Evade Them!

Un Gran Amigo

Thomas

Seguí observando a las figuras borrosas, luego distinguí que debajo de unos escombros había un oso negro atrapado, aparentemente inconsciente, al lado de este había un halcón blanco y un demonio rojo, en frente de estos dos mencionados había un pájaro cardenal rojo, el cual parecía pelear con un oso hormiguero o perro, no sé.

-¡Entiendelo! ¡No te puedes arriesgar para salvarnos _____! -al final parecía que decía un nombre, pero no logre escucharlo debido a que se lo escuchó distorcionado.

-¡Esta es la oportunidad de que ustedes escapen y sean libres ______! -dijo el oso hormiguero/perro hacía el cardenal.

El halcón junto al demonio sacaron al oso negro de los escombros y corrieron a una pared rota, atravesandola y llegando al exterior.

-¡Pero _____! -el pájaro iba a continuar, pero el oso hormiguero/perro lo empujó con el halcón, demonio y oso al exterior.

-Por favor, vivan una vida lejos del peligro, bola de idiotas. -dijo el oso hormiguero/perro llendo a atacar a los guardias que empezaron a dispararle, pero los esquivaba, hasta que cinco balas le dieron.

-¡_____! -gritó el pájaro.

Fué un grito muy fuerte, al punto de que resonaba en mi cabeza, sentía la necesidad de correr a toda prisa y atacar a los guardias, pues los animales me parecían familiares, igual, animales o no, nadie merece morir.

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Me desperté debido al sueño (que parecía más una pesadilla que otra cosa) y noté que estaba encerrado en un cuadrado de tres barreras y una pared atrás mío.

-¿Donde... Estoy? -me levanté de ahí y pude ver que estaba en medio de otro desierto, pero no estaban las ruinas que había visto.

Escuché que alguién venía rápido, volteo a mi lado izquierdo y veo a Hayate venir con un derribado, era Figure.

-¿Eh? ¿Thomas? -dijo Hayate al verme ahí parado-. ¡Thomas! ¡Despertaste! -Hayate dejó a Figure en el piso y corrió a abrazarme.

-Hola Hayate. -dije correspondiendo el abrazo. A pesar de que llevaba la máscara, podía notar a kilómetros la felicidad y alegría que tenía Hayate en ese momento.

-Oigan, yo también existo saben. -dijo Figure tirado en el piso.

-Perdón Figure. -dijo Hayate acercandose y curandole la paralizis a Figure.

-¿Donde está mi máscara? ¿Qué pasó? -dije tocándome mi cara, no sentía mi máscara puesta.

No le dió tiempo a Hayate o a Figure de Responder debido a que escuchamos una música y luego un ruido raro, luego apareció una persona siendo perseguída por un Nextbot que llevaba la cara de la Roca.

Nos largamos a correr por todos lados, separandonos y alejando al Nextbot. Me desvíe y llegué a un área rejada y a lo lejos observé a Liz cargando a un derribado.

Me alejé debido a que otro Nextbot me perseguía, era el emoji Nerd que había en los teclados de los celulares. Corrí unos segundos y el Nextbot desapareció, supongo yo que la ronda ya había terminado.

Corrí hacía el lugar con barreras donde yo desperté, ahí me encontré a Hayate sentado.

-Hola Hayate. -saludé y me senté a su lado.

-Respondiendo a tú pregunta, Ileco se llevó tú máscara para ver que le pasó al comunicador, y a la otra, estamos en el mapa Autobús Del Desierto. Pasaron tres partidas desde que te desmayaste. Por lo general cuando las personas cuando no se les cura la paralizis durante un buen tiempo, se desmayan y nunca más vuelven a despertar, pero tú si pudiste. -entendía lo que me decía, las personas morían, pero yo solo me desmayé.

Ahí noté algo, todos aquí no saben lo que significa la muerte, debido a que nunca la mencionan o ni siquiera sabían lo que era.

-Bueno, igual, gracias. -le dije mientras me apoyaba contra la pared de lo que era un especie de iglesia.

-¿Por qué? -dijo Hayate sacándose la máscara para poder respirar mejor (creo), dejando ver sus ojos negro oscuro que parecían perforar con solo verte.

-Por no dejarme tirado durante las rondas y mantenerme a salvo por si despertaba. -le dije viendolo con una sonrisa.

Hayate se sonrojó un poco (debido a que su piel algo pálida lo delataba) y giró su cabeza hacia el otro lado.

-N-no hay de que. -dijo algo nervioso poniendose la máscara y se paraba.

Se quedó callado por unos segundos y luego se volteó a verme.

-Mira, quedate aquí mientras voy con Ileco y veo si tu máscara ya está arreglada. -iba a protestar pero Hayate salió corriendo en otra dirección.

Si era peligroso el hecho de salir del pequeño refugio que hizo Hayate sin mi máscara, ya que no sabía cuantos derribados podrían haber y no sabría los detalles y peligros a mi alrededor. Al pensar todo eso solo me cruzé de brazos, no sabía que hacer en ese momento.

Pensando en lo que podría hacer, me acordé de la existencia de la bolsa que iba en mi cadera. La agarré y la abrí, lo primero que ví fué una herramienta extraña, igualita a la que tenían Liz e Ileco, no sabía que podía hacer, aparte de invocar barreras de la nada, seguro que con mi máscara podía saber más de esta.

Metí de vuelta la herramienta es el bolso y me encontré un poco de comida, no tenía hambre en ese momento, entonces la volví a guardar, y no había nada más en el bolso. Justo llega Hayate con mi máscara entre sus manos.

-Toma, Ileco le cambió el comunicador debido a que se daño al chocarte con una caja en el Ikea. -dijo entregandome mi máscara.

-Gracias. -la agarré y me la puse, podiendo ver todo como antes. Quería probar si lo de la herramienta era verdad, así que saqué la dichosa herramienta de la bolsa y pude observar una especie de inventario en la que habían tres barreras, no las iba usar ahora debido a que no las necesito.

Ví que habían varios derribados, entonces me levanté y fuí a buscarlos. Justo agarre un derribado y un Nextbot con la apariencia de Nyan Cat me empezó a perseguir, de alguna manera me acorraló y me derribó, lo que me obligó a soltar a la otra persona.

.¡Thomas! ¿Estas bien? -dijo Liz a travéz del comunicador.

-¿Y tú qué crees? -le dije con sarcásmo.

-Que bastante bien. -ya Liz me empezó a seguir la corriente con el sarcásmo.

De la nada alguién me agarra de mi mano izquierda y me lleva lejos, era Hayate. Me dejó en otra iglesia lejos de la que él había hecho el mini refugio y me empezó a curar la paralizis.

-Gracias. -le dije.

-Supongo que de nada. -dijo Hayate y se fué.

Hayate tiene un buen corazón, solo que no se sabe expresar muy bién. Pero no habían dudas, él es un gran amigo.