La prueba

434 44 34
                                    

La pequeña ShiYun masticaba lentamente su desayuno con los ojos ligeramente entrecerrados debido al sueño, sin embargo aún así los volvía a abrir fingiendo estar despierta antes de volver a comenzar el ciclo. Era su primer día de vacaciones, debería estar aún en su cómoda y cálida cama descansando pero en su lugar se había levantado a su hora usual para desayunar en compañía de su padre.

ShiYun adoraba a sus padres, los amaba y sabía que estos la amaban con la misma intensidad. Solamente que le decepcionaba no poder pasar tanto tiempo con su Bába, a quien entre semana apenas podía ver durante las mañanas cuando este le llevaba al kinder y por las noches en la hora de la cena, por ello la pequeña hizo el sacrificio de levantarse temprano a pesar que en ese momento era más sueño que persona.

Sus padres observaban atentamente a su hija, apenas ocultando sus risas fingiendo concentrarse en su desayuno sin embargo compartían el mismo pensamiento.

Que linda.

Tenían ganas de llenarla de mimos y consentirla, sobre todo Jin Ling quien comenzaba a dejar ir su miedo por causar algún daño por su actitud y dejar de temer a su paternidad. Sin embargo no podían hacerlo, tenían muchas cosas de las que ocuparse ese día.

—¿Cuál es su plan de hoy?—preguntó Sizhui con interés, dando un último sorbo a su té.

La pregunta despertó a la pequeña quien mostró una animada sonrisa, como si hace tan solo unos segundos no se hubiese estado durmiendo sobre la mesa del comedor.

—A-Die y yo terminaremos de decorar. La casa estará muy bonita y haré muchas lámparas de papel muy bonitas.

—Ya que mi jiujiu y tus abuelos llegarán pronto tenemos muchas cosas de las que ocuparnos. Además de decorar vamos a acomodar los cuartos de invitados.

Al parecer el que Sizhui y Jin Ling se hubieran matado trabajando había dado sus frutos. Su casa era de un solo piso, pero era lo suficientemente grande como para tener cuatro habitaciones amplias junto con un jardín de gran extensión.

Jin Ling estaba más que satisfecho con eso. Siempre había deseado dejar su departamento y comprar una casa propia con un hermoso jardín para que Hada disfrutará de este.

—No se sobre esfuercen, ¿si? Me aseguraré de volver temprano para ayudarles.—prometió Sizhui levantándose de la silla, tomando sus platos para dejarlos sobre el fregadero antes de retirarse a cepillarse los dientes.

Jin Ling también se puso de pie pero para terminar de alistar el almuerzo de Sizhui.

Tras terminar de empacarlo hizo una mueca. No estaba seguro de que era, pero había algo raro en este.

El almuerzo de Sizhui era completamente distinto al que había empacado los días anteriores para ShiYun. El de su hija no solo era delicioso, sino que también visualmente adorable y apetitoso para la vista mientras que el de Sizhui podía describirlo como "simple".

Jin Ling no era un ignorante de la cultura de almuerzos preparados por parejas. En el trabajo más de uno de sus compañeros habían presumido de sus almuerzos preparados con tanto amor y arduo labor por sus parejas, estos comúnmente estaban plagados de corazones y los menos cursis contenían detalles como pequeñas notas en los que sus parejas les deseaban un buen día.

No sabía qué hacía su yo de ese tiempo (si es que podía llamarlo de esa manera), pero Jin Ling no haría ninguna de esas bobadas. Simplemente acomodo el chowmein y la carne mongoliana que había preparado esa mañana dentro de una linda caja de almuerzo blanca con pequeños dibujos de conejo. No sabía si en realidad la caja era de ShiYun, pero en cuanto la vio supo que ahí debía enviarle el almuerzo a Sizhui.

Un deseo de navidad - ZhuilingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora