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Hyunjin, Felix, Grisha y Dae Han tenían una persona en común. Minho, el cual ese día en particular se miraba... Diferente. Actuaba diferente. Había una larga sonrisa en su rostro, se había levantado temprano. Había limpiando su habitación cosa que no pasaba hasta que sus padres se lo rogaran, aún así, las sorpresas no paraban, también había lavado los platos que usaron para la comida, incluso dobló su ropa. Todo eso mientras tarareaba una desconocida canción.

— Si no me explicas lo que tienes, te llamaré Minho de Hwang.

Minho, pudo sentir como la paz y la felicidad se esfumaba cómo en cámara lenta imaginando todo lo que signicaba ese nombre.

— ¡No! Guacala.

— Entonces. — Felix se cruzó de hombros a lado de Hyunjin quien se burlaba de Minho sacándole la lengua. — ¿Por qué desde que llegaste estás cantando la canción  "Esto es amor"

Alzó una ceja apunto de contestar, entonces Hyunjin dejó atrás su burla enfrentando al rubio con las pecas en su rostro. — ¿No era: "El ruiseñor?

Inmediatamente Felix negó formando una expresión parecida a la ironía. — ¿Qué? No, esa es otra canción.

Lee Mayor mira a sus novios discutír, solo comprende que ambos mueven la boca y hacen ademanes con la mano. ¿Cantan? También, está demasiado concentrado en su felicidad que aunque quiera. No puede escuchar o entender a sus dos novios.

— Es porque tú conoces las versiones en inglés. — Hyunjin apunta a Felix.

El apuntado rueda los ojos con una sonrisa diminuta. — Amor, te lo digo. Ambas son canciones diferentes, no es por versiones, son dos canciones diferentes. El ruiseñor es la canción que canta Cenicienta cuando está limpiando el suelo y "Esto es amor" es la canción del vals cuando baila con el principe antes que se le caiga la zapatilla cuando marcan las doce.

Otra vez Felix mueve la boca y parece que está limpiando el suelo y otras hasta lo usa para bailar una especie de vals a la cual no puede seguirle el ritmo.

Hyunjin alza la cabeza soltando una pequeña exclamación. — Ahora entiendo. — Entonces ¿por qué tienes cara de idiota y cantas canciones cursis?

Su mundo vuelve a la realidad, suelta una pequeña sonrisa y sus ojos brillan de la ilusión y la ingenuidad, aunque él no lo sepa. — Yo, amo los diecinueve de septiembre.

Así con esa gran sonrisa, Lee mayor se va dejando a sus dos novios realmente confundidos. Felix y Hyunjin se quedan viendo largos minutos, al final alzan los hombros rendidos. No, nunca, podrán entender que hay en la cabeza de Lee Minho.

Si esto fuera un show televisivo seguramente sería como el increíble mundo de Minho o buena suerte Minho. Quizá keeping up with the Lee Minho.
Una historia que aunque esté en la perspectiva de Minho, nunca se logra entender el Porqué de sus acciones.

El señor Grisha llega acompañado de su esposo, sobre su hombro. Los dos mayores se aseguran de no ver a Minho, cerca antes de acortar toda distancia con los menores. — ¿Dijo que tenía? — Dae Han habla, aún mirando si no aparece su hijo aunque con una evidente muestra de preocupación exagerada en su rostro.

Felix se vuelve a alzar de hombros, Hyunjin niega con la cabeza. Los cuatro terminan derrotados. — Dijo que ama los diecinueve de septiembre.

Minho vuele a sonreír suspirando brillos de felicidad. — Amo el diecinueve de septiembre.

Jisung entra al hogar de sus padres

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Jisung entra al hogar de sus padres. Hay un extraño sentimiento creciendo en su pecho, relame sus labios intentando recordar o pensar en otra cosa que lo distraiga de su malestar.

Es decir, ¿Su yo de hace cinco años se hubiera creído que ese pequeño compañero de saco sería su mejor amigo?

Recuerda esa misma sensación cuando ganó la carrera de sacos. Algo así como estrellas brillando en su panza o mariposas haciendo cosquillas en su piel.

Sin darse cuenta, su madre pasa al frente de él, percatado que algo pasa.
Ella se agacha a su altura y le toma de las manos. Aquella calidez lo hace salir de sus pensamientos.

— Mi pequeña ardilla adorable. Tienes esa cara... De nuevo.

Ella muestra una mueca triste, ese sentimiento de que por su culpa su madre está triste porque el está triste, lo hace ponerse a un más triste. Forma un puchero involuntario mientras niega con la cabeza. — Estoy bien, mami.

Pero claro, su madre tiene ese súper poder la intuición y sabe que acaba de soltar una vil mentira que parece buena. Ella sonríe negando levemente.
— ¿Es el trabajo cariño? — Y empieza, su mamá no sabe con exactitud que tiene y por eso lo atacara tan rápido que el golpe llegará multiplicado por diez al final. — ¿Quieres dejar el trabajo? ¿Volver a la escuela? ¿Alguien te gusta? ¿Discutiste con un amigo? ¿Olvidaste usar protección? ¿Te sientes inseguro con tu cuerpo o piel? Cariño que sucede.

Podría llorar, de verdad podría. Él ríe negando con la cabeza. Ríe para no llorar. Y entonces recapacita. Le gusta su trabajo, cuando era niño podría decir que odiaba la escuela, pero ahora, extraña ese sentimiento, ir a la escuela no estaría tan mal, pero teme ser tratado como un jodido nepobaby, entonces ya tiene una inseguridad. ¿Le gusta alguien? Otra inseguridad, ya ni siquiera sabe cómo se siente ese sentimiento. No discutió con ningún amigo, claramente no pasó nada sobre no usar protección, no está inseguro con su cuerpo o piel, más bien con su forma de ver... La vida.

— Me gusta el trabajo, mamá.

Ella suspira y sabe que de alguna manera algo no hizo bien. Jisung se repite en su cabeza como dijo esas últimas cinco palabras. Está demasiado inseguro. Habrá sonado poco convincente, quizá triste o enojado. Se siente fatal.

Su madre suspira por primera vez. Ella se acomoda mejor. Entonces, comienza ese sermón que hubiera preferido ahorrarse.

— Cuando tu papá y yo te dimos la oportunidad de trabajar. No era porque quisiéramos hacerte ganar dinero a fuerzas, o porque no quisiéramos que estudiaras algo que te guste. Más bien. Era porque creímos que si querías tener responsabilidades antes de ser un adulto, ibas a saber tomar un mejor control en tu vida. — Ella suspira nuevo y continua, él, evita cualquier contacto visual aunque trata de seguir los ojos de su madre. — Era un paso, cualquier decisión que tomarás sería importante para tí, era para que tú pudieras hacerte una pregunta sobre que querías ser. Cómo ibas a enfrentar la vida después de terminar el instituto. Esa decisión que tomaste, nosotros la respetamos como adultos, como tú siendo un adulto. Pero si crees que te equivocaste, si crees que algo no está bien. Por favor, Jisung dínoslo. Somos tus padres y te vamos a apoyar en cualquier decisión que tomes. No es tarde cariño.

Jisung siente un hueco en su estómago, un nudo en su garganta, las mariposas cayendo en peso muerto en su estómago. Está triste, sorbe su nariz y asiente a lo que tenía miedo de decir.

— Me siento solo, mamá, confundido, siento que no estoy haciendo las cosas bien. Realmente me siento un fracasado muy detrás de otros.

Gay también se haceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora