Guilty Heart || BamKhunHatz

Capítulo 25: Final

La mañana siguiente llegó, durante la noche, Hatz no había podido conciliar el sueño, ni siquiera entró a la habitación en la que habitualmente dormían los tres; optó por quedarse en el sofá para no incomodar a nadie. Pasó toda la noche pensando en la difícil conversación que había tenido con Khun, la separación que había planteado y el dolor que había causado a la persona que amaba profundamente. No podía soportar la idea de terminar en malas condiciones con Khun y anhelaba encontrar una forma de reconciliarse.

Mañana a primera hora partiría y aun no arreglaba las cosas con Khun, entendía su postura ante la situación pero no quería dejar a la persona que amaba en esas condiciones.

Luego de darse un baño y vestirse, se dirigió hacia la habitación con la intención de hablar con Khun una segunda vez. Abrió la puerta y lo primero que vieron sus ojos fue a él en la cama, cubriendo su cuerpo con las sábanas. Bam también se encontraba a su lado, pero entendió la situación y se fue para darles privacidad.

Una vez se quedaron a solas, se sentó a un costado de la cama y con mucho cuidado empezó a acariciar su cabello.

–Khun– murmuró– Necesito hablar contigo de nuevo.

El contrario no estaba dormido, pero aún así se negaba a mostrar su rostro, no quería hablar, no quería volver a escuchar lo mismo de ayer.

Hatz pudo notarlo y solamente suspiró, sin embargo no se iría de esa habitación sin haber cruzado palabras con él.

–Khun, necesitamos hablar de nuevo. Quiero que sepas cuánto significas para mí y que no quiero que esta separación nos haga daño, por favor.

–Si ya me dijiste todo lo que tenía que saber ¿Para que repetirlo?–  respondió, sin mirarlo

–Te amo más de lo que puedo expresar. Si he llegado a la conclusión de que necesito espacio para crecer, también significa que necesito aprender a comprender lo que significas para mí. No quiero que nuestra relación se termine para siempre, nunca dije eso– Hizo una pausa y lo miró– Tienes razón en todo lo que dijiste, es obvio que no esperé seis años para volver a irme, por supuesto que no, te prometo que solo será un tiempo y cuando nos volvamos a ver, podré protegerte, seré capaz de enfrentar a cualquiera.

Hubo silencio en la habitación por algunos segundos, sin embargo, Khun se levantó poco a poco, sentándose a su lado, y aunque su rostro no era de felicidad, al menos ya había conseguido ser escuchado.

Con algo de cautela, se acercó mucho más a él y temiendo de ser rechazado, lo envolvió en un abrazo. Los latidos de su corazón se aceleraron al sentir los brazos de Khun en su espalda.

Aquel abrazo fue una mezcla de emociones, ambos cuerpos se presionaban uno contra el otro, como si quisieran ser uno solo. Sus corazones laten con fuerza, compartiendo sus latidos en un abrazo que es más que un gesto físico; como si ambos desearan que el tiempo se detuviera, que ese momento nunca terminara.

–No voy a detenerte, Hatz– murmuró, con tristeza– También te amo y por eso confiaré en ti, que solo es algo temporal y volverás a nuestro lado.

–Así será, lo prometo– acarició su cabello– Khun, sería incapaz de olvidarte, no lo hice en seis años que simplemente eramos amigos, ahora que te amo mucho menos lo haré.

–Al comienzo me molesté porque no quería aceptarlo, no podía entender el porqué y me preguntaba a mi mismo ¿En realidad me ama?– suspiró con pesadez– No es fácil para mí asimilarlo, después de imaginar un futuro juntos, de hacernos promesas.

Hatz se separó del abrazo para poder mirarlo a los ojos, colocando sus manos en los hombros de Khun.

–Cualquier justificación que te dé no será suficiente para sanar el dolor de tu corazón y lo sé, pero por favor no quiero, que ni siquiera por un segundo, pienses que me voy porque ya no quiero estar contigo, con ustedes.