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Seok Jin vio a  dos grandes hombres ayudar a su señor a bajar y lo dieron soporte hasta adentro del palacio . ¿ Estaba  herido? ¿El chocolate le había dado una alergia o algo? No sabía que hacer, su estómago se revolvía de preocupación .Asintió simplemente cuando al preguntar solo dijeron que estaba bien, claramente no lo creyó, no se veía nada bien, estaba sudando y parecía aterrorizado .

— Ya escuchó al príncipe...venga conmigo— pronunció un cansado y preocupado Kang frotando el puente de la nariz con dos dedos.

Jin asintió y lo siguió escaleras arriba. Por el pasillo, habían menos puertas que en la planta de abajo, y se sentía más tranquilidad , vio a los mismos guardias salir de una habitación, por lo que adivinó que esta era la habitación de su amo . Le hubiera gustado verlo, pero la puerta fue cerrada y los guardias estaban frente a esta, por si él necesitaba de algo .No tenían pensando moverse hasta que el señor Kang lo diga. Siguió al hombre hasta una habitación no muy lejana a la del príncipe .

El mayordomo abrió una elegante puerta, tonalidades cremosos le dieron la bienvenida. Era linda, simple y espaciosa, le gustaba . Se adentró e inspeccionó cada rincón. Un agradable aroma a lavanda invadía el espacio,le gustaba esta flor .

— Bien joven Seok Jin, esta será su habitación, te aconsejo darte un baño y cambiarte, tienes todo lo necesario en la sala de baño. Un armario para tus cosas y....aquí hay un fijo que puedes usar por si necesitas alguna cosa,  te será dada de inmediato— indicó el hombre mayor quien se veía agotado.

El mejor agradeció, su preocupación salió a flote, la imagen que presenció le hizo sentir un nudo en el pecho — El príncipe....¿estará bien?

Kang suavizó un poco su expresión ,suspirando respondió — El estará bien, es fuerte, en pocos días lo veremos nuevamente ocuparse de asuntos y demás. Pero por ahora necesita descansar

Una vez el mayor se retiró Jin pudo relajarse. Decidió darse un baño y quitarse todo el chocolate, sacó una vestimenta sencilla de su maleta, con cuidado de no ensuciarla y la dejo sobre la cama ,se dirigió al baño, también era espacioso, lo hacía sentirse como una hormiga. Llenó la bañera, se despidió de sus prendas con algo de dificultad y se adentró en la tibia agua .

Luego de que los guardias dejaran a Nam Joon en la habitación, con gran esfuerzo logró sacarse toda esa ropa entre jadeos, el dolor era insoportable. Aunque sabía que en realidad no dolía, solo era su cabeza jugándole una mala pasada, no había nada que pudiera hacer, el dolor estaba allí .Con ayuda de unas sirvientas llegó al baño donde fue asistido, el agua tibia logró relajarlo un poco, al salir, su fuerza había disminuido considerablemente como siempre ocurría en esas crisis.

Fue secado, con solo un pantalón de pijama se acostó boca abajo en la enorme cama donde le fue aplicado el ungüento que ayudaba a su lastimada piel . Aún esas sirvientas que llevaban años trabajando para el hacían muecas de asco al verlo, otras solo lo veían con pena al conocer la historia, estaba harto de ello.

—Pueden irse a descansar... — suspiró sin mucha más energía, parpadeó con pesadez, creyó haberse dormido, pero el sonido de la puerta al cerrarse lo despertó.

Al quedarse solo la soledad volvía a el, y al estar sufriendo aquel dolor los recuerdos de esos días regresaban haciendo su ansiedad volver a atormentarlo.

— Jin.... — lo extrañaba, algo en ese chico le gustaba y tranquilizaba, era agradable, bonito además de poseer el aroma más delicioso que jamás haya apreciado .

Después de bañarse correctamente Seok Jin  se secó completamente ,fue hacia la cama, aún un poco nervioso por estar en toalla dentro de una casa ajena . Tomó rápidamente su ropa , se dirigió hacia el baño para cambiarse. Secó y peino su cabello.

My masterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora