—No te haré caso amor. —dijo Soobin mientras volvia a embestir al menor con sus dedos. —Mierda... Tan jodidamente apretado. —gruño ronco.
Luego de que Hueningkai terminara su cartel para el juego de hoy por la tarde, el mayor lo invitó a darse una ducha con él, Kai todo tímido e inocente aceptó. Pero nadie le habia dicho que su novio tenia planes perversos, cuando Kai se estaba secando Soobin lo cargó y lo comenzó a besar y a tocar, los gemiditos que escapaban de los labios de Kai solo hicieron que Soobin se endurezca más, así que lo llevo a la habitación donde lo deposito con un minimo cuidado en la cama y lo beso nuevamente de una forma ruda.
Y ahí se encontraban...
—Mgh... Binnie si, más. —gemia el pequeño, y Soobin le cumpliría todos sus caprichos.
Lo embistió nuevamente, hasta que fue suficiente y saco sus dedos del interior de su novio, recibiendo un quejido en protesta por parte de este.
Colocó la punta de su miembro en la entrada de Hueningkai y empujó despacio, Kai gimió con fuerza al sentir a Soobin al fin dentro y tan profundo.
—Binnie~ —gimio Hueningkai.
—¿Si bebe? —pregunto divertido Soobin.
—Más r-rápido. —dijo Kai perdido en su nube de placer.
Soobin siguio la orden y embistió por un rato hasta que sintió que estaba cerca.
—Binnie. —gimió el menor, al parecer el tambien se estaba por correr. —Más~
Y Soobin así lo hizo hasta que los dos se vinieron fuerte, Kai en el pecho de Soobin y el mayor dentro de Kai.
Se recostaron uno al lado del otro mientras regulaban sus respiraciónes.
Kai miró la hora en su celular y le mostró a su novio.
—Mira Binnie, ya va ser hora del juego.
—Mmm... que interesante. —dijo Soobin con lo ojos cerrados, tenia demasiado sueño.
—Binnie no te duermas, entrenaste duro para poder jugar hoy. ¿No vas a ir? —Preguntó el menor.
—Nunca dije que no iría. —dijo perezoso Soobin. —Solo descansaré un minuto. —dijo poniendo la alarma en su celular. —Ven aqui pequeño, vamos a dormir.
Hueningkai se acercó y se recostó en el pecho de Soobin mientras cerraba sus ojos.
No podia ser tan malo.
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