Kim regresó a su casa en la mañana, después de dar vueltas casi toda la noche y terminar durmiendo en lo alto de una piedra enorme en medio del bosque.Había estado conduciendo sin rumbo por la cuidad, sin saber que hacer, ni a donde ir, hasta que se detuvo a un lado de la carretera, se bajó de su automóvil y se sentó bajo un árbol escuchando los ruidos de la noche.
De pronto había escuchado a los coyotes aullar y vio a uno de ellos a lo lejos, en lo alto de una gran piedra, ya se acercaba la luna llena y entonces este se había levantado y caminado hasta allí pero para cuando llegó el animal ya se había ido.
El alfa se había subido a la piedra también y luego se había quedado allí, contemplando el cielo estrellado y las luces de la cuidad.
Aquello era hermoso y tranquilo, aunque también era muy solitario, sintió su alfa apaciguarse, era muy gratificante, sin duda ese era un lugar especial.
Tras entrar en su casa y mirar con fastidio su sala destrozada, por la cual tendría que llamar de nuevo a un decorador que lo arreglara, entonces subió la gran escalera y fue a su habitación para darse una ducha y cambiarse de ropa.
Al terminar decidió ir al cuarto del omega y vio que esta estaba entreabierta, entonces su alfa interior sintió una gran angustia pues pensó que Porchay se había escapado de nuevo y estaría vagando sin rumbo por la calles, después de caminar toda la noche.
Ya solo quedaba un leve resto de su aroma, muy abatido se sentó en la cama y cogió la almohada en la que el omega había reposado su cabeza y acto seguido la olió.
Notó de nuevo ese gran vacío, el mismo gran agujero que sintió al perderle la primera vez.
Estaba angustiado sin saber si estarían bien y entonces se descubrió totalmente intranquilo del bienestar del omega, incluso mucho más que la primera vez que se había ido.
Ya está por regresar a su salón, cuando escuchó un ruido en el baño, rápidamente se acercó a la puerta pues ni siquiera se había dado cuenta de mirar allí.
Intentó abrirla pero esta estaba cerrada por dentro.
-Porchay, ¿Estás ahí?... Abre la puerta por favor-lo llamó
Nada se escuchó.
-¡Abre la maldita puerta o la tiraré abajo!-gritó entonces
De nuevo el omega no respondió, ni le abrió.
-¡Muy bien tú lo has querido!-gruñó muy molesto golpeando la puerta.
De un puñetazo la destrozó y los trozos salieron volando, entonces se adentró en el bañó y se lo encontró acurrucado en la fría bañera.
Este se acercó nervioso y tras tocarlo comprobó que el omega estaba muy frío y apenas respiraba, entonces comprendió lo que había sucedido.
Sin perder un solo segundo, lo cogió en brazos y lo tendió sobre la cama tapándolo bien para que cogiese calor y rápidamente llamó a una ambulancia.
(...)
A Joong le extrañó no ver a Kim en la oficina, ya casi rondaban las diez y él nunca desaparecía así, entonces lo llamó y este le dijo en dónde estaba.
El abogado no lo dudo y velozmente cogió su coche y se fue hasta el hospital.
...-¿Qué es lo que ha pasado?, ¿por qué el omega está aquí?, ¿qué le has hecho?- le preguntó este muy preocupado en cuando lo vio dando vueltas tras llegar a la sala de espera.
-Y-Yo no lo toqué pero se asustó mucho y-y se encerró en el baño....
-¡Oh joder!, ¿y el bebé?.
-N-No lo sé-Balbuceó angustiado el alfa-... no me han dicho nada...yo me fui y se debió de quedar dormido,.... m-me lo encontré esta mañana en la bañera... Estaba muy frío e inconsciente.
-¿Qué lo asustó tanto?, ¿por qué se encerraría toda la noche en el baño?-preguntó el abogado.
Kim sabía de sobra la respuesta pero en cambio no dijo nada pues ya se sentía bastante mal y no necesitaba escuchar los reproches de su amigo, poniéndolo aún más nervioso.
Tras varios minutos, un beta que parecía ser médico salió.
-¿Cómo está el omega doctor?-preguntó el alfa.
-El pequeño está fuera de peligro aunque ha sufrido una leve hipotermia...al parecer ha tenido un cuadro severo de nervios y también tiene algo de anemia pero....
-¿Qué pasa doctor?, ¡hable de una vez!-dijo Joong nervioso.
-...pero su bebé está muy delicado...sus latidos son muy débiles y además es más pequeño de lo normal... Se supone que está de seis meses, ¿Acaso no tiene alfa?, el semen y el apoyo del alfa, son muy importantes y necesarios para un omega cuando está gestando.
Los alfas se miraron y negaron con la cabeza muy preocupados.
-Bien...aquí haremos todo lo posible para salvarlo pero no tengan muchas esperanzas-dijo finalmente el doctor.
-¿Po-Podemos verlo?-preguntó Kim muy impaciente.
-Les avisaran cuando puedan entrar, por favor no lo alteren.... Ah una cosa más...deberían llamar a su familia... Alguien tiene que responsabilizarse de ese omega, ya que él es un menor.
Ambos amigos asistieron y se miraron con preocupación pues alertar a los padres y a la policía, era lo último que querían hacer.
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9. KimPorchay: El gruñido del alfa - Omegaverse Terminada
FanficAdvertencia: Esta historia contiene escenas de sexo duro y vocabulario fuertes, además de comportamientos abusivos, como violación, agresión, etc...por ello, si eres sensible a estos términos no continues. Sin embargo, quiero decir que no puedes olv...