CAPITULO 6

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Un nuevo día comenzaba en Ecomoda y todos los empleados estaban en sus puestos trabajando muy concentrados, después de enterarse el motivo del porque Betty no había a trabajar, solo recibiendo como respuesta que había solicitado un permiso ya que se había quedado de juntar con su novio sacando más de un suspiro a sus amigas y que Patricia la mirara con los ojos entrecerrados

Esa era la excusa que habían decidido dar, bueno en el caso de ella, porque lo que era él bien poco le importaba lo que pensaran los demás. Así que después del cotilleo mañanero cada una se fue a su puesto

Eran las once de la mañana cuando Cata se encontró con Marcela en las puertas de Ecomoda y después de saludarse ingresaron juntas a las instalaciones. Cuando llegaron a la segunda planta Patricia dio un grito de aquellos al ver a su amiga, así que la primera siguió su camino hacía presidencia

Toco la puerta suavemente recibiendo la confirmación de su ingreso, así que abrió lentamente encontrándose con Armando que estaba en mangas de camisa y Betty en su computador tecleando como loca

C: Buenos días
A:(girándose) Cata que rico verte
C: Lo mismo digo, pero veo que estas muy ocupado
A: Bueno lo cierto es que sí, estamos ideando algunas estrategias
C: Veo...veo, pues yo venía a dejarle el presupuesto a Betty
B: Por supuesto (con una sonrisa)
C: Por cierto Armando...

No alcanzo a decir más porque la puerta de presidencia se abrió de golpe dándole paso a una Marcela que no tenía muy buena cara, al final no se pudo contactar con Armando. Barrio la estancia con la mirada como si fuera a encontrar a alguien y cuando vio a Betty en asiento de él no pudo evitar comentar

MV: ¿Qué hace sentada esa mujer en tu lugar?
A: Estamos trabajando, por si no lo has notado
B: Permiso, voy a estudiar esto...
C: La acompaño Betty

Ambas mujeres prefirieron salir del blanco de ataque porque en el tono de voz de Marcela, se notaba que la discusión se acercaba, claro que la distancia no era mucha, así que se enterarían de igual forma

Armando sintió que le hervía la sangre había estado toda la mañana en compañía de Betty y se sentía muy relajado, es más le había podido robar un pequeño beso a pesar del sonrojo de ella y venia esta vieja a arruinarle el día

Prefirió respirar hondo y no perder los nervios, así que tomo asiento y siguió con lo que estaba Betty sin prestarle un mínimo de atención y eso logro que ella solo apretara los dientes

MV: Veo que te alegra verme ¿No?
A: La verdad me da igual ¿Dejaste todo arreglado en Palm Beach? ¿Mario no llego contigo?
MV: Viene en otro vuelo quizás llega mañana no lo sé y si quedo todo listo en la sucursal
A: Estupendo, necesito el informe, no quiero que vuelva a darnos problemas, es mucha la plata que se ha invertido...esto va aquí (anotando un dato) ¿Eso es todo?
MV: ¿Por qué tenías el móvil desconectado y el teléfono del apartamento igual?
A: Porque se me dio la gana...a ver esto...
MV: ¿Ayer tampoco viniste a trabajar? Al parecer la mujerzuela esa te consumió todo el día ¿No?

Betty a pesar de que estaba viendo los presupuestos, no pudo evitar dar un respingo al escuchar las palabras de Marcela, sobre todo porque la puerta estaba abierta Doña Catalina no la había cerrado

Cata vio su reacción y se levanto a cerrar la puerta, pero más que nada porque deseaba preguntarle como se sentía después de la conversación que habían tenido

C: Betty ¿Cómo se siente?
B: ¿Yo? Pues bien (sonriéndole)
C: ¿Hablo con Armando? (ella solo asintió) entiendo, me alegro por usted pudo sacar su dolor ¿No?
B:(suspirando) Digamos que me pidió perdón por todo, pero más que eso hablo con la verdad
C: ¿Cómo así?
B: Ayy no sé qué hacer (dijo afligida)
C: ¿Quiere que la ayude con sus dudas?
B: No quisiera abusar de usted yo...
C: Ningún abuso yo encantada de colaborarle, pero me imagino que es usted quien paso el día con Armando ¿No? (asintió) veo, bien paso por usted a las una y vamos a algún lugar tranquilo
B: Esta bien, además yo la invito
C: No... es...
B: Ah, ah quedamos que seria yo quien la invitara en nuestra próxima salida jojojo
C:(sonriéndole) Como quiera
B: Doña Catalina, le puedo pedir un favor (apenada)
C: Si, claro dígame en que la puedo ayudar
B: Que pena con usted, pero me podría ayudar a salir de aquí, la verdad no quiero ser blanco de los insultos de Doña Marcela
C: Entiendo, ande acompáñeme que la saco de aquí
B: Muchas gracias

LOS SECRETOS DEL AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora