❛𝑬𝑿𝑻𝑹𝑨 𝑶𝑶𝑰

171 16 0
                                    

▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂

DARKSIDE
el lado oscuro.
▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂▂

01. 𝕰𝖑 𝕻𝖗𝖎𝖒𝖊𝖗 𝕭𝖊𝖘𝖔.

Kyoko estaba nerviosa, intranquila.

Su mirada iba de un lado a otro como el cuervo que venía a traerle noticias a su padre, pero esto era diferente. Azriel vendría a verla por razones importantes, o al menos eso le había comentado el azabache antes de haberse alejado de ella. Sus manos sudaban, se perdían en el más allá de estiramientos contra sus propios nervios, seguidos de la irónica abstinencia. Devlon notaba el nerviosismo de su hija, la cual parecía andar de aquí a allá, junto a Thassan, ambos observaban sacando conclusiones.

── ¿Y si hablas con ella? ──lo miro expectante.

──No.

── ¿Estás esperando a que explote? 

──No.

── ¿Entonces?

──Cuando llegue el momento me lo dirá, además tu compañera se carcajeó cuando averiguó de lo que se trataba. 

── ¿Me viste cara de advino? No tengo ni idea de porque se rio ──se giró para ver a Kyoko ──. ¡Deja de dar vueltas, ya veo el pozo que estás haciendo! 

Kyoko escuchando aquello, decidió frenar e irse directo para el lugar acordado, seguido de su padre que la detuvo antes de que se fuera, besando su cabeza con delicadeza ─como si ella fuera a romperse en millones de pedazos─ y la dejó marchar. La actitud de la joven se transformó en una más calmada, aunque sin mucho de los nervios anteriores que amenazaban con volver a salir con solo pensar en la presencia del macho ilirio que pidió verla de manera urgente. Los días en la Iliria eran hermosos, todo el paisaje cubierto de nieve lograba tranquilizar a Kyoko de tal forma que mantenía su calma de manera intermitente, o al menos una parte de ella gritaba de ir a buscar a Rhysand o Cassian y ponerse a jugar como niños. 

Sus pasos le guiaron con un afortunado desespero hasta el hermoso valle que fue encontrado por ambos ilirios en su búsqueda por tener un poco de paz, logrando toparse con un hermoso jardín repleto de flores que decoraban el alma en pena a ambos ataba hasta la eternidad. Allí fue donde Azriel le canto su primera vez, donde ella supo desde aquel momento, que algo en su interior crecía como una flor. Kyoko se encontraba pensando, oculta entre sus propias sombras que parecían atraerla ─sin mediar palabra─ a la realidad, obligándole a sentarse para contener aire en sus pulmones, y liberarlo poco después.

──Kyo ──le llamó una voz masculina, ella se dio vuelta sonriendo al encontrarse a Azriel ──. ¿Estás bien?

Ella asintió, por lo cual, él decidió sentarse enfrente de ella, rozando con sus piernas, los pies de ella. Ambos estaban en silencio, disfrutando la compañía del otro; su voz resonaba por  todo el lugar, llegando hasta los oídos de Kyoko, que estaban más que atentos a las palabras que Azriel pronunciaba con amor, susurrándoles como mensajes envueltos en cintas de oro. El macho ilyrio cantaba para ella cada vez que tenía la oportunidad, dejando en claro que amaba hacerlo, como si fuera parte de él. Kyoko pensó por un momento. ¿Qué era parte de ella? ¿Qué tenía ella? Nada. Se entristeció, llamando la atención del cantor de sombras. Azriel se detuvo, levantándose para tomar las manos de Kyoko.

── ¿Qué ocurre? ──preguntó tan preocupado. 

──Nada.

──Mentirosa ──ella lo miro enfadada.

── ¿Qué quieres que te diga? ──enfatizó ──. Tu cantas, tienes sombras que te dice que hace quien, y en donde. Rhysand puede meterse en la mente de las personas, lo cual no es muy agradable que digamos, Cassian tiene potencial... Y yo...

Azriel la miró, curioso.

── ¿Y tú?

──Solamente tengo un pasado con el que no puedo lidiar.

──Eso no es cierto ──Kyoko levantó la cabeza, recibiendo el aire frío de golpe, junto al aliento del macho, Azriel estaba tan cerca de ella que juraría haber sentido un dulce aroma a vainilla colándose por ahí.

── ¿Entonces que tengo de especial? ¡Mírame Azriel! ──ella se señaló ──. Soy una iliria que perdió a su madre cuando solamente tenía nueve años, nunca pude pasar mucho tiempo con ella porque la ley lo dictaba. Perdí una de mis alas cuando intentaba escapar del tipo que abusaba de mi madre, su fuerza terminó por desprender una de mis las y... ──la mano del cantor de sombras apretó su hombro, mirándole fijamente en señal de entender ──. Devlon me adoptó, y lo quiero como a un padre, pero mi oscuridad me aterra tanto que temo por provocarle un daño del cual no pueda recuperarse jamás. No hay nada que yo sepa hacer, no existe nada bello en mi persona.

──Tu presencia es muy importante para muchas personas Kyoko ──él había tomado su mentón, acariciándolo con delicadeza ──. Thassan te adora, Devlon te quiere como si fueras su hija, y creo que ambos lo recordamos cuando te abrazó por las tres horas que desapareciste desde el Rito de Sangre, o cuando Sygh se lazó a tu encuentro cuando eras pequeña ──Kyoko lo miró con lágrimas en los ojos, sollozando. ──Eres importante Kyo, no solo porque estás cuando te necesitamos, si no tu presencia provoca paz en cualquier ser que logre conocerte.

──Azriel...

──Y en mi provocas mucho más que paz, a lo mejor corro el riesgo de que no aceptes este lazo que nos une, pero tengo la certeza de que nunca nos separaremos ──volvió a susurrarle, esta vez más nervioso.

La cercanía les iba jugando a favor, mientras que la joven askari decidió acercarse a él con un poco de indecisión, quien terminó por unirla al cuerpo del ilyrio con parsimonia. Los copos de nieve caían por sus hombros, terminaron por coronar la cabeza de Kyoko, quien movía su cabeza logrando que estos cayeran quedando en su frente. El joven ilirio rio con fuerza al ver aquello, pero poco le importó, porque al unir su frente con la de Kyoko, un calor abrazador los fundió a ambos en ese reencuentro emotivo que terminó su cruzada con fervor, aferrándose uno al otro. Luchando en aquel encuentro que determinó el hermoso y creciente tatuaje que se colaba desde los dedos del macho ilyrio hasta los de su compañera que estaba apresándolo contra su anatomía, logrando que ambos cuerpos fueran como un rompecabezas, digno de ser admirado por los reyes del arte. 

«Te amo, Kyoko», le susurró a ella.

𝐃𝐀𝐑𝐊𝐒𝐈𝐃𝐄  ◞◞ azriel.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora