El Secreto de una Verdad Negada

Sentimientos

   Me encontraba a las afueras de un bosque, en la orilla de un risco elevado y el agua de abajo parecía permanecer en calma, la sensación que me da este lugar me resulta un tanto familiar...

— Merlina —Esa voz— has olvidado que el camino del cuervo es solitario —Giro a ver a mi derecha encontrándome con ella

— Goody...

— El tiempo se acerca Merlina —Me giro completamente a ella— estar solo no es solo por tu bien, es por la paz de todos

— No te entiendo, dijiste que ya no te volvería a ver ¿Qué está por ocurrir? —Trato de caminar pero mis piernas no responden, el oleaje del agua de abajo se hace más salvaje

— Tus alas ya son muy fuertes, serán capaces de protegerlas cuando el momento llegue —¿Cuándo el momento llegue? ¿Se refiere a mi acosador?

— Espera ¿Qué me puedes decir de ellas? ¿Cómo las puedo controlar? ¿Cómo consigo ese gran poder? O...

— Nadie sabe, solo ocurre y más con las tuyas

— Pero...

— Solo puedo decir que el dolor es lo que necesitarás para conseguirlo

   Antes de que pudiera pedir una explicación se hizo a un lado permitiéndome ver detrás de ella, ahí al borde del precipicio estaba Enid, herida posiblemente de muerte, la sangre que tenía encima no sabía si era suya pero se veía débil, me miró y sonrió para al final caer, no podía respirar, quería moverme y no lo conseguía, debía salvarla, se supone que tenía que protegerla ¡¿¡Por qué... POR QUÉ NO HAGO NADA!?!

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     Desperté sudando frío y la respiración agitada, pero un aroma familiar me calmó, miré con mayor claridad mi entorno notando que ahí estaba ella, estaba bien, tranquila y su corazón palpitaba con normalidad, estaba aquí, está viva...
   ¿Eso fue solo un sueño o una visión? No lo sé, pero temo averiguarlo, no quiero ser la culpable de otra muerte, al menos no la de Enid...

Omnisciente

     Aunque Merlina consideró alejar a Enid para mantenerla a salvo eso le fue imposible, sus días no podían ser si no veía a la loba al menos una vez al día, si no la escuchaba o simplemente si no percibía su aroma, esto era algo muy similar con la rubia, con la diferencia de que ella si se sentía libre de expresar su sentir con otros amigos

— Entonces al final si pudiste tener una serenata —Dijo pícara la vampira
— No fue una serenata, solo fue una práctica —Rápidamente se defendió la loba
— Pues en lo personal creo que sí hay más de una persona tocando a la luz de cualquier luna a otra persona en un balcón mientras se ven fijamente a los ojos eso para mí ya se puede considerar como una serenata —Agregó el joven apicultor
— Solo fue una práctica, nadie cantó y ni siquiera fue romántico — Mintió en lo último y Yoko lo notó
— ¿De que hablan? —Preguntó alegre Ajax recién llegó
— De nada importante —Le sonrió un tanto forzado pero él no lo notó— ven siéntate conmigo amor —Se hizo a un lado en la banca y palmeó el lado libre
— Lo siento Enid, debo hacer algo con Dan... Ammm... Un... Un trabajo de la profesora Contreras —Dijo nervioso pero la rubia no dio importancia
— Oh bueno —Sonrió como si nada
— Si, pero bueno, solo viene a preguntarte si nos podíamos ver mañana en el Veleta después de clases
— ¡Seguro! —Dijo con emoción pero con la mirada apagada
— De lujo, bueno, nos vemos chicos

     Aquellos amigos se despidieron pero solo Eugene no había notado lo que realmente ocurría, Yoko aún tenía algunas dudas que quería resolver pero de momento no podía, por su parte Enid solo tomó su jugo cuando Ajax se retiró.