Una velada mágica y los pensamientos.
Todo lo que sale del tintero después de las siete de la tarde es una tormenta inexplicable.
Si gustas, puedes tomar estos pequeños escritos como tazas de té antes de dormir. Nadar entre las reflexiones y dejar...
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En la noche, yo despierto. La luna es mi sol; las estrellas, las nubes. No hay nada que me guste más que el frío de la madrugada. Su silencio total, esa paz sinigual.
El día me abruma, yo despierto por la noches. Ese es mi lugar, tan refrescante, mágico. Es que no sé si alguien lo comprenda, pero hay una pequeña bruma. La veo claramente, te envuelve, te inunda.
Las mejores ideas, de a café y en la noche. Nada en la mañana, cuando el sol clarea siento que debo volar como ave, pero en las noches me agrada mi nido y las imaginaciones son sin reproche.
Me gusta la noche, porque ese es mi mundo. Si fuera un planeta, sería uno nocturno. Soy hecha de sueños, de mucho silencio, de tés y cafés, de música fuerte.
En la noche, yo despierto y me parece un gran defecto que diario el sueño me hace efecto.
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