(Leandro le cuenta a Bartolo todo el romance que tiene con Paulita y le pide que por favor lo deje entrar un rato para poder hablar con ella)
Bartolo. Me estas diciendo que quieres que yo la haga de alcahuete.
Leandro. Pero señor solo le pido que me deje hablar con ella un rato.
Bartolo. ¡Un medico! ¡Un hombre honorable como yo!
Leandro. Señor , Paulita no vive feliz aquí con su padre, su padre no quiere casarla. Ella esta fingiendo su enfermedad, en realidad no se ha quedado mudada , han venido varios doctores con varios remedios, pero ninguno la ha podido curar.
Bartolo. Con que esta fingiendo su enfermad ¿eh?
Leandro . Si, así es.
Bartolo. ¿estas enamorado de ella?
Leandro. Claro que si señor.
Bartolo. ¿ y ella de ti?
Leandro. Estoy seguro que si.
Bartolo. No se diga mas, yo te ayudaré a que puedas casarte con ella.
Leandro. ¿usted haría eso por mi?
Bartolo. Si, solo te pido que hagamos un trato.
Leandro. Si señor, dígame. ¿ qué es lo que quiere?
Bartolo. Muy fácil, a partir de ahorita te llamaras Casimiro y te harás pasar por un excelente boticario.
Leandro. Pero señor yo no se nada de esa rama.
Bartolo. Tu no te preocupes, esto es lo que harás, en un rato voy ir a revisar a Paulita, le tomare el pulso y luego te llamare por el nombre de Casimiro para que entres.
Leandro. Esta bien señor.
( Pasan unas horas y Bartolo entra a revisar a Paulita)
Bartolo. Don Jerónimo, he traído un buen amigo mío que podría ayudarnos con la enfermedad de su hija.
Don Jerónimo. ¿Eso es cierto? Excelente
Bartolo. Así es Don Jerónimo
Don Jerónimo. ¿Qué esperas para hablarle? Anda ve.
(Bartolo sale de la habitación y va por Leandro)
Leandro. Un placer conocerlo Don Jerónimo, mi nombre es Casimiro.
Don Jerónimo. Me ha dicho el Medico Bartolo que tu puedes curar a mi hija.
Leandro. Si señor yo se que darle a su hija para poder curarle la enfermedad.
(Leandro le pide a una de las criadas que prepare un té con las hierbas que él le va diciendo)
Bartolo. Don Jerónimo, usted va a observar como su hija se recuera pronto con el té que le mando hacer Casimiro.
Don Jerónimo. Si es así, yo estaré muy agradecido ya que es mi única hija y no se imaginan cuanto es que la quiero, les daré lo que quieran.
(Entran con el té y se lo dan a Paulita)
Bartolo. Hay que salir un rato y dejar que haga efecto el té.
(Salen todo y Don Jerónimo se queda hablando con Leandro)
Leandro. ¡Don Jerónimo!
Don Jerónimo. ¿Qué paso Casimiro?
Leandro. Señor, yo amo a su hija y quería pedirle que si se logra a curar me deje casarme con ella.
Don Jerónimo. Pero... ¿Cómo dice que la amas si la acabas de conocer?
Ginés. ¡ Don Jerónimo! ¡Don Jerónimo! ¡Venga!
(Don Jerónimo va corriendo a la habitación de Paulita)
Don Jerónimo. ¿Qué es lo que pasa?
Paulita. Padre...
Don Jerónimo. Esto es un milagro, mi querida hija puede hablar.
Paulita. ¡Padre! Yo me quiero casar con Leandro yo lo amo.
Don Jerónimo. Pero hija mía, ¿ Qué cosas dices? A parte ¿Quién es ese tal Leandro que dice hija?
Leandro. Yo Don Jerónimo, mi verdadero nombre el Leandro y le suplico que me deje casar con su hija.
( Don Jerónimo voltea a ver a Paulita)
Paulita. Por favor Padre, te lo suplico.
Don Jerónimo. Yo le prometí a Casimiro , digo a Leandro que si te curaba le iba a dar lo que el quisiera y si es lo que ambos quieren los dejare casarse.
Paulita. Gracias padre.
Leandro. Gracias Don Jerónimo.
