A Tu Lado. [JeanCarlo León]

Capítulo 6.

Jean.

Libardo: Tienes que contarme ya qué es lo que te tiene así. *dice del otro lado de la pantalla*

Jean: ¿Así cómo?

Libardo: Así, como... pensativo.

Jean: No es nada.

Libardo: ¿Sabes qué creo yo? Que no dejas de pensar en tu nueva socia.

Jean: ¿Por qué lo dices?

Libardo: Vamos, los dos sabemos que está guapísima. Es imposible olvidarse de ella.

Jean: ¿Quieres que te cuente un secreto?

Libardo: Dímelo ya.

Jean: Estuvo en la reunión de ayer.

Libardo: No me sorprende, también es empresaria.

Jean: Como acompañante de uno de ellos.

Libardo: ¿Acompañante? ¿De quién?

Jean: Un tal Aleksander Benz.

Libardo: ¿El alemán dueño de la cadena de hoteles más lujosos e importantes del mundo mundial?

Jean: Si ese alemán dueño de todo eso se llama Aleksander Benz, pues sí, es él.

Libardo: Eso sí que es sorprendente.

Jean: Eso no es todo.

Libardo: ¿Se la tiró frente a ti y tienes envidia? Yo también.

Jean: No, fue más bien que...

Libardo: No le des más vueltas al tema. Dime ya.

Jean: Deja de interrumpir.

Libardo: Okay, ya.

Jean: Subió al baño y fui detrás de ella.

Libardo: ¿Te la diste en el baño? *vuelve a interrumpir*

Jean: No hubo sexo en toda la extensión de la palabra, sólo sexo oral.

Libardo: Amigo, te envidio como no tienes una idea. ¿Qué tal ella? ¿Le diste un orgasmo?

Jean: Fue tan experta.

Libardo: Y con eso llegamos a la conclusión de que también le hace orales al alemán.

Jean: Eso no viene al tema ahora, ya lo sé.

Libardo: Dime a qué huele, por favor.

Río y vuelvo a pensar en la chica, debo decir que me desilusionó un poco el verla junto a alguien más.

Jean: Está soltera.

Libardo: ¿Qué?

Jean: El día que firmamos, investigue más de ella. Se dice que es soltera por que no le interesa una relación.

Libardo: Entonces son amigos con derechos. Follan pero no son nada más que eso, amigos.

Jean: Tal vez.

Libardo: Te apoyaré si quieres enterrar vivo a ese tipo para quedarte con ella.

Jean: Eso es algo que harías tú, no yo.

Libardo: Por eso te doy mi apoyo, yo le tiró la tierra encima mientras tú vigilas que nadie venga. Es fácil.

Jean: Tienes una mente retorcida.

Libardo: Piensa que es por tu bien. La tendrás para ti solo.

Jean: Tengo que irme ya. Nos vemos en la noche.