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Si no leíste las advertencias, hazlo ahora, no me hago responsable de lo que la historia pueda generarte, por favor, no saques de la ficción a la realidad.

Es una historia algo dura, no nada de gore, mutilaciones, asesinatos. Por favor, evitar sacar la ficción de la realidad.

—Yo... ¿cuándo le dirás a tu familia?

—Hoseok, ya te he dicho que no puedo hacerlo, por dios... no lo van a aceptar.

—Pero tú me ocultas de las personas, Yoongi.

—¿Puedes dejar de decir estupideces, Hoseok? —, el otro asintió suavemente y luego Yoongi se giró hacia él para tomar de sus mejillas.

—Mi amor... yo te amo, mucho, realmente te amo mucho, pero entiende, ahora mismo estoy en la cima... una noticia así sólo haría que se burlen de mí.

—Llevamos saliendo siete meses, Yoongi...

—Sólo espera a que yo tenga el valor de hacerlo, ¿está bien? —, el otro asintió antes que Yoongi lo bese tomando de su mentón.

Hoseok llevaba enamorado de Yoongi ya varios años, sólo siete meses el otro correspondió a lo que sentía, para él fue algo tan lindo, pero Yoongi simplemente lo ocultaba.

Por miedo a que lo tachen de gay, de poco hombre, de maricón, de puto, Hoseok comprendía su postura, Yoongi venía de una familia rica, de alta clase, iban a la misma Universidad, en donde la homofobia estaba más presente.

Siendo Hoseok el más afectado, se reían de él, a donde iba le decían puto, marica, mariconcito, claramente se lo contó a Yoongi, pero éste sólo le dijo que no diga nada, que no les haga caso.

No lo defendió en ningún momento y eso dolió bastante para el otro.

A puertas cerradas Yoongi era el ser más cariñoso, amoroso y tierno posible.

Pero en público ni siquiera le hablaba.

—¡Hoseok! —, el chico lo abrazó con fuerza llevándose miradas de todos ahí, a Taehyung no le importaba lo que decían, él quería mucho a Hoseok.

—Te compré chocolates, ¿quieres? —, el otro agarró el chocolate y luego de sentaron  juntos, Taehyung no tenía vergüenza de abrazarlo, acariciar sus mejillas, cabeza, cabellos, siempre estaba pegado a él, Taehyung también recibía comentarios homofóbicos por estar junto a Hoseok, pero el otro ni siquiera volteaba a ver.

—¿Quieres ir a mi casa hoy? Tenemos que hacer el trabajo de química, Yoongi, Jungkook, tú y yo estamos en el trabajo, será en mi casa, aunque Jungkook dijo que podíamos ir en su casa.

—Yo no quiero ir, sabes que Jungkook es muy... discriminatorio.

—Lo sé, pero tenemos que hacer el trabajo para poder pasar el año, anda, sólo será una hora, ¿si? —, Hoseok asintió para después sonreír cuando Taehyung le acarició la cabeza.

—Ahí están los maricas, ¿acaso no piensan en lo desagradable que son? Más Hoseok, Taehyung no es gay... bueno, por lo que tengo entendido, ¿pero Hoseok?

—Es repugnante. —, respondió Jungkook para dejar su teléfono y mirar a los ajenos con desagrado.

—Imagina follarte a un hombre, vaya puto asco. —, Jungkook se rió después de lo dicho para después voltear a ver a Yoongi quien estaba mirando su teléfono.

—¿Por cuánto te follarías a un hombre, Yoongi? —, el nombrado levantó la vista para mirar a Jungkook y dejar su teléfono.

—En serio que eres asqueroso, no lo haría, no me importa el precio, jamás lo haría, mucho menos besarlo. —, observó como Hoseok le sonreía a Taehyung con las caricias y cosas que Taehyung le decía, apretó los dientes al ver que Taehyung tocaba a su chico con tanto cariño.

A Puertas Cerradas. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora