El sol alumbraba los muebles de la habitación, las sábanas blancas sobre las dos jóvenes pegadas una contra la otra. La felina abrazaba por la cintura a la rubia escondiendo su pecho, la princesa la rodeaba con sus brazos.
—CHICAAAAAS!—Grito Glimmer adentrándose a la habitación.—Esta el desayuno—Recibiendo un almohadazo en su cara por parte de Catra.—Bien! Ya me voy.
—Odio a tus amigos—Sin ánimos respondió Catra aún abrazada.
—Lo se, lo se—Acarició el corto cabello de su novia que se encontraba en sus brazos.—Ya te acostumbrarás a ellos—Escucho un bufido por parte de la menor.
—Me voy a bañar—Intentando zafarse de los brazos de la rubia. Noto como la miraba triste.—Hey, te parece desayunar juntas?—Tomo las manos de esta.
—Hmm okey—Asintió.
Catra se tomó una rápida ducha, al salir vio a Melog esperándola en la puerta, solo estaba el, supuso que Adora estaría entrenando o haciendo el desayuno.
—Sabes donde está Adora?—Le preguntó a su amigo pero este negó a lo que tendrían que buscar. Caminaron por los pasillos del castillo hasta toparse con la cocina donde pudo ver a la joven.—Hey Adora—Rodeo sus brazos en la cintura de la princesa.
—Hey Catra—Acarició una de las orejas de la menor. Escucho un ronroneo.—Y eso?—Alzo una ceja divertida.
—N-No fue nada—Se sonrojo aún más, ya ni sabía lo que estaba diciendo.
—Aja.
—Que cocinas?—Intento mirar la sartén que se encontraba en las manos de la mayor.—Más bien, tú cocinas?—Rio.
—Claro que si—Haciéndose la ofendida.—Y estoy cocinando panqueques.
—Jam jam—Hizo un sonido con sus labios dandole carcajadas a la mayor.—Ya quiero probarlos—Sentadose en uno de los banquitos de la mesada.
Adora sirvió los panqueques para sentarse al lado de su novia.
—Hoy tendré que entrenar—Catra Bufo al escuchar.
—Bien, yo creo que iré con Entrapta a ayudarla en unas cosas que me pidió—Dijo para retirar los dos platos y lavarlos.
—Okey, pero no hace falta que laves los platos—Se encaminó hasta la castaña.—Lo haré yo—Dijo agarrando delicadamente sus manos para detenerlas.
—Nono—Negó con su cabeza sin pensarlo.—Tu hiciste el desayuno, yo lavaré los platos, a parte son dos—Explicó.
—Umhh bien—Suspiro.—Te amo, adiós—Le plantó un beso en la mejilla y se fue hacia el bosque.
—Supongo que iré con Trapta—Secando los platos escucho como alguien iba hacia la cocina.
—Hola Catra!—Era la misma Entrapta con sus cabellos morados en dos coletas altas, de su lado siempre iba su robot mucho más pequeño, Emily.
—Hola Trapta—Catra la saludó con su tierno apodo que todos ya la llamaban así.—Que era lo que querías decirme?—Se apoyo en la mesada.
—Ohh sip, digamos que quería volver a la zona del terror a buscar unas piezas para hacer otro invento—Digamos que no le cayó muy bien la noticia a Catra.—Iremos con Escorpia, Emily y Hordak—Mierda.
—B-Bien—Asintió la castaña acariciando su nuca. No era fácil volver a ese escalofriante lugar, sobre todo con Hordak.
—Entonces vamos!—La agarro de la muñeca.—Ya están allá.
Caminaron por el bosque hasta que encontraron una zona de color verde con relieves y construcciones pero algunas destruidas. Empezaron a buscar a órdenes de Entrapta.
