ㅡ¡¿POR QUÉ JODIDOS SIGUEN LAS FOTOS EN INTERNET?!.
ㅡSeñora Lee, hay m-mucha gente que d-descargó el material y lo r-resube...
ㅡ¿Resubirlo...?
ㅡBásicamente las fotos nunca desaparecerán, madreㅡHyunjin mantenía la compostura, todos lo intentaban.
ㅡEn esta situación lo único que puede hacer usted y su familia será esconderse del ojo público por un tiempo.
ㅡ¡No podemos hacer eso!.
Iris veía todo desde un costado alejado de la mesa, los dos hermanos, Daewoo y el abogado de la familia discutían cosas que obviamente hace mucho se habían escapado del poder político. El plato enfriándose de Minho daba a entender que también se había saltado la segunda comida del día, suspiró demasiado fuerte no solo por la idea de despedirse de su pasarela navideña, si no también por despedirse de la calma de los Lee.
ㅡLo siento, señora Daewoo. Ni todo el dinero del mundo podría deshacer un error cómo este, mejor asegúrese de controlar a su hijo.
Daewoo se fué, seguramente volvería a encerrarse a su habitación y llamaría al mismísimo presidente si era necesario para que mueva cielo, mar y tierra por su familia. Felix se veía afectado de alguna manera, triste y sin comer.
ㅡPor favor, coma...ㅡLlamó la atención de Felix, la miró escasos segundos con los ojos hinchados y las pecas tapadas en maquillaje. Lo último a causa de la apariencia afeminada que le dijeron que debía mantener a raya.
ㅡSiempre comemos los tres juntos...
ㅡ¿Al menos ha dormido?.
ㅡSí, dormí un par de horas en la noche.
ㅡ¿Qué hay de tí, Hyunjin?ㅡDejó de jugar con la comida de su plato, la mirada inexpresiva daba a entender que seguía muy afectado por las decisiones de su padre.
ㅡComí en la mañana...
Volvía a tomar su distancia, retrocedía al pasado, uno dónde todo era simple distancia y malos tratos.
ㅡ¿Su hermano no aceptó la bandeja de comida?.
ㅡNo, dale su tiempo y deja de preocuparte por élㅡFue claro, la sonrisa suave no indicaba más que irritación, irritación que no había podido ver Iris.
Ya no era extraño ni incómodo ver el silencio en la casa, aúnque estuvieran todos nadie hablaba más de lo que podían expresar sus mentes acostumbradas a siempre callar. Iris ya no podía seguir comiendo mientras todos parecían tan deprimidos, la comida sabía más insípida de lo normal y se podía notar la falta de calidez emocional en todos.
La mesa parecía totalmente interminable, las orillas de vidrio se veían sucias y los dos Lee perdidos en su propio pensamiento, ya no era tolerable. Se dijo a sí misma que arreglaría una vez más todo lo que ella nunca rompió...
ㅡSubiré a mi habitación, con permiso.
ㅡIris...ㅡLa voz normalmente ronca de Felix se situaba en notas más agudas que hacían juego a su apariencia.
ㅡ¿Sí?.
ㅡPodrías su... n-no, mejor nada...
ㅡ¿Seguro?.
ㅡSíㅡSonreía por lo tierno que parecía Felix en ese momento, nada que ver con el tonto que conoció a primera estancia ni con el que habló aquella noche.
Un nuevo Felix que sabía estaba mal...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
