LOS SECRETOS DEL AMOR

CAPITULO 23

Ya llevaban dos horas esperando recibir noticias del estado de Marcela, pero no le decían nada. Daniel ya se había calmado y agradeció el apoyo brindado. Armando abrazaba a Betty, mientras esperaban noticias ya los nervios se habían calmado un poco. De pronto vieron aparecer a un médico y que pregunto por los familiares de la paciente

DV: Yo...yo soy su hermano ¿Cómo está?
MD: Ya esta estable, la paciente llego con un golpe en el vientre bajo, lo cual le produjo dolores intensos y una pequeña hemorragia que ya está controlada
DM: Pero ella esta bien ¿El bebé?
MD: Por el momento ambos están muy bien, solo que tendrá que mantenerse en reposo durante el embarazo, prefiero tomarlo como una precaución
DM: No se preocupe que nosotros la cuidaremos, ella no esta sola
MD: Me alegro... bien esta noche la pasara en observación y si vemos que todo va bien, mañana podrá ir a su casa y hacer reposo
DM: ¿Podemos verla? Es más me gustaria quedarme esta noche
MD: Solo unos momentos y si puede quedarse, por lo que vi a ella no le gusta estar sola
DR: No, desde chiquitita le da miedo estar sola, cosa que se acrecentó con la muerte de sus padres
MD: Entiendo, bien alguien vendrá por ustedes
DV: Gracias por lo que hizo por mi hermana
MD: Nada que agradecer solo hago mi trabajo, permiso

Esperaron alrededor de cinco minutos hasta que apareció una enfermera que los llevo al cuarto de Marcela. Daniel fue el primero en ingresar seguido del matrimonio, la vieron allí blanca como un papel y en su brazo izquierdo con una intravenosa. Notaron que miraba la puerta ansiosa, pero cuando los vio aparecer una pequeña sonrisa adorno su pálido rostro

DM: Marcela, hija ¿Cómo te sientes?
MV: Bien, un poco adolorida, pero bien después del susto que pase
DV: ¿Qué fue lo que paso? ¿Cómo que te golpeaste?
MV:(sin mirarlo) No sé, de seguro me maree y termine chocando con la mesa
DV: No me estas mintiendo ¿Cierto?
DM:(echándole un cable) Porque lo haría hijo, es normal que se maree, solo que le dio en un mal momento
DV: Espero que me estes diciendo la verdad, porque si no...
DR: Daniel, tranquilo no es momento de recriminaciones
DM: Hija el médico dijo que debes guardar reposo, así que te iras a casa con nosotros ¿Sí? Nosotros te cuidaremos
MV: Pero, es que no quiero ser una molestia
DR: ¿Cuál molestia? Si estaremos felices de tenerte en casa
MV: Por cierto ¿Y Beatriz? Recuerdo que venía conmigo
DM: Se quedo con Armando esperando
MV: Díganle que pase por favor
DM: Claro que si mi amor

A los segundos entraban Armando junto a Betty, la cual se quedó parada en la puerta. Marcela le estiro la mano y ella completamente extrañada se acercó a tomársela

MV: Yo...yo quería darle las gracias, sino fuera por su ayuda yo hubiese perdido a mi bebé
B: Doña Marcela, como le dije al doctor Valencia, solo hice lo que cualquier persona haría, no tiene ningún merito
MV: Puede ser, pero yo siempre le estaré agradecida
B: Pues puede contar conmigo para lo que desee
MV: Gracias

Marcela cerró un momento los ojos, la verdad es que se sentía cansada, así que todos abandonaron la habitación, solo quedando en ella Doña Margarita quien seria la encargada de cuidarla. Daniel se fue un poco más tranquilo, por lo menos estaba en buenas manos, así que junto a Roberto fueron al piso de ella por sus cosas personales

Lo que era Armando y Betty se fueron al piso de ella, pero en la cabeza de Betty aun estaba la imagen de Mario saliendo de la oficina de Marcela, estaba segura él era el culpable de que estuviera en aquel estado, pero lo que no podía saber es ¿Qué tipo de relación tenían? Bueno por lo menos ahora estaría cuidada por los padres de Armando, así que todos estarían un poco más tranquilos

La noche paso en relativa calma ya que Marcela durmió gran parte de ella, así que ella se acomodo en la cama auxiliar, despertó cuando estaba amaneciendo y solo porque la escucho sollozar en sueños