Capítulo 02: La que no puede aceptarlo

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Esperé a Mon, ella había llamado diciendo que iba a la casa, recogí a Mind y en nuestro hogar todavía continuaba esperando, después de una hora aceptable, me angustié, llamé a Yha, la amiga más cercana que ella tenía en la oficina, ella respondiendo que Mon salió más tarde que ella, pues mi esposa quería terminar unos trabajos pendientes. Miré a Mind, se había pasado su hora de dormir, pero era Mon la que le cantaba, si no lo hacía, entonces nuestra hija no podría dormir. La pequeña parecía sentir lo mismo que yo, porque se estaba inquietando, así que la alcé en brazos. Seguramente ella está atrapada en el tráfico. ¿No es cierto? Me negué a pensar lo peor, después de todo, no quería angustiar a Mind. La acosté en su cama y comencé a cantarle, por supuesto, no era Mon, Mind se negó por un instante, ya que no era lo mismo, pero me alegraba de cantar lo suficientemente bien para conquistar a mi hija, tras quedarse dormida, la arropé mejor y fui a la sala de estar, busqué mi móvil y llamé a todos nuestros conocidos, desde sus padres nuevamente, hasta Yuki, incluso me atreví a pedirle el número de Nop, no vaya a ser que se lo encontrara y se quedaran hablando. Nadie sabía a dónde se había metido mi pareja, desde hace un rato tuve una extraña sensación en el cuerpo. Era una gran angustia, ésta se acrecentó y deje de sentirla. Mi conexión con Mon se había roto.
—No, no, no, no…. ¡No puede ser! —Jadeé y me arrodillé en busca de oxígeno, pero sentía que me iba a desmayar. Mi conexión con ella me estaba matando, mi cuerpo dolido a un nivel físico y estaba a punto de desmayarme. Necesitaba concentrarme, por lo que maldije la marca de unión, ya que afectaba mi cuerpo por completo. Me desmayé y tras abrir los ojos, me encontré con Jim. — ¡Mon!
— ¡Espera! —Gritó Jim asustada ya que casi chocamos las cabezas. — Tee me dijo que viniera a ver como estabas ya que vivo más cerca. ¿Qué ha pasado?
— ¡No puedo sentirla! ¡No puedo sentir a Mon! ¡Algo le ha pasado!
—Cálmate, que no consigo entenderte.
—Jim… ¿Qué hora es?
—Son casi las cuatro de la mañana.
— ¡¿Qué has dicho?! —Me alarmé, el choque de mi marca consiguió que me desmayara. El dolor que consiguió que perdiera la consciencia había desaparecido por completo. — ¡Tengo que encontrar a Mon!
— ¡Espera! ¡¿Qué hay de Mind?!
—Cuídala por mí. —Respondí con el móvil en la mano. No podía entender cómo es que ningún hospital me llamaba si yo era su contacto directo. ¡Yo soy su esposa, maldición! No sabía a dónde ir, simplemente conduje hasta llegar a la oficina de Diversity.
— ¡Mon! ¡Mon! —Grité por sus pasillos, por la que una vez fue mi oficina, por cada rincón del lugar hasta la azotea. — ¡Mon! ¡Mon, por favor! —Mis lágrimas prácticamente destrozaron mi rostro, mis ojos estaban rojos y mis labios inyectados de sangre. No podía sentirla, como su pareja debería, su marca me decía sobre su inagotable amor por mí sin importar el lugar en el que yo estuviera. — ¡¿Por qué me desmayé?! —Ni siquiera debería preguntarlo, pensé, pues, si mi compañera sufría dolor, yo padecería su equivalente, y el dolor en mi cabeza y en mi cuerpo fue terrible. Seguí corriendo por toda la plaza gritando su nombre, con la esperanza, por muy falsa que fuera a ser, de encontrarla. No podía ser que, después de todo lo que hemos pasado, fuera a perderla. Vi un alboroto, varias personas susurrando, más bien, intentándolo y uno de ellos dijo algo de un coche rosa. — ¡¿Dónde lo vieron?! ¡¿Dónde vieron el coche rosa?!
—Fue un accidente por esa dirección. —Señaló el hombre y tras una rápida reverencia de agradecimiento, tan fugaz, como si no hubiera pasado, corrí hasta ver a los bomberos y policías.
— ¡¡Mon!! —Exclamé desesperada intentando entrar en el círculo de gente que rodeaba lo que quedaba del coche de Mon, que parecía carbonizado, apenas algunas partes intactas. Hasta que uno de los bomberos me sujetó. Mis gritos, mis lágrimas, nada de eso se podía contener. Mi alma era desgarrada tan poderosamente que deseaba vomitar.  — ¡Mon! ¡Dime que estás bien! ¡¡Mon!!
— ¡Señora, por favor, que es peligroso!
— ¡Ese es el coche de mi esposa! —Sujeté a ese hombre, implorando en mi interior el bienestar de mi amada. — ¡Tengo que ir! ¡Tengo que ver a Mon! ¡Por favor! ¡Por favor, dígame dónde está mi mujer! ¡Dígame que está bien!
—Señora, allí no había ningún cuerpo, y si lo hubo, estará…
— ¡¿Estará qué?! ¡Dígame qué pasó con ella o lo mataré!
—O no había nadie tras la explosión, o su cuerpo… por las llamas…
— ¡Miente! ¡Usted miente! ¡Ella no ha muerto! ¡Mi Mon no está muerta!
— ¡¿Acaso usted puede sentirla?!
   Me separé de él como si hubiera sido golpeada, nada de mí podía sentirla, pero no quise creerlo. Grité, ninguna palabra en particular, solamente un lamento desgarrador, porque no pude más con mi agonía. Caí de rodillas y no pude detenerme. “¡Todo es mi culpa! Sólo quería que Mon fuera independiente, darle todo lo que deseaba. Ella quería demostrar que era más que una omega, que podía ser una líder y le entregué mi sueño de Diversity porque creí en ella, sabía que podría hacerlo, le enseñé a conducir, porque Mon parecía sentirse realizada. Hice esto porque ella es mi todo y quería tratarla bien, porque es la persona más fuerte, más valiente y noble que conozco… Así que… ¿Es acaso mi culpa? No quería ser la mujer arrogante que encierra a su esposa por ser omega, deseaba ser mejor, porque Mon me hizo mejor.” Tee apareció entre la multitud, me sujetó y me derrumbé por completo en sus brazos.
—Sam, ¿estás bien?
—Tee, dime que ella no está muerta… Por favor... ¿Qué va a ser de mí sin ella? ¿Qué será de Chamcham sin su Monmon? 
—Yo… lo siento, Sam. —Me abrazó con fuerza y correspondí.
   La sonrisa de Mon, sin esa sonrisa yo no podía seguir viviendo. Deseé morir, lo hice poderosamente, especialmente los días siguientes. No quise comer o dormir, especialmente por las pesadillas. Ni siquiera recordaba tener una hija, mi dolor demasiado profundo. Mis amigas se quedaron a mi lado, Mind estaba con los padres de Mon, pero no me importaba. Hubiera deseado pensar en Mind en ese momento, y no pude, mi hija no era suficiente para mantener mis piezas completas, no bastaba para darme vida.
— ¿Sam? —Me buscó Kade por la casa, ya que Jim y Tee estaban ordenando comida. Kade me buscó por todas partes, pues no estaba en mi habitación, encontrándome en la cocina. — ¡Sam! ¡Tee, Jim, ayúdenme! —Gritó al verme con un profundo corte en el brazo, me arrancó el cuchillo y lo lanzó lejos, me arrodillé y lloré. — ¡Estúpida! ¡¿Qué crees que estás haciendo?!
—Quiero a mi Mon… Necesito a mi Mon… ¡La necesito!
— ¡Morir tú no la traerá de regreso!
  Tee me cargó y me aferré a ella como una niña pequeña, Jim y Kade me vendaron la herida con un trapo limpio y me llevaron al coche oscuro de Tee, hasta que me dejaron en el hospital mientras me hacían puntos en el brazo. Mis amigas, una de ellas vigilándome, mientras Tee y Jim hablaban con el médico.
—Ha estado intentando eso por un tiempo, pero es la primera vez que ha llegado tan lejos. —Dijo Jim al doctor. —Tuvimos que llevar a su hija pequeña con sus suegros para que no la viera en ese estado.
—Cuando las parejas de alfa y omega pierden a su compañero o compañera, es algo normal. Muchos intentan suicidarse. —Explicó el doctor. —Lo mejor sería internarla hasta que pueda asimilar la perdida.
—Lady Hon (Noble) no va a aceptar ser internada.
—Necesitarán explicarle que es lo mejor, así podremos ayudarla, o realmente podría suicidarse, de no hacerlo, simplemente morirá de tristeza.
—No puede morir de tristeza… ¿O sí? —Preguntó Jim.
—Desgraciadamente sí. No comerá, se abandonará más y más hasta que pierda las fuerzas. La consumirá la tristeza si no hacen algo pronto. Después de todo, la señora Samanun parece muy unida a su compañera.
—Doctor, no sé si ella sobreviva sin Mon… Ellas lo eran todo para la otra. —Habló Tee con pesadumbre.
—No va a ser la misma, pero podemos salvarla, al fin y al cabo, ella tiene una hija pequeña. ¿No es cierto?
  Pasé un par de meses a la fuerza en un centro psiquiátrico, todos hablándome de superarla en su recuerdo, que tenía una hija por la cual vivir. No me sentía lo suficientemente fuerte para la vida sin Mon, en mi corazón mataría a mi propia hija también con mis errores. Que Mon me amara, parecía que era su mayor desgracia. Salí al no soportar esos infernales días de palabras compasivas vacías y calmantes en capsulas. Miré a la señorita Duanpen y seguí mi camino hasta el que era nuestro hogar, la casa de ChamChamMonMon. Subí descalza a nuestra habitación, todo estando limpio, imagino que gracias a mis amigas. Abrí el armario lleno de mis cosas y las de ella, sus bolsos, zapatos, vestidos, blusas y pantalones de colores pasteles, donde el predominante era el rosa. Había tantos tonos de rosa que parecía absurdo, mientras que mi lado tenia grises y negros, propios de un funeral. Era una demostración de que ella trajo color a mi vida. El color de nuestro amor era rosa, por lo que tomé uno de sus vestidos, lo abracé y me senté en la cama. Su fragancia parecía no desaparecer de su ropa, por lo que me llené de ella y seguí llorando. No podía creer que Mon estuviera muerta, especialmente dado a que no tenía una urna. ¿De qué sirve una lápida sin un cuerpo? Mi lado más terco, que no lo quería aceptar, se determinó a encontrarla, entretanto, yo tenía que regresar a ser algo de mí misma, especialmente por mi hija y por mis empleados.
—Me sorprende que me llames, Sam. —Dijo Kirk frente a mí en la oficina de Diversity. No había hablado con él en bastante tiempo, pero necesitaba su ayuda. No podía dejar la empresa de mi familia ni a Diversity sin protección.
—Sé que te compré tu parte de la empresa, pero necesito que me suplas como jefe hasta que pueda colocar un reemplazo. Tengo entendido de que todavía no tienes un cargo fijo, menos en la empresa de tu familia hasta que tu padre se retire. Te pido que trabajes conmigo.
—Lamento lo de Mon. ¿Cómo lo llevas?
—Mal… menos mal… depende. Tengo días malos y buenos, supongo.
—Lo comprendo… Siempre te amé, Sam. ¿Qué diría de mí mismo si no te ayudo en este momento?
—Gracias, Kirk… De verdad.
—No creí que alguna vez podría escucharte dándome las gracias por algo.
—Sabes que Diversity es mi sueño, no puedo dejarlo a la deriva.
—Estaré contigo lo que necesites. —Dijo con su mano sobre la mía y me sentí reconfortada. Había cosas que no podía perdonar de Kirk, pero lo que si tenía claro era que fue un socio al que mis empleados respetaban, todos ya estaban bastante tristes por Mon, ya que no sólo había sido su jefa, fue su amiga por mucho más tiempo, y Kirk calmaría a los empleados, así que los haría sentir seguros. Todos lo querían a él, sin saber lo que había pasado entre nosotros.
—Te dejo esta silla, entonces. Ahora tu eres el jefe.
—No creo que jefe, pero es bueno estar de vuelta.
   Había pasado un año desde el accidente de Mon, todos la daban por muerta, incluso mis suegros, que estaban tan destrozados como yo, manteniéndose gracias a su pequeña nieta. Mind era lo único que conseguía que no nos rindiéramos, lo peor era que, aunque Mind había empezado a hablar, había dejado de hacerlo cuando me llevaron al sanatorio, sin volver a hacerlo ni cuando regresé. La desaparición de una de sus madres y dos meses sin la otra la habían afectado a su corta edad. Así que mi hija, para mi desgracia, había dejado de hablar por completo. Ni mamá, ni Lady Boss en sus inocentes labios. Odiaba mi trabajo dirigiendo esos hoteles, centrándome en el más grande. Al final vendí la casa y me mudé al hotel, yo residía en todo el último piso. No tenía tiempo para Mind, tampoco corazón para verla, ya que me dolía, entre sus vestidos rosas y su falta de voz, era demasiado para soportar. Mis suegros se encargaban de ella y yo los visitaba con regularidad. Soy una madre horrible, pero mi hija sentía mi rabia y dolor, por lo que no podía estar cerca de ella, o empeoraría su estado, especialmente mientras la niña recibía terapia.
— ¿Qué tal va la contratación de los nuevos empleados?
—Bastante bien, Lady Boss. El Chef nuevo es muy elogiado.
—Perfecto… Voy a la casa de mis padres. Llámame si hay algún problema.
—Como diga. —Respondió mi asistente, un hombre de mi edad, delgado y con gafas, su sonrisa nerviosa llegaba a enternecerme.
   Conduje en la señorita Duanpen a la casa de mis suegros, para poder ver a mi niña como cada fin de semana. Levanté el rostro al ver la ventana de un Auto de pasajeros, en la parte de atrás del bus vi a una mujer joven de cabello castaño corto hasta los hombros, no estaba segura de sí era por el olor, algo familiar, pero al llevar mi mirada a la mujer, mis ojos se abrieron de par en par. 
— ¡Mon! —Grité desesperadamente, deseando no estar en la carretera. — ¡Mon! ¡Mon! —Seguí y ella no parecía oírme. “¡Es ella! ¡Tiene que ser ella!” La luz avisaba que tenía que detenerme, mientras el bus se había adelantado, fue una tortura verlo alejarse, así que, aumente la velocidad cuando pude seguir. Tras alcanzar el vehículo de pasajeros, salí de mi coche y corrí hasta subirme allí. — ¡Mon! —La llamé y todos los pasajeros me miraron extrañados. Ella ya no estaba, como si fuera una ilusión. ¿Lo era? — Era Mon… ¿Cierto?
Continuará...
Para finalizar, mi tiempo de escritura dependerá de mi vida laboral, si están en la capacidad de colaborar con los proyectos, así sea de donaciones pequeñas, les invito a ir a mi cuenta de patreon. (Está se irá modificando con el tiempo)
Link: patreon.com/faniamorey
Espero poder leer sus comentarios, me animan mucho y me divierten sus reacciones, sus votaciones también estarían genial, pero realmente me gustaría leer que les parecen los capítulos. Por favor, denle la oportunidad a las demás historias, les aseguro que les gustará mucho. Muchos son crossovers y están enumerados para que puedan ver el orden. El sexo vende es muy popular, y si les gusta los omegaverse y las historias de acción, Tomando posesión de ti es lo tuyo, lean la precuela, la segunda parte es Tomando posesión de ti: Un nuevo orden. Hacer acción y peleas entre lobos o disparos es entretenido, aunque complicado. Ejejeje. Amor es sinónimo de dolor es una reflexión sobre lo doloroso del amor y lo traumático que pueden ser los lugares de reeducación sexual. Espero que les guste. ¡no olviden que comentar las historias no cuesta nada! ¡Un abrazo muy grande y hasta la próxima!
😉✌️

Fanfic GAP THE SERIES: Mordida de posesión 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora