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Los días en Salta habían pasado demasiado rápido, aunque ni siquiera habían estado una semana, no solo se habían quedado en el Dique, sino que también pudieron disfrutar muchas actividades más de la ciudad, teleféricos, salinas, el tren de las nubes, viñedos de Cafayate y recorrido distintos comercios y restaurants de esta ciudad. Disfrutaron cada momento del día y Agustín aprovechaba a medida que grababa, iba editando, pudiendo así dejar colgado el primer video de sus blogs margus por Salta.

Esta vez el viaje de regreso a Argentina lo iban a hacer en avión, ya que, Marcos tuvo que dejarle el auto a su hermana. Si bien, este último había invitado a Agustín a que lo acompañe, el platense decidió que se quedaría a esperarlo en el hotel, era pronto para conocer a la familia del contrario, tenía nervios y no se sentía del todo cómodo con la idea, tendría que charlarlo más con su almohada.

Cuando por fin estuvieron en sus asientos esperando a que el avión despegue, marcos volvió a ver que la mirada triste que Agustín había tenido el mismo día que salió de la casa de Santiago por última vez. Puso sus manos en la rodilla y atrajo la mirada de este, la cual poso en sus ojos, tuvieron la mirada fija el uno al otro por unos segundos hasta que Agustín volvió a mirar al piso.

- Bueno, ¿me vas a decir que pasa? – apretó su agarre en la rodilla del contrario – estas raro desde que no volviste a lo de Santiago, solo te distrajiste estos días, pero ahora que volvemos estas igual.

Agustín volvió su vista a los ojos verdes de Marcos que esperaban su respuesta con curiosidad.

- Si me prometes que no te vas a enojar te cuento, ¿Sí?

- No me asustes Agustín, ¿Qué paso?

- Promételo.

- Esta bien te lo prometo, pero dale contame sabes que siempre podés confiar en mí – sonrió - ¿Fue tan fuerte esa pelea que tuvieron el otro día?

- Bueno voy a empezar a contar así que escúchame sin interrumpir – Marcos asintió – cuando terminamos el stream de ese día a Santiago le molesto que yo cuente que nos íbamos a ir a Salta, en realidad no que cuente, sino que nos íbamos esa era la molestia que tenía. Después de pedirle explicaciones de sus últimos comportamientos me confeso... - tragó saliva- me confeso que le pasaban cosas, que estaba confundido o no se que le pasaba. Lo malo fue que cuando le dije que no pasaba nada entre nosotros, que mis sentimientos eran solo de amistad y que te amaba a vos, reacciono de forma no tan buena...

Marcos iba siguiendo lo que le iba contando Agustín sin meterse en la conversación en ningún momento, solamente escuchaba en silencio... pero a medida que iba pasando la historia comenzaba a sentir distintos sentimientos recorriendo su cuerpo y en el ultimo momento su sangre ya hervía. Marcos frunció el ceño y con delicadeza sin sonar enojado con Agustín preguntó

- ¿Qué reacción tuvo?

Agustín suspiro y prosiguió.

- Bueno intento besarme y hacerme entender lo que le pasaba de una forma que la verdad no me gusto, pero...

Marcos hizo lo que dijo que no iba a hacer y lo interrumpió - ¿Pero? ¿Vas a justificarlo Agustín? Este último negó con la cabeza mientras seguía escuchando a marcos. – ¿Cómo pudiste pensar que me iba a enojar con vos? No tuviste la culpa de nada él es un tremendo idiota y ya voy a tener momento para hablar con el y aclarar las cosas... pero... - Marcos poso una de sus manos en la mejilla del contrario y miro fijamente sus ojos - ¿Logro lastimarte?

- No, simplemente quiso darme un beso, pero no pudo porque llegaste justo en ese momento – devolvió la acción del anterior y toco la mejilla de Marcos – siempre tengo que agradecer que tengo un guardaespaldas.

¿𝙽𝚄𝙴𝚅𝙾 𝚂𝙷𝙸𝙿? ; 𝙼𝙰𝚁𝙶𝚄𝚂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora