𝐋𝐚 𝐎𝐦𝐞𝐠𝐚 𝐝𝐞𝐥 𝐄𝐦𝐩𝐞𝐫𝐚𝐝𝐨𝐫 𝐂𝐡𝐨𝐮 - 𝐒𝐚𝐭𝐳𝐮

𝟎𝟗

Tzuyu observaba el pequeño sitio lleno de extrañas figuras, muchas veladoras y demás extrañas. Dirigió su mirada hacia su amiga, la cual solo se mantenía a su lado.

—¿Enserio crees en esto? —cuestionó en voz baja

—Su alteza, muchos recomiendan a esta vidente.

El emperador se acomodó mejor en la silla mientras esperaba a la mujer.

—Si no cree en esto puede pagarme hasta que cumpla lo que le voy a decir, su majestad —Hablo la mujer haciendo acto de presencia mientras prendía un incienso

—No le pagaré hasta que se cumpla lo que me diga, no confió en usted ni en esto.

La mujer tomo asiento del otro lado de la mesa mientras miraba al emperador —¿Que desea saber? —pregunto mientras empezaba a revolver las cartas y colocarlas sobre la mesa

—Mi omega predestinada, quiero saber cómo es y dónde encontrarla —respondió

La mujer comenzó a voltear las cartas una por una —cabello castaño, está casada, pero es muy infeliz... Tiene una muy peculiar sonrisa, sus ojos son de color —volvió a voltear otras cartas —Está más cerca de lo que cree, su majestad.

—Dime dónde encontrarla —ordenó

—Un reino vecino, muy cerca de su imperio. Habrá un evento en dónde conocerá a su omega

Tzuyu trataba de recordar cada palabra de la mujer —¿Cómo sabré quien es la omega correcta? Hay muchos omegas con cabellos castaños y ojos de color

—Por lo que veo aquí está casada con una persona de rango alto, no más alto que el de usted... —volteó algunas cartas más —cuando esté con su omega, su lobo lo sabrá de inmediato y también sentirá una sensación que nunca antes haya sentido.

—¿Podré estar con ella? Me refiero a sí me casare con ella —cuestionó

—Eso dependerá de las decisiones que tome después de conocerla, pero por lo que veo, si se casarán —sonrió en grande —tome esto, da buena suerte — puso una piedra en la mano de la alfa

—¿Y para que quiero eso?

—Su majestad, le está diciendo que da buena suerte —hablo Mina en voz baja.

Tzuyu guardo la piedra en su traje con algo de inseguridad —¿Es linda?

—Su belleza es única e inigualable.

—Te daré tu pago cuando encuentre a mi omega.

La mujer asintió sin ningún problema, sabía que el emperador tarde o temprano le pagaría.

🖤

—Su majestad, llego esta carta en la mañana —hablo un sirviente

Tzuyu tomo la carta y la abrió sin mucho interés, hace una semana fue con esa mujer y aún no pasaba lo que le había dicho.

Su expresión cambio al leer el primer párrafo de aquella invitación

"Se le hace la cordial invitación de que asista a la celebración del próximo heredero del Reino Camelot"

—Ha Neul... Es la concubina del Rey e hija del duque Lee —Murmuró, se sentó en su silla para pensar un poco más las cosas —¿Mi omega es la reina de Camelot?