Anthony Stark sufre al sentir como su Alfa marcaba a otro Omega, sabiendo que puede morir pronto del dolor decide pasar sus últimos días escapando del Capitán Hydra. Pero su esposo y Alfa lo bastante peligroso no dejará de buscarlo.
Aj había sacado a su hermana menor de la casa, ambos veían en silencio como una mamá gallina cuidaba de sus pollitos mientras picoteaban el suelo. Él quizás no era tan inteligente como Cass pero si comprendía algo a la perfección; la muerte.
No fue difícil notarlo, durante la tarde de ayer su tío Bucky había gritado y de la nada empezó a maldecir, nunca lo había visto tan destruido. Su madre lloró en la cocina siendo consolada por tío Sam y sus abuelos se habían encerrado en la habitación.
Todos parecían devastados y tío Tony estaba débil.
- ¿Porqué todos lloran? Ayer estaban bien.
Aj acarició con cautela la cabeza de su hermana menor.
- No todos los días se puede reír Cass, hay días malos.
- Oh, tío Tony dijo lo mismo - algo dentro del mayor se removió con tristeza -, dijo que podían haber días, meses o años malos, pero siempre lo veía riendo.
Aj pateó levemente una piedra del suelo, si bien comprendía lo que había pasado no sabía como explicarle el significado de muerte, ni mucho menos porque no podría ver más al tío Tony.
- Aj ¿Quién es él?
El Beta mayor vio en dirección a la entrada de automóvil, sus pequeños ojitos se cerraron intentando ver a la distancia.
Un hombre alto, demasiado alto, venía vestido con ropa holgada y su cabello siendo tapado por la capucha del suéter, era extraño ver a una persona caminando por esos lados. Aun más pues el pequeño juraba no haberlo visto nunca en su vida.
Cuando estuvo lo suficiente cerca el hombre saludo con una sonrisa a los pequeños. Cass se escondió dentro del pilar de la terraza mientras su hermano mayor hacía frente.
- Buenos días ¿sus padres se encuentran en casa?
Aj notó un ligero mechón de cabello rubio o cobrizo y aunque lo intentara no podría saber cual era su casta.
- Si.
- ¿Podría hablar con ellos? Quisiera hablar de un viejo amigo.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Sam abrió la puerta, sus sobrinos llevaban mucho tiempo afuera y sin embargo, se sorprendió cuando vio a un extraño hablar con Aj. Al instante salió llamando la atención del individuo y quizás a la pequeña Cass.
- Sam Wilson ¿Cierto?
Lo reconoció, claro que lo hizo fue al hombre que Tony saludó aquel día en la plaza.
- Si - titubeó - ¿Puedo ayudarle?
- Para empezar soy Gordon, antiguo amigo de Tony.
- Lo sé, pertenece a Hydra - gruñó.
- Pertenecía, si... Tony me pidió entregar algo, cuando ya sabe... Y creo que vengo en el momento justo.
Sam analizó al hombre frente a él, venía de incognito aunque no había tenido problema en decir su nombre y propósito.
