Capítulo 71: ¿Estás con Ji Mu Qiao?

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Tao Heng estaba sentado en el sofá de su casa viendo la televisión cuando recibió el mensaje de texto.

Hacía un mes que le habían dado el alta en el hospital y había vuelto a su propia casa. En cuanto a los departamentos que le había regalado Qin Wenyuan, aún no los había visitado, todavía no le faltaba dinero para gastar, y cuando un día se le acabara el dinero, los vendería.

Mientras pensaba, sonó su teléfono móvil, lo cogió y lo miró, era de Qin Wenyuan, el contenido le hizo suspirar y crujir mientras escribía de vuelta.

[Lo tengo, espera].

Llamó al tío Chen, que todavía estaba un poco sorprendido cuando recibió la llamada: "¿Sr. Tao?"

"Tío Chen, soy yo", dijo Tao Heng, "Qin Wenyuan está de viaje de negocios mañana, prepara el equipaje y envíalo a la habitación 1608 del Hotel xx".

Quiso colgar tras la transmisión del mensaje, pero fue llamado por el tío Chen: "Señor Tao, espere un momento".

"¿Hmm?" Tao Heng preguntó pacientemente: "¿Hay algo más?"

El tío Chen hizo una pausa y le preguntó tímidamente: "¿Has visto al maestro Qin recientemente?"

"No", le respondió Tao Heng sin pensarlo, "no nos hemos visto".

"Ah, sí". El tono del tío Chen era de decepción.

Tao Heng cogió el mando a distancia con la mano, frotó el pulgar por el lateral y preguntó: "¿Qué le pasa?".

"Hace muchos días que no vuelve a quedarse, llamó y dijo que estaba haciendo horas extras en la empresa, pero cómo un presidente como él necesita hacer horas extras todos los días, es muy preocupante, ¡eh!".

El tío Che, no sabía si era intencional o no, hizo que Qin Wenyuan pareciera miserable, "La última vez que lo ví, el maestro Qin ha perdido mucho peso, parece que no comió adecuadamente en la empresa, y no lo he visto durante algunos días, así que no sé si ha vuelto a perder peso."

Tao Heng no contestó, ni colgó el teléfono, las palabras del tío Chen entraron en sus oídos, se dieron la vuelta y salieron por la otra oreja, cambió el canal, era un drama competitivo de doble protagonista masculino recientemente caliente, uno de los protagonistas masculinos era el número uno dentro de la compañía de entretenimiento de su propiedad, un regular de éxito reciente.

"Sr. Tao, soy viejo y hablo mucho, no se lo tome a pecho".

El tío Chen dijo un montón de cosas y finalmente llegó a esta frase, Tao Heng le respondió: "Está bien, colgaré si no hay nada más".

Después de decir eso, no esperó a que el tío Chen dijera nada más, así que simplemente pulsó el botón de colgar.

El protagonista masculino de la televisión decía sus líneas con propiedad. Tao Heng se quedó mirando la pantalla apagada del móvil durante un rato y no pudo contener la risa. Pensó que el tío Chen estaba demasiado preocupado, él sabía mejor que nadie qué clase de persona era Qin Wenyuan, no era una persona que dedicara todo su tiempo al trabajo. Era un hombre que podía dirigir dos empresas al mismo tiempo, echar un polvo a todas horas y seguir manteniendo a su familia, así que ¿cómo podía permitirse estar fuera de casa sólo para trabajar?

Tao Heng sacudió la cabeza, tiró el teléfono a un lado y siguió viendo la televisión.

Media hora después, el drama terminó y Tao Heng volvió a meter su silla de ruedas en el dormitorio. Se colocó en la cama y en la mesita de noche había varios frascos de pastillas.

Las abrió una a una, vertió las píldoras que quería tomar y finalmente las reunió en su mano, se las metió en la boca y las tragó.

Tras recibir el alta hospitalaria, el médico le aconsejó que se recuperara, y él se quedó obedientemente en casa todos los días, excepto en una visita a la empresa de entretenimiento hace algún tiempo, en la que convocó una reunión con el personal afectado para comunicar a todos que la empresa había cambiado de propietarios, y luego se reunió con algunos de los más populares de la empresa.

No les sorprendió que fuera el dueño de la empresa, pero sí que llegara a la empresa en silla de ruedas, y él mismo se explicó: "He tenido un accidente, no hay problema".

La empresa había sido comprada porque el anterior propietario había huido después de meterse con alguien que no debía, pero la empresa no se había visto afectada. Después de que la empresa llegara a manos de Qin Wenyuan, éste había mantenido a todos los responsables, y la empresa estaba actualmente dirigida por una directora artística llamada Mina, que tenía unas habilidades extraordinarias y era una mujer muy fuerte.

Tao Heng en realidad había conocido a Mina antes, Mina era originalmente una agente y había sacado adelante a dos muy buenos artistas de ídolos, Mina también estaba presente cuando los artistas estaban en el programa que él presentaba, se habían encontrado entre bastidores unas cuantas veces, y ahora que se veían de nuevo, Mina dijo cariñosamente:

"Adiviné que eras tú".

La relación de esposos entre Qin Wenyuan y Tao Heng era desconocida para la gente de fuera, pero la ola más central de la gente del círculo todavía lo sabía. Desde que supo que la empresa había sido adquirida por Qin Wenyuan, Mina se había preparado mentalmente, así que sólo levantó ligeramente las cejas cuando vio a Tao Heng.

"Mi cuerpo aún necesita recuperarse, así que tendré que molestarla por el momento, hermana Na".

El "Hermana" sonó muy halagador, y Mina sonrió: "No es ningún problema, soy buena en lo que hago, así que cuídate mucho y te llamaré si surge algo".

Tao Heng se sintió tan aliviado que dejó la empresa en manos de Mina y al volver a casa, contrató a una trabajadora a tiempo parcial para que se encargara de las tres comidas diarias y de la limpieza, y se quedó solo en casa el resto del tiempo.

El equipo médico le visitaba cada dos días para comprobar su estado de salud, pero no les dejaba quedarse mucho tiempo en casa, disfrutaba de su tiempo a solas, prefería estar solo sin las personas con las que antes le gustaba estar.

Quizás por la ayuda de un profesional, el pie se ha recuperado mejor de lo esperado.

Pero si será capaz de ponerse de pie en el futuro sigue siendo una incógnita, e incluso si lo hace, si será capaz de caminar correctamente es una incógnita aún mayor. Pero no se sintió triste por mucho tiempo, al menos ahora era libre, ¿no?

Apagando las luces y tumbandose en la cama, con sólo una pequeña lámpara poco iluminada, miró al techo, golpeándose la frente con cierto dolor. Todavía tenía problemas para dormir por la noche, cuando cierra los ojos, un sinfín de imágenes que no quería recordar saltan sobre él, siguiéndole como una sombra. El sueño nocturno era un tormento. En el cajón de su mesita de noche hay una pastilla para dormir que le recetó Ji Mu Qiao. No quiere tomarlas todavía, ya tiene bastantes que tomar y no quería pasar el resto de su vida con somníferos.

Cuando recibió el llamado de Qin Wenyuan a la mañana siguiente, sólo había dormido menos de dos horas y estaba mareado, y la única persona que normalmente le llamaba a esa hora era Ji Mu Qiao. Así que cogió el teléfono sin ni siquiera mirar: "Dr. Ji, por favor, sea amable y deje de torturarme, ¿de acuerdo?".

El otro lado del teléfono estaba sin aliento y terriblemente silencioso.

Al no oír hablar a nadie, Tao Heng volvió a decir aturdido: "Ji Mu Qiao, si tienes algo que decir dilo, si no, cuelgo; por cierto, trae unas costillas si vienes, hoy quiero comer costillas agridulces, además, se nos ha acabado el vinagre en casa, la tía no sé si se acuerda de comprarlo, trae una botella cuando vengas."

Después de decir eso, tiró el teléfono sobre la almohada, con la oreja pegada a ella, su conciencia se fue desviando poco a poco, de repente, una voz familiar llegó a su oído, "Tao Heng".

Tao Heng se sobresaltó y todo su cuerpo se estremeció en una reacción general de estrés, al escuchar las siguientes palabras que salían del teléfono: "¿Estás con Ji Mu Qiao?"

Crédito del capítulo: personaltasty1❤❤😊

Me convertí en un sustituto[Bl] FINALIZADO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora