11: 16 años

1.1K 112 26
                                    

En este momento, Izuku estaba más que avergonzado.
Todas las noches su madre entraba a su habitación para ver qué el esté bien. Además, ahora iba a unas sesiones de terapia con una psicóloga recomendada por Nezu, el director de la U.A.

Por lo menos, ahora tendría un tiempo para descansar de todo el estrés. Ahora estaba en su cuarto acostado en su cama esperando que el sueño por fin llegué y pueda dormir, cosa que no sucedió.

Aunque no lo entendía. ¿No se suponía que las sesiones de terapia debían ayudarlo? Porque el no lo sentía así. Se sentía cada vez peor.

¿Olvidé mencionar que un número desconocido le estuvo mandando mensajes al Omega durante días? Porque es así.
Izuku miraba al techo sintiendo un dolor en su pecho. Volvió a pensar en aquellos mensajes que había recibido hace unas horas atrás.

Número desconocido

—eres una mierda.
23:40

—All might terminó con su carrera por tu culpa. Por salvarte a tí.
23:41

—Eres una maldita escoria. ¿Sabes? Si te mataras nos harían un gran favor, Omega de mierda.
23:41

—ahora todo Japón está en peligro por tu culpa.
23:43

✓✓

Ni el propio Izuku entendía lo que sentía. Al leer esos mensajes su mente se quedaba en blanco. Ya no podía llorar, era como si algo se lo impidiera, pero no sabía que. Solo sabía que aquel dolor insoportable en su pecho no se iría fácilmente.

Miró el reloj que estaba al lado de su cama, este marcaba las 3:54 am.
No podía dormir, no podía dejar de pensar.

Salió de su cama y se sentó en el escritorio, tomó unas hojas y comenzó a dibujar.
El Omega sentía que el simple hecho de dibujar lo ayudaba a expresarse y aliviar un poco su dolor.

Izuku no le había contado a sus padres sobre aquel hombre misterioso, ni tampoco se los contaría. Eso solo generaría más problemas, los cuales no quería tener.

Siguió dibujando hasta que el reloj marco las 4:30 am.
Con un suspiro decidió bajar a la cocina de aquel dormitorio a beber algo.
Al bajar se llevó una gran sorpresa.

Su alfa, katsuki estaba allí sentado en una banqueta alta que tenía la barra de la cocina tomando un té.

—¿Kacchan?—El nombrado reaccionó ante aquella voz y volteó a verlo.

—¿Deku?¿Que haces despierto a estas horas?— Izuku se acercó al alfa y reposó su frente en la gran espalda del contrario.

—¿Y tú?— katsuki no quería hablar de ello. No quería hablar de su insomnio debido al estrés que le generaba sabe que su Omega podría ya no estar con él en un abrir y cerrar de ojos.

—Nada importante, nene. Ahora dime qué mierda haces tu aquí.— el cenizo dejó el te en la mesa y se volteó para quedar al frente de su Omega.

—No podía dormir así que decidí bajar y beber algo.—izuku sintió como el alfa reposaba su cabeza en su cuello mientras aspiraba su aroma.

—Muy bien...Cómo ninguno pudo dormir yo creo que lo mejor es intentar dormir juntos.—al Omega le pareció muy tierna la intención del alfa, por lo que sin protestar mucho aceptó.

Al llegar a la habitación de katsuki, Izuku se relajó inmediatamente. Está olía completamente a katsuki, cosa que le gustaba mucho. Aunque poco después cayó en que no pudo tomar el café que tanto quería.

Ambos se recostaron e izuku miró la hora. Eran las 4:50 am. A las 7 debían despertarse para ir a clases y para decir verdad, Izuku no tenía nada de ánimos como para ir.
Decidió dejar de pensar tanto y se dejó caer en los calientes brazos de su alfa, pegando su cabeza al pecho de este y respirando profundamente aquel aroma que tanto lo relajaba.
Así y solo así pudo conciliar el sueño.

•••

La alarma comenzó a sonar y Katsuki la apagó inmediatamente. Su Omega se había despertado también por lo que era hora de levantarse. Ambos tenían unas ojeras que parecían bolsas debajo de sus ojos. Se rieron de sus apariencias, las cuales a perspectiva de otros eran preocupantes, pero para ellos solo era una situacion graciosa.

Se levantaron e izuku fue a su habitación para cambiarse.

Caminó con katsuki hacia el salón de clases y se sentaron en sus respectivos asientos. Hablaron un rato hasta que aizawa llegó, lo que significaba que debian callarse y escucharlo.

En el medio de la clase el tono de una notificación sonó desde el teléfono de Izuku.

—Izuku, apaga tu teléfono.— dijo shota para luego voltear se y seguir escribiendo en aquella pizarra.

La intriga le ganó y en vez de apagar el teléfono con mucho cuidado lo prendió, solo para llevarse una terrible sorpresa.
Aquellos mensajes provenían de otro número desconocido, pero estos eran todos insultandolo a él. Nervioso, lo volvió a dejar en su mochila para seguir con la clase, pero su celular volvió a sonar, y está vez repetidamente.

—Es todo. Izuku, dame tu teléfono.— Izuku palideció, no podía dejar que su madre se enterase de esto.

—N-no es necesario, lo apagaré..

—Izuku. Dame el teléfono.— el peliverde, nervioso ante la mirada de su madre le otorgó el teléfono y siguieron con la clase.

Shota no había visto el celular por ahora, cosa que relajó mucho al Omega. El azabache escribió unas preguntas en la pizarra para que los estudiantes respondan. Este se sentó en su escritorio y saco el teléfono de Izuku.

Oh mierda.

Lo encendió y vio como en la pantalla bloqueada aparecían unos mensajes nada agradables.

"Todo sería mejor si tú no estuvieras aquí."

"¿Por qué no nos haces un favor y te matas? Todo Japón estaría agradecido."

"Allí might debe odiarte por.......

Al leer esto, el Omega miró a su cachorro, vió como este lo miraba con una cara nerviosa.

La campana sonó y aizawa dió algunas indicaciones a los alumnos antes de que salgan al almuerzo.

—Izuku, tu quédate.

El pecoso vió como todos se ibas y rogaba que alguno lo lleve con ellos. Se acercó al escritorio y miro a su madre.

—¿Que son estos mensajes?

—Ehh...Un número desconocido comenzó a escribirme hace unos días, solo para insultarme o decirme cosas cómo esas.— el peliverde desvió la mirada —Ya lo bloqueé varias veces, pero sigue escribiendome de distintos números.

—Izuku, esto es grave. ¿Por qué no me dijiste?

—No quería darles más problemas de los que ya tienen...—el pecoso bajó su cabeza en un intento de que su madre no viera su expresión.

—Izuku, tu no nos das problemas, ¿Entiendes? Nosotros te amamos y haríamos cualquier cosa por ti, cachorro.—aizawa acarició un poco la mano del peliverde brindándole un aura de confianza.

El Omega menor le sonrió a su madre.—y...¿Que harán con el número?

—Llevare tu teléfono con el detective Tsukauchi para que investigue y rastree el número con ayuda de otros. Izuku, no te preocupes. Este número ya no te acosara más.

—Gracias mamá..—izuku sonrió y caminó hasta la puerta, hasta que su madre lo detuvo.

—Oh, Izuku...

—¿Si?

—Recuerda que te amo cachorro...

Izuku se sonrojó un poco y salió de aquel salón sin decir nada más. Avergonzado por las palabras de su madre.
Aizawa, al ver salir al menor tomó su teléfono y marcó el número de toshinori.

—Toshi, debemos hablar sobre Izuku.

•••









•mis héroes• [EraserMight][Omegaverse][Katsudeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora