Kai abrió la puerta de su casa, que por cierto estaba oscura con las luces apagadas, tal vez su padre ya se habia ido a dormir. Asi que no debia hacer mucho ruido, no queria despertar a su padre.
Entraron los dos, Soobin atras de Kai. Cuando el menor cerró la puerta, Soobin lo cargó y lo llevó rapido a su habitación subiendo las escaleras hacia el segundo piso.
Cuando llegaron Soobin tiró a Kai a la cama salvajemente y luego se posicionó arriba de este mientras lo besaba con lujuria y el menor pasó sus pequeñas y regordetas manos por el cuello de su novio.
La habitación estaba repleta de jadeos por parte del menor y gruñidos roncos por parte del mayor.
Soobin metió sus frias y grandes manos por debajo de la camisa blanca del menor tocando la suave piel blanca y de vez en cuando pellizcaba los pequeños y rosados pezones de Kai volviendolos rojos, causando que el pequeño suelte gemidos ahogados en medio del beso.
—Aah...mgh Binnie~
—Ven aquí bebé. —ordenó Soobin con voz ronca, mientras se apoyaba en el respaldo de la cama y traía a Kai que habia accedido a la orden a su regazo.
Kai lo miro con lo ojitos llorosos por la exitación y comenzó a besar a Soobin de una manera dulce pero a la vez mostrando todo el deseo que tenia guardado, eso volvió loco a Soobin quién agarró las caderas del menor y las comenzó a menear sobre su más que despierto miembro.
Pero Soobin tenia otros planes más que follarse a Hueningkai. Así que tomó al menor y posicionó su estomago en su propio regazo teniendo una vista hermosa de su culo.
Le bajó los pantalones exitandose cuando vio la bragas que llevaba el menor, Hueningkai siempre usaba bragas pero estas eran de un tono rosa con bordes negros y eran pequeñas.
Mierda, Hueningkai lo tenia loco.
—Pero que tenemos aquí pequeño. —dijo Soobin mientras jugaba con el elástico de la ropa interior de Kai. —¿Porque no me las mostraste apenas te las compraste Hyuka? Pudiste haberme modelado, me hubiera encantado.
—Binnie. —dijo Kai profundamente sonrojado y avergonzado porqué Soobin viera su ropa interior.
—No te avergüences bebé, me encantan como te quedan, tu polla encaja perfectamente y tu trasero se ve más gordito. —Joder, Kai lo ponia tanto.
Sin más Soobin empezó a darle nalgadas duras y fuertes a Kai quien gemia y se quejaba por el dolor y placer que le causaban estas.
—Aaaah Binnie. —grito el menor cuando Soobin empujó su erección contra su misma.
—Shh bebé, tu padre nos oirá.
Soobin lo volteo quedando el arriba del pequeño, le sacó la camisa rapido para bajar su boca al pecho de Kai y mordisquear toda la piel nivea luego bajo hasta su entrepierna cubierta, pero antes de hacer algo se separó y se sacó la camisa y los pantalones.
Volvió a su tarea, sacando las pequeñas braguitas y masajeando el miembro del menor para luego bajar sus labios hacia la pequeña arrugadita, rosada y mojadita entrada donde beso, mordisqueo y chupo el pequeño agujerito mientras Kai lanzaba gemidos largos y fuertes que eran amortiguados por sus manos.
Soobin terminó su trabajo y alineó su pene contra la entrada humeda y caliente, entro de una estocada logrando que Kai grite por lo bien que se sentía ese enorme falo en su interior. Las arremetidas eran fuertes y profundas logrando tocar el puntito de miel del pequeño haciendolo gritar fuerte el nombre de su novio pero luego recordó como queria que lo llame Soobin, se lo habia dicho mientras lo nalgueaba.
—Papiii. —grito Hueningkai cuando sentia su orgasmo cerca.
Esa palabrita enloqueció a Soobin, eso hizo que arremeta mas fuerte en el estrecho interior.
Cuando unos toques en la puerta llamaron la atención de los dos.
—¿Kai estas bien? Te oí gritar, dejame entrar. —gritó su padre desde afuera de la habitación, habia regresado de dejar a Hyojung en la casa de Arin su amiga y cuando volvio escucho a Kai gritar en la planta alta, realmente se preocupó.
—Vamos Hueningkai dejame entrar. —forcejeo la puerta.
Oh joder, se debian apurar.
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