Capítulo 3

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Una vez la prueba finalizó, por segunda vez huyó de su lado como un cobarde, dada las circunstancias y por todo lo que había sucedido su única opción era evitarlo por ahora.

¿Cómo tendría que sentirse al respecto? ¿Frustrado? ¿Feliz? ¿Triste? Una mezcla de emociones que ni siquiera podía pensar con claridad por aquella aparición espontánea e imprevista. Al principio creyó que haber huido fue un error pero no lo hubiesen dejado marcharse, además que la prueba estaba por finalizar.

–Eso estuvo cerca pero ¿Ese no era tu compañero?–lo cuestionó

–Sí, aunque hubiera querido saludarlo aún no es el momento, se supone que fug me asesinó y prefiero mantener mi identidad en el anonimato, de lo contrario volverán a buscarme, además recuerda que nuestro objetivo es traer a Viole ¿Lo recuerdas? Si queremos lograrlo debemos despistar a la gente de fug, hacerles creer que se deshicieron de nosotros.

–Tienes toda la razón, supongo que la posibilidad de conocerlos aún es lejana ¿Cierto?

–Al parecer te emociona conocerlos ¿Sabes? Eres una buena persona Wangnan, ahora es cuando más pienso que esa pudo ser la razón por la cual Viole te ayudó, si resulta ser quién yo creo que es, entonces te aprecia como amigo.

–¿Puedo preguntarte de quién hablas?

–Bam, su nobleza y carisma era lo que todos conocían de él, alguien que solo quería luchar si era para proteger a sus amigos–tomó sus propias manos, apoyándose en el balcón– Juramos subir juntos la torre, eramos una combinación extraña si piensas que yo soy un tipo ruin mientras que él era un alma pura, aún así funcionaba muy bien pero ese sueño se vio afectado cuando en una prueba lo perdí, todo por culpa de una perra envidiosa y egoísta.

–Todos creen que Viole es despiadado pero en realidad es todo lo contrario, es una de las mejores personas que he conocido a pesar de todo lo que pasó.

Aquel comentario generó dudas en la mente de Agnis, básicamente el rubio ganó su confianza y esa podría ser la clave para sus respuestas.

–¿A qué te refieres exactamente?

–Me dijo que fug lo capturó hace seis años, lo entrenaron día con día y permaneció solo todo ese tiempo, las únicas personas con las que podía intercambiar palabras era sus superiores, por eso después estuvo muy feliz de reunirse con nosotros, aunque fue difícil claro.

–¿Seis años?–murmuró asombrado– Es exactamente el tiempo que Bam desapareció ¿Nunca te dijo si...

Aquella pregunta no pudo ser completada, Dann había entrado de la nada a la habitación y en su rostro podía notarse preocupación, colocándose a la defensiva.

–¡Líder, intentamos detener al intruso pero no pudimos, entró a la fuerza y dice que quiere ver la Khun!

–¿¡De quién diablos estás hablando!?

––De mi.

Aguero reconoció esa voz, en cualquier lado y circunstancia definitivamente la reconocería. Aún sintiéndose incrédulo de lo que estaba sucediendo miró hacia la puerta, conectando con los ojos negros que lo observaban con enojo.

Se trataba de Hatz.

Su sorpresa era tanta que no podía emitir una sola palabra, sus manos sudaban frío y su corazón comenzaba a latir con velocidad.

Luego de unos segundos de tensión, dejó salir un suspiro para tranquilizarse.

–Wangnan, déjanos a solas para hablar.

El rubio hizo caso a la petición y se marchó de la habitación.

Ninguno de los dos empezaba la conversación, solo se miraban; al pasar los segundos el de cabellera negra empezó a caminar hacia él.

Guilty Heart || BamKhunHatzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora