Capítulo 3.

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Jean.

Jean: Naim, vienes conmigo.

Naim: ¿Adónde?

Jean: A donde yo diga.

Naim: ¿Eso significa que hoy no tengo el día libre?

Jean: Sube al auto y espérame ahí.

Naim: Ya qué.

Se queja pero hace lo que le digo. Yo termino mis asuntos pendientes y poco después ya estoy con él.

Naim: Ya era hora. ¿Adónde vamos?

Jean: A las oficinas Esparza. *arrancó*

Naim: ¿Ayer firmaste con la empresa, no?

Jean: Sí.

Naim: Y vas de nuevo.

Jean: Ajá.

Naim: ¿A qué?

Jean: Vas a donde mismo, ya vas a saber todo.

No vuelve a hablar y llegamos en un tranquilo silencio. Nos dejan entrar cuando Dominik lo permite y nos presentamos frente a ella.

Dominik: Buenos días. Tomen asiento.

Jean: Buenos días. Él es Naim, mi asistente. *nos sentamos*

Dominik: Un gusto.

Naim: Igualmente.

Dominik: Recuerdo haber escuchado ayer que quería cotizar algunas ventas con nosotros.

Jean: Así es. Mi empresa necesita material y creo que usted es quien puede manejar la situación.

Dominik: Escucho, ¿qué es exactamente lo que necesita?

Dejo que Naim sea quien le expliqué todo mientras yo sólo miro como asiente concentrada e interesada a lo que habla el chico a mi lado.

Dominik: Entiendo, *dice cuando Naim termina* denme unos minutos, ya estoy con ustedes.

Se levanta y sale cerrando la puerta.

Naim: ¿De dónde salió esta chica? ¿Ya viste que escote?

Jean: Naim, ¿puedes concentrarte en el trabajo y no en las tetas de cualquier mujer que veas?

Naim: Hermano, antes de ser tu asistente, soy tu amigo. ¿A qué está buenísima?

Dominik: Lamento la tardanza, *entra* aquí está el costo aproximado de el material que necesitan.

Tomo el pequeño pedazo de papel y leo la cantidad escrita en él. Se la paso a Darrechi y me levanto.

Jean: La cifra es alta, pero quiero creer que todo es de buena calidad.

Dominik: Mi trabajo siempre es de la mejor calidad, y usted va a poder comprobarlo cuando lo tenga en sus manos.

Jean: Excelente, ¿le dejo el cheque a usted?

Dominik: Puede arreglar eso con mi secretario, su oficina está a la derecha.

Jean: Muy bien. Me gustaría saber cuándo llega todo.

Dominik: Usted siga cuándo lo necesita y estará ahí.

Jean: ¿Pasado mañana al mediodía?

Dominik: Pasado mañana al mediodía tiene todo en su empresa. Quédese tranquilo, mi empresa es muy comprometida a la hora de cerrar ventas. Siendo usted socio, su compra es muy importante.

Jean: ¿Estará ahí?

¿Qué acabo de preguntar?

Claramente coincido con la opinión de mi amigo, la chica está más que guapa, tiene un cuerpo de infarto, su cabello castaño claro le cae por la espalda libremente y sus ojos azules resultan hipnotizantes.

A Tu Lado. [JeanCarlo León]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora