¿Qué es lo que me está pasando?
No quiero ni siquiera pensar que puedo estar enamorándome de Liam, tengo que mantenerme firme, seguir siendo fría e indiferente estoy segura que pronto tirará la toalla y me dejara en paz.
Los chicos en estos momentos no me llaman la atención, aún no estoy lista para caer en sus mentiras, mi última relación dejo en mi muchas inseguridades y miedos, me cuesta confiar.
Y estoy segura que si empiezo una relación en estos momentos, voy a lastimar mucho a esa persona, va a pagar los platos rotos de mis traumas y eso es lo que quiero evitar a toda costa. Así que, por lo pronto Liam esta totalmente descartado en mi vida. Han pasado dos semanas y no he sabido nada de él, supongo que al fin conseguí que se alejara.*Un día normal en la Facultad.
— Hola, ¿Puedo sentarme aquí? — levanto la mirada para saber quién me hablaba, las pupilas se me dilataron enseguida al ver al chico del que les había hablado días pasados. Si, justamente lo que están pensando, era Julio.
Algo tiene este chico que hace que sienta mucha curiosidad saber de él. No es atracción, es como si necesitara a fuerza conocerlo a fondo.
— Eh, si claro. Toma asiento. — digo sonriente y continuo en mi lectura. Estábamos en la biblioteca de la Facultad, apenas había uno que otro estudiante.
Intentaba esconder a como de lugar mis nervios, hace rato que mi lectura dejo de ser leída en mi cabeza, y él estaba ahí todo tranquilo leyendo y resaltando con un plumón el libro de Anatomía. Hasta que...
— Oye, disculpa ¿Que vas hacer este fin de semana? — díganme qué no estoy soñando ¡Oh por Dios!
— Eh, por? — perdón es lo único que se me ocurrió, estoy en shock.
— Bueno, he leído mucho de tus historias en Wattpad, este domingo va a ver una feria de libros y pues pensé que podría gustarte ir. — vaya, así que tengo a un lector en frente mío.
— Oh, vaya. Estaría increíble, te mentiría si te dijera que tengo planes. Claro que me gustaría ir. — dije emocionada.
— Bueno, no se diga más. Te escribo luego para fijar hora, va. Me despido, Victoria, tengo una clase en 5 minutos. — sonrió y salió corriendo de la biblioteca.
Bueno, me tranquiliza saber que no soy la única loca que lo ha stalkeado hasta en Snapchat, él también sabe de mi, mucho diría yo porque en mi historias de wattpad siempre intento ser transparente y contarlo en base a mis experiencias.
Continuaba en las nubes, hasta que una mano frente a mis ojos se robó toda mi atención. Era Liam, y bueno ha vuelto...
— ¿En qué tanto piensas? No me digas que te gusta el chico que acaba de salir. — dice molesto.
— Cómo porque debería de importarte mis pensamientos. Y si me gusta o no es mi problema. Te quedó claro. — dije mientras empecé a meter todas mis cosas a mi mochila.
— ¿Es que acaso no es suficiente todo lo que he hecho para llamar tu atención? ¿Por qué te cierras a si quiera darme una oportunidad? — no puede ser ahora soy el centro de atención de un montón de estudiantes.
— Solo te recuerdo que estamos en una biblioteca, Liam. — digo entredientes. Lo agarro del brazo y lo llevo hasta afuera. Este niño no se cansa de sacarme de quicio.
— Mira, solo voy a decírtelo una vez así que préstame mucha atención porque no pienso volver a tener está plática contigo. —respiro.— Entiende que en estos momentos no puedo estar con alguien, no quiero estar con alguien y aqui viene el porque, pues bien tengo muchos traumas, miedos y un montón de pensamientos tontos en mi cabeza que no me dejan avanzar. Hace chance un idiota me hizo mucho pero mucho daño, hirió hasta la última partícula de mi ser y no quiero que tú seas el que pague los platos rotos de eso, eres una increíble persona y mereces a alguien que te ame completa y sinceramente, para tu desgracia esa persona no soy yo. — de pronto mi voz cambio, la niña interior despertó y estaba a nada de romperme otra vez. Y de la nada sus brazos rodearon mi cuerpo, una chispa de electricidad recorrió mi cuerpo, y por primera vez en tanto tiempo volví a sentirme protegida.
Que habrán sido un par de segundos lo que duró aquel abrazo, los segundo más largos de mi vida, me separé y camine de prisa a la salida, no quería que me viera mal, no puedo permitirme ser vulnerable ante un chico. El me siguió y trato de detenerme pero con tanta adrenalina yo parecía más un correcaminos que una persona normal huyendo. Alcance a subir al bus, y por la ventana pude observar su cara de decepción, coloque mis audífonos en mis oídos y durante el trayecto de regreso a mi casa la música era lo único que me mantenía con los pies sobre la tierra.
Llegué a casa y no pude evitar derrumbarme, algo en mi no estaba bien pero no sabía que carajos era, y me frustra no saber que. El amor es lindo pero claramente no es para mí. Solo llega a cambiarlo todo, a confundirme y hacerme sentir que no me lo merezco.
Solo necesito volver a conectar conmigo mismo, y este chico no está ayudándome para nada, lo único que ocasiona son más peleas en mi cabeza. Caí, sentía electricidad en mi cuerpo, todo se fue a la mierda la ansiedad estaba acompañándome.
Toqué fondo, otra vez...
Un rayo de sol chocó en mi rostro, era la mañana siguiente, al despertar ví mi departamento hecho pedazos, y bueno no esperaba menos luego de la noche espantosa que tuve ayer. En fin, mañana iba a tener la salida con Julio, iba porque ya no, así que le escribí para cancelar, es más que evidente que estoy hecha pedazos como para tratar de mostrar una sonrisa al mundo.
Le escribí y me desconecté enseguida de mi celular, lo tiré a la cama y caminé a mi escritorio para cumplir con mis obligaciones de estudiante de medicina, ahí estuve casi toda la mañana y tarde, solo me levanté para almorzar e ir al baño.
A la siguiente semana, Julio andaba preguntando por mí hasta que me encontró en el patio central tratando de abrir unas papitas.
— Así nunca te las vas a comer, ven te ayudo.
Me quito la bolsa y en un 2×3 la abrió, luego me las entrego sin antes llevarse una papita a su boca.
— Están buenas eh, tienes buenos gustos de papas. — dijo disfrutando el sabor de la papita.
— Son de mis favoritas, aunque luego te dejan con el aliento a cebolla, pero valen mucho la pena, una menta y como nuevos. — dije mientras comía.
— Eh, y bueno ¿todo bien? — oh no, aquí vamos otra vez.
— Si, y perdón por haberte cancelado la cita, tenía otras cosas pendientes que no podía cancelar por nada. — dije y mi alarma me salvó, era hora de mi próxima clase.
La apagué y me despedí rápidamente.
Al salir de mi clase, ví a Liam acercarse a mí, no entiendo que es lo que quiere conmigo.
– Hola Victoria, quieres que te lleve a casa?
– No, tomaré bus, pero te agradezco por tus intenciones. – sonreí y empecé a caminar.
– ¡Enserio tienes que hacerte de rogar siempre!
Me pare y di la vuelta, lo observé fijamente y le dije un sarcástico "si".
– Sabes, te seré sincero de una buena vez...–soltó suspirando. – al principio si te quería para el rato pero cuando empecé a conocerte mejor me di cuenta que no eres una chica común y me enamoré de ti.
– Pues muy tarde para darte cuenta que no soy común, aunque desde el principio fui clara contigo, te dije que no quería nada en estos momentos con nadie, entiende que yo y el amor por el momento no somos amigos. – dije con seriedad.
En ese justo momento pude oír como un corazón se rompió en mil pedazos, pero no me importa romper miles de corazones siempre y cuando sea honesta y no como me lo rompieron a mi, en la cara y con mentiras.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Victoria 💕
He vuelto, luego de un semestre lleno de emociones, nuevas aventura y sobre todo de retos, volví a esta historia y con intenciones de terminarla si es posible en estas vacaciones. Solo espero y disfruten cada uno de los capítulos. Tenkius very much 💋
![](https://img.wattpad.com/cover/327409487-288-k110034.jpg)
ESTÁS LEYENDO
La foránea
Teen FictionUn correo llega a cambiar definitivamente la vida de una pequeña soñadora, quien con total voluntad y valentía se atreve a dejar su cálido hogar para empezar a construir su futuro en la capital, dando como inaugurada la vida de universitaria y sobre...