"Dime lo que quieres y te daré lo que mereces"-Koll
—Por favor, suéltame —pidió Snixe, suplicando que la imagen de su trauma desapareciera de su mente.
Morer sonrió sin vergüenza y sus ojos ámbar tenían una mirada felina. Estaba en peligro.
Dentro del juego, Morer era más peligroso de lo que parecía. Además de ser sumamente dominante, le gustaba escuchar las negaciones.
Era un personaje otome atractivo en demasía, pero siempre se metía en los problemas, era muy ególatra y poco empático.
Snixe sollozó, y nuevamente apareció el tablero frente a ella con las mismas opciones.
~Besarlo.
~Apartarlo.
~Gritar.Cayó en cuenta de que si no hacía lo que se le venía a la mente lo antes posible, terminaría en un final trágico. Juntó la poca valentía que todavía le quedaba, y levantó sus manos, colocándolas delicadamente en el rostro del de cabellos azabache. Sonrió triunfante y dejó que ella lo acariciara.
Lo atrajo hacia ella, y pensando que le haría una caricia húmeda, sintió su caliente aliento en su pálido cuello.
» Ahora éste va a ver « pensó para después clavar su filosa dentadura en el cuello de el azabache. Las gotas de sangre no tardaron en aparecer y se deslizaron violentamente sobre sus labios.
Morer la empujó y se apartó de ella. Frunció el ceño al tocar la herida y se retiró. Volteó la mirada estando de espaldas y sonrió pícaro. Snixe era más fiera de lo que parecía.
Desapareció por la puerta, y la peliblanca se deslizó por la pared lentamente. Estaba abrumada.
Puntos de afecto de Morer conseguidos (15)
—Tiene que ser una broma. ¿Cómo rayos voy a haber conseguido quince puntos si básicamente casi le rasgo la yugular? Estúpido tablero —murmuró la chica.
Terminaste el día uno, ¿quieres continuar con el extra?
El tablero daba dos opciones: una afirmativa y una negativa. Snixe no quería más, así que como tenía la potestad de ignorar el tablero, lo hizo. Quería salir a pasear, pero no tenía una persona a la cual quisiera invitar. Se reprendió por no tener un perro o un gato, al menos una tortuga gigante para sacarla a pasear y tener excusa para irse.
Rió burlesca ante sí misma. Estaba soltera, ¿por qué debía pensar en darle explicaciones a alguien sobre algún lugar que quisiera visitar?
—Por muy buenos que estén mis personajes otome, voy a salir sola y me la voy a pasar bien. Llamaré a Azzier y... —sonrió—, ah, claro. Ya no estamos juntos. No importa, igual saldré.
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Chocolate con fantasía
RomanceSnixe es fanática de los juegos otome a tal punto de obsesionarse de los personajes 2D. Los juegos lo eran todo para ella, hasta que, en uno de ellos encuentra un extraño minijuego que la hace desmayar, y cuando despierta, su mayor sueño se hace rea...