Me convertí en un sustituto[Bl] FINALIZADO

Extra 27: Confesión

Lo primero que pensó fue que tenía una comida delante, así que no había razón para tirarla y no comerla. Si no comiera, se moriría de hambre, y sería él mismo quien sufriría.

Tao Xin se dijo a sí mismo que todo era para no retrasar el trabajo de la tarde, cogió los palillos y comió, el sabor es realmente bueno, no sé qué chef del restaurante encontró para hacerlo.

Cuando el asistente vio a Tao Xin comer, respiró aliviado y cogió su teléfono para enviar un mensaje de texto. Al cabo de un rato, cuando Tao Xin terminó de comer, subió y metió todas las fiambreras en una bolsa térmica y las llevó abajo.

Abajo, en el vestíbulo, Qin Rui estaba sentado en el sofá mirando su teléfono móvil, su asistente corrió y le entregó respetuosamente la bolsa, diciendo: "Todo terminado".

Qin Rui preguntó: "¿Dijo algo?"

El asistente pensó por un momento: "No dijo nada".

Qin Rui bajó los ojos.

"¡Oh, sí!"

El ayudante tuvo de repente un destello de luz, Qin Rui levantó los párpados para mirarle y le oyó decir: "Alguien preguntó al señor Tao quién había traído la comida, el señor Tao dijo que era de casa, alguien quiso pedirle al señor Tao un bocado, el señor Tao no le dejó y se lo comió todo él".

Después de escuchar, Qin Rui enganchó ligeramente los labios: "Este mes tu bonificación se duplica".

El asistente se sorprendió al escuchar esto: "¿De verdad?".

"Bueno", Qin Rui se puso de pie, "Se acreditará en su cuenta a fin de mes".

"¡Gracias, Sr. Qin!"

Qin Rui dio un gran paso, se subió a su coche a paso ligero y se alejó con él.

Al día siguiente, Tao Xin volvió a comer la comida especial enviada por Qin Rui, se quedó mirando la familiar caja de cristal, sus ojos se dirigieron directamente al asistente, "¿Qué te ha dado?"

El asistente no se atrevió a decirlo, y sólo dijo vagamente: "El señor Qin dijo que tus pies aún no están bien, y que temía que trabajaras demasiado, así que estos platos son para que te repongas".

Tao Xin se frotó la frente: "¿Los envió personalmente?"

"Sí", dijo el asistente, "todavía está abajo, le enviaré la caja cuando termine de comer".

Tao Xin miró por un momento los floridos y bastante bonitos platos de la caja, cogió los palillos y comió.

Después de la comida, el asistente mandó bajar la caja como de costumbre, y Qin Rui la recibió y preguntó lo mismo que el día anterior: "¿Dijo algo?".

El asistente lo dijo todo, Qin Rui escuchó y se fue.

El tercer día siguió igual, Tao Xin ni siquiera se molestó en preguntar, se limitó a comer y a hacer un gesto a su asistente, estaba molesto.

Y así fue durante cinco o seis días. Cuando llegó el momento de incorporarse al equipo de filmación, el Qin Rui que trabajó diligentemente para repartir comidas hasta el último día, ni siquiera apareció, así que estaba muy tranquilo.

La noche anterior a la partida, Tao Xin estaba haciendo las maletas en su casa cuando recibió una llamada de Qin Rui: "Baja".

Tao Xin dio un respingo y se acercó a la ventana para mirar hacia abajo, viendo el familiar coche negro y la conocida figura de pie junto a él. "¿Qué haces de noche?".

Qin Rui inclinó la cabeza para mirar hacia arriba, el piso era tan alto que la gente de arriba podía verle, pero él no podía verles a ellos arriba, "Tengo algo que decirte".