Evade Them!

¡Bienvenido A Evade!

Thomas

Hola, soy Thomas Edwards, tengo 14 años y voy a la preparatoria. Tengo el pelo rubio, ojos azules y ando vistiendo una campera negra, jeans y zapatillas negras. Actualmente estoy llendo a mi casa después de un largo día en la prepa, solo espero llegar y comer la comida de mi mamá y después hecharme a la cama a dormir el resto del día.

Narrador

Thomas se encontraba a unas pocas cuadras de su casa, pero detrás de el lo seguía una camioneta blanca, de la ventana del pasajero, un hombre enmascarado sacó su cabeza y una pistola de dardos con un silenciador.

El hombre esperó un punto debil y le disparó al chico en el cuello, haciendo que este se sacara el dardo y luego caiga desmallado.

Luego los hombres estacionaron el auto y subieron al chico a la camioneta y se fueron sin dejar rastros.

Unas horas después

Thomas

Me desperté en un lugar extraño, como un gran salón blanco con unos pocos pasillos, rampas hacia arriba y abajo, pero no había techo, solo lo tapaba un poco de lo que parece ser el piso de arriba que lleva una rampa gigante no muy lejos de donde estoy actualmente. Algo raro también es que no había nadie cerca o muebles.

Empiezo a escuchar una extraña voz atrás mía que parecía estar gritando "you're too slow", luego algo me golpeó con fuerza tirandome unos cuantos metros hacia adelante. Intenté levantarme pero no podía, algo había atacado mis piernas y las dejó inhabilitadas o paralizadas, creo.

-¿Pero qué? No me puedo levantar. -dije intentando una vez más levantar mis piernas, fallando en el intento.

Ví a lo que me había empujado y observé lo que parecía ser ¿El antiguo meme de Sanic? Ese meme ya había pasado de moda hace años y no paraba de gritar "you're too slow".

Por una distracción de estar mirando mucho a la vieja parodia de Sonic, sentí como algo me levantó y me llevó en uno de sus hombros.

-¡Oye! ¿Qué mierda haces? -le dije al tipo que me agarró desprevenido y me empezó a llevar lejos de Sanic, pero el meme nos estaba persiguiendo.

-¡Shh! -me silenció el tipo que llevaba una extraña máscara de un animal que no reconosco, parecía un oso hormiguero, un perro o un oso.

El enmascarado empezó a hacer lo que parecía ser parkour o algo por el estilo, haciendo que subamos a lo que parece ser una pared, luego me recostó boca arriba y me empezó a curar las piernas con una extraña aura dorada en sus manos.

-¿Y tú quién eres? -le pregunté, soy bastante desconfiado apesar de que me acaba de curar la paralizis en mis piernas.

-Dime Liz. -dijo sentandose en el borde del muro.

-¿Qué? ¿Eres Chica? -dije en un tono de burla, parandome.

-Soy vato. -me dijo con frialdad en su voz.

-Bien "Liz", yo me voy. -dije intentando saltar del muro, pero el chico me agarró del brazo y casi caigo encima del Sanic.

-Siempre mira antes de tener que saltar o avanzar. Por cierto, ¿tú no eres de aquí? -dijo regresandome hacia atrás, alejandome del borde.

-La verdad no, solo sé que me dispararon un dardo en mi cuello, me desmallé, desperté en medio de un lugar blanco que nunca ví en mi vida, me atropelló un Sanic y luego tu me tragiste acá y me curaste. -le expliqué de forma lo más resumida posible a Liz.

-Veo... -Liz iba a decir algo más, pero este miró a su derecha muy rápido-. Quedate aquí y no te muevas.

-¿Y tú quién eres para darme ordenes? -le dije desafiandolo.

-¿Quiéres que Sanic te atropelle otra vez? -me miró, creo.

Ahí ya no respondí y Liz dió un saltó, aterrizó en el piso y se hechó a correr a su derecha mientras Sanic lo perseguía. Yo me senté en el piso y me puse a buscar una razón lógica de como es que una parodia estaba viva y me quería matar, del como llegué a este lugar que desafiaba un poco las leyes de la física y como es que Liz me curó rápidamente la paralizis de mis piernas.

No pude seguir pensando debido a que Liz llegó y trajo a alguién en su hombro que llevaba una máscara de un halcón, creo, lo dejó en el piso y lo empezó a curar las piernas como me lo hizo a mí. Luego la persona que trajo Liz me miró.

-¿Y tú quién eres? -cierto, no me había presentado.

-Soy Thomas Edwards, un gusto señor. -le dije.

-Si estas en esta parte del mapa es porque Liz te salvó, bien, soy Ileco. -se presentó.

Ahora que me encontraba un poco más tranquilo, observé bien a Liz y a Ileco. Liz llevaba una extraña chaqueta marrón claro y unos pantalones negro, aparte de la máscara, y tenía una piel muy pálida. E Ileco llevaba una remera marrón y unos pantalones azules, y también su máscara, y tenía una piel en tono moreno.

De la nada, en el lugar se empezó a levantar una niebla negra algo densa. Liz e Ileco sacaron unas linternas de lo que parecen ser bolsos amarrados a sus caderas.

-Deberías de sacar tu linterna si quieres ver en la Ronda Especial Oscuridad. -me dijo Liz.

-Pero si yo no tengo una linterna. -le dije levantandome.

-Se vé que no eres de aquí, agarra tu linterna del bolso que tienes en tu cadera. -dijo Ileco señalando mi cadera, miré donde apuntó y ví que tenía una bolsa igual a la de ellos, no sabía que la tenía. Agarré la linterna y la prendí.

-No te separes de mí niño. -me dijo Liz, saltó del muro y se largó a correr.

Yo lo imité y me largué a correr junto a él, en el camino ví lo que parecía ser ¿Un Sans? No importa, igual como pude lo evité, pero este me estaba persiguiendo.

-¡No dejes que Sans te atrapé, y agarra a la persona que está cerca de tí! -me gritó Liz, apuntando a una persona tirada en el piso, con las piernas paralizadas, creo.

Le hice caso y evité a Sans, agarré a la persona en mis hombros como lo había hecho Liz conmigo cuando lo conocí y seguí a Liz como pude con la espesa niebla. Al cabo de un rato, dejé de escuchar a Sans e hice parkour para llegar al muro.

-¿Sabes como curar la paralizis? -me preguntó Liz.

-No. ¿Y donde fué Ileco? -respondí y la pregunta que hice era verdad, Ileco no estaba en el muro.

-Ileco fué a salvar más personas de los Nextbots. Y luego te enseñaré como curar la paralizis. -dijo poniendo sus manos arriba de las piernas de la persona que salvé y enmanó otra vez aquella aura, curando la paralizis de las piernas y luego la persona se fué sin decir nada.

-¿Y cómo curo la paralizis? -le pregunté viendolo.

-Mira, agarra tu bolso y mira adentro, debería de haber una pulsera dorada o amarilla, pontela en una de tus muñecas y deberías de empezar a poder curar la paralizis. Cabe aclarar que esto no funciona en tí mismo, solo en los demás. -me indicó.

Hice lo que me dijo, abrí mi bolsa y encontré una pulsera dorada, me la puse en mi muñeca derecha y la observé.

-Que bella. -dije.

-¿Verdad qué sí? Bueno, ahora mira en tu bolso si hay un casco y pontelo. -me volvió a indicar.

Sin saber para qué me serviría, volví a abrír mi bolso y saqué un casco extraño de color negro, me lo puse y pude observar algo, como una votación enfrente mío.

-Wow, ¿qué es esto? -pregunté.

-Eso es una votación de mapa, te recomiendo que votes por el Laberinto. -me dijo Liz.

Le hice caso y voté por el laberinto, que tenía una gran cantidad de votos. Luego la votación terminó y nos teletransportamos a lo que parecía ser una parte de un laberinto.

Intenté cruzar una pared, pero choqué con algo y casí caigo para atrás.

-Calmado campeón. -me dijo Ileco agarrandome por la espalda para no caerme.

-¿Qué es esto? -pregunté asombrado.

-Bueno niño, bienvenido a Evade. -me dijo Liz al lado de Ileco.