All For A Kiss...💋 [•Hwang Hyunjin•]

33

Kim Suni.

¿Quién hubiera pensado que yo le gustaría a mi crush y tendríamos una relación?

Nadie.

Definitivamente, manifesté bien.

Minho y yo hemos tenido unas lindas semanas desde que comenzamos a salir, mis amigos no dejan de molestarme con él ya que a veces es muy empalagoso. Mucho más que yo.

Y eso, llega a ser un pequeño problema. A parte de que soy muy insegura...

— ¡Hola cariño!—saludó alegremente, como de costumbre. Las chicas que se encontraban cerca de él intentaban detenerlo para sacarle plática, fallando en el intento porque él las ignoraba por completo.

Las miré detenidamente, ellas mirándome mal para retirarse del pasillo. Solté un bufido, cruzándome de brazos.

—Uuhh conozco esa carita... —se detuvo frente a mí, mirando detenidamente mi cara, acción que me puso nerviosa. — ¿Ocurre algo?

Suspiré. —Aún tienes muchas fans que no dejan de acercarse a ti...

Él sonrió divertido. — ¿Estás celosa? —negué, se acercó más a mí, rodeando mi cintura con sus brazos. —Ni siquiera les presto atención porque tengo a mi linda novia frente a mí y es la única chica que me importa... ¿Te molestan? ¿Debería besarte aquí para que vean que sólo soy tuyo?

Sentí mi cara arder, aún no me acostumbraba a su trato y a la sinceridad que llegaba a tener.

— ¡Lee Minho!—exclamé avergonzada, ambos riendo mientras él me robó un beso en la mejilla.

—Tengo hambre, vamos por comida o te como a ti —, me sacó la lengua en burla y tomó mi mano para guiarme a la cafetería.

No me gustaba mucho estar allí, había mucho ruido y sobretodo, gente chismosa y metiche.

Mientras hacíamos la cola para pedir nuestro almuerzo, varias chicas nos veían, veían nuestras manos y hablaban. No me gusta mucho llamar la atención. Lentamente solté su mano y las metí en mi saco escolar, él me miró analizante y luego a las chicas, su expresión se volvió seria y tan sólo quedó en silencio hasta que pedimos lo nuestro.

Intentó ayudarme con mi bandeja pero negué tímida, caminando rápido hasta la mesa de mis amigos, él a regañadientes me siguió.

Hyunjin nos saludó perezosamente, Dae estaba atragantándose con la comida y JeongIn parecía triste, ni nos miró.

— ¿Qué sucede, pequeño dongsaeng?—preguntó Minho, tomando asiento a mi lado.

JeongIn alzó la mirada y suspiró. —Sólo es un horrible día, ya quiero llegar a casa para jugar.

—Somos dos... —habló Hyunjin, ambos chicos recibiendo una mirada de molestia por parte de Dae. Seguro no soportaba tener que lidiar con esos dos enamorados.

— ¿Aún no arreglas las cosas con Sook?—Hyunjin negó frunciendo el ceño. Nos había contado lo ocurrido, pero no hace caso a nuestros consejos. —Creo que...

—No. No voy a hablarle. —sentenció levantándose de la mesa, tomó sus cosas y se fue. Qué humor.

Negué comenzando a comer, ese día el almuerzo había quedado muy delicioso.

Diría que no fue algo incómodo pero, como ya dije, no me acostumbro aún a los tratos empalagosos de Minho. Mi manera de ser cariñosa era muy diferente y me gustaba más demostrar mis afectos hacia él sin público ya que me ponía como una bebé. Y siendo sinceros, nadie había visto mi lado cursi hasta ahora. Aunque, no llego a ser tan cursi, sólo muy pocas veces.