CAPITULO 16

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Estaba exhausta el día había sido más que movido, pero en esos momentos descansaba en el cómodo sofá de la sala. Sus padres se habían ido hace unos momentos junto con Nico que no había aguantado las ganas de conocer el nuevo hogar de su amiga, pero además para contarle algo que le estaba pasando y ella solo meneo la cabeza "Terminaría cayendo con la peliteñida"

Sus padres estaban contentos por el lugar, pero sobre todo Don Hermes que se quedo más tranquilo al ver la seguridad del edificio. Su madre la ayudo a acomodar sus pocas pertenencias, para terminar por disfrutar un rico almuerzo y ahora estaba sola

Sabia que se le iba a hacer difícil estar sin ellos, pero tenia que acostumbrarse a la larga algún día tenia que suceder. Se levanto de un gran salto y no pudo evitar verse como estaba vestida. Llevaba una camiseta de su padre que al quedarle grande decidió anudársela bajo los pechos y unas vaqueros que hace mucho tiempo se había comprado y los cuales nunca tuvo el valor de usar

Su cabello lo llevaba en una alta coleta que su madre le ayudo hacerse e iba descalza por comodidad. Su padre cuando la vio solo refunfuño, pero una mirada de su mujer lo mando a acallar, claro que se desquito con Nicolás que no cerraba la boca al verla y después por la cantidad de idioteces que dijo

Definitivamente los iba a extrañar, pero los sábados y domingos se los destinaria a ellos. Se giro para ir al cuarto cuando sintió el timbre, de primera se extrañó, pero pensó que quizás se les había quedado algo, así que fue abrir sin imaginarse lo que se encontraría al otro lado de esta

No podía creer lo que sus ojos veían, Armando estaba vestido con unos vaqueros los cuales se adherían a sus piernas y calzaba unos mocasines negros, siguió subiendo y vio que llevaba una camiseta blanca que marcaba su ancho pecho y una chaqueta de cuero negro y una gran sonrisa en su rostro

Armando también la había recorrido con la mirada ver sus piernas marcadas por los vaqueros, sus pequeños pies y su vientre descubierto, pero sus pechos desafiantes lo puso a mil. Respiro profundo tenia que controlarse, tenia una idea en mente y pensaba llevarla a cabo, así que solo le sonrió para acercarse y darle un beso en la comisura de los labios, logrando que ella deseara más cercanía

A: Veo que ya se instalo ¿No?
B: Ajá mis papas me ayudaron, pero usted ¿Qué hace aquí?
A:(mostrándole unas bolsas) Le traje esto
B: ¿Y que es eso?
A: Traje pizza, con mucho quesoooo jajaja
B: Bien me voy a dar un baño luego comemos ¿Sí?
A: ¿Un baño? Mmm eso me gusta (acercándose a ella) por cierto no le he dicho lo bien que se ve así
B: Usted cree
A: Claro que sí y mira que me estoy aguantando no hacerle el amor

Ella lo miro coqueta y le dio un pequeño beso, que claramente le dejo con ganas de más y termino por desaparecer tras la puerta del cuarto. Armando suspiro profundamente, porque en realidad tenía ganas de seguirla

Tomo asiento y se dispuso a esperar, pero a los minutos tuvo que levantarse porque el imaginársela con la piel húmeda estaba haciendo que él comenzara a arder, así que se fue a la cocina a prepararse un café

Betty se dio una ducha rápida, para después vestirse rápidamente, tomo lo primero que encontró y con el pelo aun mojado llego al salón, se sorprendió al no verlo y llego a pensar que quizás se había ido, pero la caja de pizza le indicaba que aún estaba allí, así que se fue a la cocina y lo vio tomándose un café

A: Betty estaba pensando que después de comer podríamos salir por ahí ¿Qué le parece la idea? ¿Quizás a un cine?
B: ¿Al cine? ¿Y estará abierto? Ya son las 8
A: La última función es a la diez, así que tenemos tiempo ¿No quiere ir?
B: Claro que sí, me encanta el cine solo que no siempre puedo ir (encogiéndose de hombros)
A: Bueno, entonces que le parece si comemos y después nos vamos al cine (abrazándola)
B: Me parece, me parece (besándolo chiquito)

LOS SECRETOS DEL AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora