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El Rey se levantó lleno de un semblante serio, aunque su rostro no tiene cambios, Li Dewei aún puede sentir su preocupación después de que su poderosa aura retrocedió.

Esto lo intrigó, repasó la trama un momento y parecía que realmente había alguien así en el palacio, el príncipe Fernando, el hermano menor del Rey Orión, y el último sobreviviente.

Además del príncipe Fernando, parecían haber 3 o 4 hermanos y hermanas más los cuales ya habían sido víctimas de la peste.

Muy extraño, usualmente los reyes y emperadores preferían a sus hermanos muertos para evitar la amenaza al trono, sin embargo el rey frente a el parecía preocuparse sinceramente.

"Su majestad, ¿Debería llamar a los médicos imperiales?" El sirviente preguntó con cautela, nadie sabía mejor que el sobre la sobreprotección que tenía el Rey con su familia.

Todavía recuerda la época oscura cuando una gran parte de la familia real fue consumida por la plaga, el Rey apenas estaba entre sus 20 y 30 años, una persona muy alegre y animada, pero después de tantas perdidas se volvió tan callado y reservado como lo es hoy a sus casi 40 años.

Cada vez que recordaba esto soltaba un suspiro interno.

Entonces cuando recibió la noticia del joven Príncipe no pudo evitar aspirar una bocanada de aire frío y fue a avisarle a su Majestad lo más rápido posible, sin saber que habría un doctor de la plaga dentro y al verlo sintió su sangre enfriandose del terror.

Estos médicos con traje de cuervo eran el peor presagio que alguien pueda encontrar.

El Rey se levantó del trono y bajó caminando con paso rápido, la presión en su cuerpo hizo temblar al sirviente y Li Dewei solo se hizo a un lado apoyandose en el bastón.

La poderosa voz retumbó en sus oidos al escucharla tan de cerca, "¿Dónde se encuentra ahora?".

El sirviente respondió con la cabeza gacha, "Respondiendo a su majestad, ya han llevado al príncipe a su habitación".

El Rey asintió, "Ve por mi médico personal".

El sirviente asintió rápidamente y se retiró con la misma rapidez, mientras que el Rey volteó con Li Dewei, "Debido a las circunstancias me temo que debemos hablar otro día, se le avisará cuando debe volver".

Dicho eso se preparó para irse, pero pareció recordar algo y volvió a hablar con Li Dewei, "Lo que escuchó aquí espero que el señor Damien tenga algo de discreción, me temo que no sería bueno para ambos descubrir rumores sobre el Príncipe fuera de estos muros".

Nuevamemte quería irse pero esta vez quien lo detuvo fue Li Dewei, "Su majestad".

La voz era sofocada por la máscara pero para su sorpresa aún la escuchaba con claridad, era nítida y agradable de escuchar.

El Rey volteó ligeramente la cabeza indicando que hablara, "Si no es un inconveniente para su majestad, me gustaria echarle un vistazo al príncipe".

Li Dewei ciertamente aprovecharía esta oportunidad. El Rey en cambio frunció ligeramente las cejas, "El príncipe no es un objeto con el cual probar su valía, Doctor, Si algo le pasara a el príncipe su cabeza rodaria por los suelos".

Naturalmente Li Dewei ya estaba al tanto de eso y respondió con facilidad, "Oh, claro que lo sé, pero estoy seguro de mi capacidad como médico".

Li Dewei podía sentir que el Rey dudaba así  que siguió engatuzandolo, "Piénselo, su Majestad, si el príncipe pudo llegar a tal estado entonces no fue tratado correctamente por sus Médicos, permitir que ellos lo vuelvan a tratar lo mantendrán en la misma situación, incluso podría empeorar en consecuencia de la falta de mejora".

El domador de mundos [Sin corregir]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora