siete

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Mysterion se hallaba merodeando por South Park.

Hasta hace unos días, había creído descubrir algo en la casa de Butters; algo como que su tierno "protegido" podría ser el causante de la maldad que a veces rondaba por la pequeña ciudad nevada.

Sin embargo, no tenía pruebas concretas, solo una curiosa cicatriz en el mismo ojo, misma mejilla, y si Butters se quitaba su pupilente, también mismo problema ocular.

En realidad, era una tontería solo pensar algo tan tonto...

Estaba claro quien era el Profesor Chaos. Solo Kenny, quien aún trataba de descubrir sus sentimientos quería dudar un poco.

Mysterion dió dos pasos antes de sumergirse en un callejón. Sabía que si se sentía acorralado, pronto vendría el Profesor Chaos a por él, creyendo que tiene ventaja.

Y así fue, Chaos no tardó mucho en llegar al callejón de Mysterion, quien lo esperaba fumando un cigarrillo.

—Llegaste, Chaos. —Le dijo apenas visualizó su silueta. —Pensé que llegarías un poco más tarde.

Chaos dió dos pasos antes de tropesarce.

Mysterion rió, en realidad, ¿Chaos siempre había sido tan torpe? ¿O lo estaba notando a penas que sospechaba que era Butters?

Soltó su cigarrillo y lo dejó caer al piso. Chaos parecía particularmente curioso aquella noche.

Con paso sigiloso, Mysterion se acercó lo suficiente a Chaos cómo para que sus cuerpos estuvieran a pocos centímetros.

—Chaos... —Entonces, ¿Por qué?

Kenny se dió cuenta de que no podía percibir dulzura de alguien como Chaos. La amabilidad de Butters abundaba, se desbordaba. En cambio, Chaos era alguien caótico, con claros problemas emocionales que parecía querer desquitar su ira.

—Chaos, dilo ahora, di quien eres. Y no te haré más daño.

Chaos soltó una risita.

—¿Por qué lo haría? —Algo andaba mal. La voz de Chaos, ahora estaba áspera, dura, como si estuviera siendo arrancada de su garganta.

En caso de que fuera Butters, ¿Habría estado llorando?
Mysterion aprovecho su situación ventajosa y le quitó la máscara velozmente, abriendo los ojos de par en par.

No era Butters.

—¿S-Scott? —Dijo Mysterion, mirando incrédulo a quien tenía en frente.

—Oh mierda...

Kenny ardió en furia, ya que, si Butters no era Chaos, quería decir que el maldito idiota que había golpeado a su... A Butters, había sido este estúpido mocoso diabético.

—¿Mierda? ¿Mierda?— Kenny estaba perdido, realmente ardía en cólera. Solo de pensar en este estúpido niño golpeando a Butters, se volvía loco. Se estaba volviendo loco.

Molesto, tomó a Scott del cuello y lo lanzó bruscamente a la pared.

—Tocaste al único ser vivo importante y puro que hay en esta maldita ciudad. —Dijo. Sus ojos desprendían un sentimiento de terror al mirarlos, como si en el simple hecho de verlos, vieras el infierno. —Cuando esta mierda de ciudad se caiga a pedazos, él será el único que estará bien. Incluso si tengo que morir mil veces, un millón, cien billones de veces... Lo haré, solo para que él esté a salvó.

—¿De quién mierda hablas? ¿Qué, acaso te enamoraste de alguien? —Scott reía para sí mismo.

Kenny paró un segundo.
¿Qué?

No.

No.

No.

...
¡Hola!
Lamento la demora. Está semana estaré publicando todos los capítulos que tengo guardados, junto con mensajitos especiales para las personas que más me han apoyado en ésta historia.

En verdad les agradezco muchísimo, y disculpen la demora. Este capítulo es corto nada más por el aviso.
Les veré después, personitas~ ¡Y gracias!

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⏰ Última actualización: Aug 06, 2023 ⏰

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