombres agarraron a Sanemi y cerraron la puerta, se escucharon los gritos de sanemi llamándome pero seguí caminando

T/n: Megumi… espérame, mamá va por ti

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