¿Han pensado alguna vez en que quizás hay cosas que nunca aprendieron a hacer?
Yo recuerdo saber muchas cosas, ser buena en muchos aspectos, pero no me había puesto a pensar hasta el día de hoy, en que querer a alguien implicaba saber hacerlo.
¿Nunca les ha pasado que cometen siempre los mismos errores? ¿O que no saben porque siempre llegan personas similares a su vida a recordárselos? ¿Qué les causan el mismo daño una y otra vez? ¿Qué pareciera que aunque pasan los años la herida que parecía estar cicatrizada te vuelve a doler?
¿No les pasa que perdieron a alguien que querían, por no saber hacerlo...?
Me gustaría contarles como fue para mí darme cuenta, de lo que ojalá nunca nos pase en una relación, que nosotros somos el problema. Creo que quizás muchos estarán de acuerdo, en que es menos doloroso poner la culpa en otros, o en las situaciones, porque no saben lo doloroso que es perder a esa persona por actos que tú misma provocaste y que cuando es momento de despedirse, te das cuenta de lo mucho que te arrepientes, y de lo poco que sirve eso ahora, ahora que ya estás en tu cuarto sola, escribiendo para un montón de extraños, algo que quizás simplemente no sé cómo afrontar.
Claro que lo he pensado en estas 24 horas: "podría enfocarme en mi", "hacer ejercicio", "cocinar", etc. Porque si, más encima estoy cesante, una recién egresada que no encuentra trabajo, quiere mudarse a otra ciudad pero no sabe cómo, y que ahora perdió a la persona que la había hecho sentir feliz estos últimos dos meses, porque si, solo fueron dos meses, o algo así.
Yo no quería tener nada con nadie, estaba bien sola, más de alguno pensara como yo, lo refrescante y pacífico que es estar soltero, no porque puedas hacer lo que quieras, créanme cuando les digo que las citas son lo último en lo que pensaría, sino que por la paz mental. Para mí, no sé para Ustedes, una relación siempre es igual a tener problemas, sufrir, dormir esperando un mensaje, que el pecho te duela o que sienta cosas que ni siquiera en algo tan estresante como defender la tesis sentiría.
Hoy les cuento que escribo esto sin haber comido en todo el día, tengo el pecho apretado y lo mejor será que adivinen que hora es. Incluso dormida sentía la tristeza, el corazón latir, incluso así, recordaba los momentos juntos pero ya no igual que antes, ahora estaban manchados de melancolía y aunque fueron recientes, parecen tan lejanos e inalcanzables.
No quiero estar sola, así que me he estado apoyando de mis amistades y familia, y también la caja de pall mall verde que compré.
A ratos recuerdo, a ratos sufro y me arrepiento, a ratos pienso en él, en cómo se estará sintiendo, a ratos pienso en el futuro y lo difícil que se ven las cosas sin él, a ratos sé que tampoco tenía futuro con él, a ratos me pregunto por la existencia del ser humano y en los misterios de la vida, y en como quizás lo mejor que puedo hacer ahora es pensar en que lo que pasó era inevitable, y que lo que podría hacer es pensar en cómo se dieron las cosas, y los aprendizajes que me quedaron.
La verdad es que es de locos, pero si hay cosas que me hacen sentir mejor, siento que me llevo aprendizaje y que fue mejor haberlo conocido a que no. Siento que esta puede ser una buena oportunidad para seguir creciendo, ser mejor por mí y enfocarme en encontrar trabajo claro.
Creo que no les había aclarado esto tampoco, pero mis planes desde un inicio estaban en irme lejos a otra ciudad, antes de tener algo con él. Cuando pasó por fin algo entre nosotros, yo le dije: "esto no va a terminar bien, porque yo siempre hago lo mismo, te voy a apartar de mí de alguna u otra forma".
No pasó mucho hasta que así fue, lo aparte de la peor forma que siento que puedes hacer eso: de manera inesperada, sin dar explicaciones ni espacio a hablar. En su momento les juro que no sabía las consecuencias de lo que hacía, el daño que pude haber causado...
Punto aparte y las cosas se arreglaron.
Pero ya adivinaran lo que no es saber valorar lo que tienes en su momento... volví a alejarlo, nuevamente: sin explicaciones, sin espacio a hablar, sin nada claro.
Punto aparte y las cosas se arreglaron.
No pude hacer nada mejor, que terminar de arruinar mi relación.
¿No les ha pasado que cuando tienen algo seguro hacen algo para que esa estabilidad se vaya?
Eso es lo que yo hice, sin pensar nada, sin medir las consecuencias de nada. Le dije que una relación era más de lo que podía dar, que no sabía si las cosas habían sido muy rápido, lo peor, ni siquiera lo dije a la cara...
Cuando ya lo volví a ver él ya no me miraba igual, a sus ojos yo ya no era nadie, o no sé si nadie, pero no alguien como lo había sido antes. El clima era frío, literalmente estaba lloviendo.
Yo no sabía que sentía en ese momento, me estaba aferrando a la idea de seguir juntos, de que todo vuelva a ser como antes y me costó entender algo que él tenían mucho más claro, las cosas no podían ser como antes.
Ver su cara y sus ojos verme de esa manera fue lo peor, ver su cuerpo rígido y sin ninguna inclinación por querer tenerme cerca.
Él me lo repitió una y otra vez, que era mejor terminar las cosas, que él no sentía lo mismo y que no quería ver como yo le rogaba un cariño que ya no me podía dar.
Me quedé ahí sentada negando que eso acabaría así, cada cuanto lo miraba esperando que algo cambie, que su expresión cambie, le rogué, le pedí otra oportunidad, pero nada. Lloré y no lo podía creer, pero nada, nada cambiaba.
No pude hacer más, recuerdo haber puesto mis rodillas al pecho, y en unos segundos tomar mis cosas, pararme, y decirle que me iba. Le desee que le vaya bien, que consiga trabajo porque si, los dos estábamos cesantes, le pregunte si quería decirme algo o mejor me iba y me dijo que fue un gusto conocerme.
Me fui, y ahora estoy aquí escribiendo para Ustedes.
ESTÁS LEYENDO
Ruptura
Historia CortaAquí solo fui escribiendo cada noche de insomnio después de perderte de mi vida.